Desde el comienzo de la pandemia, la tendencia ha sido que, lo que pase en Europa, ocurrirá en este lado del océano semanas después. Por eso, científicos temen que con la llegada del verano en el norte, también surja una quinta ola de infecciones.
Luego que aumentaran los casos en el Reino Unido , Italia, Alemania y Francia, los Estados Unidos han visto un resurgimiento de casos de COVID-19, de una media de 30,000 diarios dos meses atrás a 80,000 a mediados de mayo. En gran parte debido a las subvariantes de ómicron, que han mostrado ser altamente contagiosas. Esto podría significar otro verano pandémico.
Puntos clave
- En los Estados Unidos, los casos han pasado de 30,000 diarios hace unos meses, a 80,000 ahora.
- Expertos alertan sobre un resurgimiento en el verano.
- Podrían volver a implementarse normas de salud pública.
La razón de esta posible quinta ola, además de la diseminación de las subvariantes, es que los países han estado flexibilizando las normas impuestas durante la pandemia, desde la distancia física hasta el uso de máscaras.
En cualquier caso, es una señal de alerta de que el coronavirus llegó para que darse, y que la pandemia no ha terminado.
Por supuesto, esta nuevas olas afectarán más a países con tasas más bajas de vacunación. Y, dentro de un mismo país, a áreas con menos inmunización.
En los Estados Unidos esto es particularmente notorio: el riesgo de contraer COVID depende mucho del grado de vacunación del área geográfica.
En California, el 70% de la población está completamente vacunada, mientras que en Alabama, es solo el 50% y en Carolina del Sur el 55.8%.
La disparidad en las tasas de vacunación por etnia/raza es otra variable que abre la puerta a mayor circulación viral y a más contagios.
En total hay más de 220 millones de personas completamente vacunadas. Los Centros para el Control y la Distribución de Enfermedades (CDC) consideran que una persona está "completamente vacunada" cuando tiene las dos dosis iniciales, no cuenta a los refuerzos.
La cuestión es la distribución de esas dosis.
En los 38 estados para los que se puede calcular una tasa total de vacunación por raza/etnia, al 4 de abril de 2022, el 85% de los asiáticos, el 65 % de los hispanos y el 63% de los blancos no hispanos habían recibido al menos una dosis de la vacuna contra COVID-19, tasas superiores a la de las personas de raza negro (57%).
Se sabe que una mayor vacunación individual genera una sólida inmunidad colectiva, lo que provoca que el virus deje de circular porque simplemente no encuentra nuevos organismos a los que infectar.
Frente a la posibilidad de un verano difícil otra vez a causa de COVID, algunos gobiernos locales están comenzando a actuar. El Departamento de Salud de Nueva York está recomendando a ciertos residentes que utilicen máscaras en lugares cerrados.
Epidemiólogos advierten que el verano es momento de resurgimientos, como lo fue con la variante delta el verano pasado. Y que la próxima variante puede no ser tan "amigable" como ómicron.
Por eso, insisten en que los gobiernos deberán tener la flexibilidad de exigir volver a ciertas normas de salud pública si la curva de la pandemia vuelve a ser ascendente.
Insisten en que estas reglas, de establecerse durante el verano, deberían seguirse, para proteger a toda la población de nuevos casos y hospitalizaciones, pero también para aquellas personas inmunocomprometidas, o aquéllas que no pueden vacunarse.