No todos los tipos de cáncer se pueden evitar, pero sí hay riesgos que se reducen al tomar ciertas medidas a tiempo. La niñez es el momento oportuno para adoptar hábitos que protejan de enfermedades y hagan de ese adulto en formación un individuo consciente de la importancia de cuidar su salud.
Algunas vacunas, rutinas diarias y hasta el tipo de alimentación son factores que influyen en el posible desarrollo del cáncer. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) han revisado aspectos que los padres deben considerar para prevenir la posible aparición de la afección. En ese sentido, el caso de Kristina es una referencia.
Kristina se hizo una prueba de Papanicolau de rutina y, a sus 34 años, también le hicieron la del virus del papiloma humano, por primera vez. Así fue como le encontraron el virus y, después de otro examen, le detectaron cáncer. “En ese momento, sentí que se paró el mundo. Quedé devastada”, contó a los CDC.
El VPH es un virus común que se transmite de persona a persona durante las relaciones sexuales y puede causar varios tipos de cáncer, como el de cuello uterino. A Kristina tuvieron que practicarle una histerectomía. Además de la agonía que le causó esta experiencia, la situación también afectó la relación con su esposo, quien tuvo que investigar para poder comprender cuán prevalente es el VPH y que puede tenerse por años sin presentar síntomas.
“Mi mensaje es este: tuve la oportunidad de prevenir el cáncer. Por favor, no pierdan su oportunidad. Vacunen a sus hijos”, dijo la sobreviviente que ahora buscar crear consciencia en madres y padres.
La forma más efectiva de evitar el virus es la vacuna. Esta protege contra los tipos del VPH que causan cáncer y puede aplicarse desde los 9 años de edad.
Cuida su piel y evita los bronceados
“Ojalá pudiera volver a tener 16 años y aconsejarme no empezar a broncearme. Voy a hacer todo lo que pueda para asegurarme de que mis hijos no lo hagan”, dijo Mallory, una sobreviviente de cáncer de piel que compartió su historia con los CDC.
El cáncer de piel es el tipo más común en Estados Unidos. Las tres formas con mayor incidencia son el carcinoma basocelular, el carcinoma espinocelular y el melanoma, el más peligroso. Aunque tienen altas probabilidades de curación, pueden causar desfiguración y su tratamiento es costoso.
La mayoría de estos tipos de cáncer son provocados por la sobre exposición a la luz ultravioleta (UV): unas cuantas quemaduras solares graves pueden aumentar el riesgo de que tus hijos desarrollen la enfermedad en el futuro. Tomar sol durante 15 minutos sin protección es suficiente para causar daños; de acuerdo a los CDC, broncear la piel es lesionarla.
Pero el cáncer de piel se puede prevenir. Enseña a tus hijos que la exposición al sol es peligrosa, así sea durante un día nublado (las nubes no protegen de los rayos). Acostúmbralos a usar un bloqueador solar con factor de protección alto, a diario, y evita que se bronceen.
Aléjalos del cigarrillo
La mejor forma de prevenir un cáncer causado por el consumo de tabaco, como el de pulmón, es no acercarse a este. La mayoría de las personas adquieren este hábito durante la adolescencia: casi 9 de cada 10 fumadores de cigarrillos los probaron antes de los 18 años y el 98% lo hizo antes de los 26, según los CDC.
Además, dice la institución que el año pasado cerca de uno de cada cinco estudiantes de secundaria superior reportó haber consumido un producto de tabaco en los últimos 30 días. Y cerca de uno de cada 12 había fumado un cigarrillo.
Explícale a tus hijos por qué no quieres que fumen, háblales de sus efectos nocivos en la salud. Recuerda que el cigarrillo de otras personas también puede causar cáncer de pulmón: no los expongas al humo de segunda mano.
Enséñalos a llevar un estilo de vida saludable
La obesidad en niños y adolescentes ha aumentado en las últimas dos décadas y no hay indicios de que vaya a detenerse. Un niño con sobrepeso tiene más probabilidades de ser obeso cuando sea adulto y esto lo puede llevar a enfrentar problemas de salud física y mental.
La obesidad en los adultos está asociada a un mayor riesgo de diabetes tipo 2, enfermedad cardíaca y muchos tipos de cáncer. Ayuda a tus hijos a mantener un peso adecuado a través de hábitos saludables, como comer de forma balanceada, evitando las grasas trans, el exceso de sal e incluyendo alimentos ricos en proteína, fibra y grasas y carbohidratos "buenos".
Anímalos a hacer actividad física regularmente. No olvides que, más allá de lo que digas, tu ejemplo es la mejor manera más efectiva de que ellos adopten estos hábitos.
Es cierto que no muchos tipos de cáncer ocurren de forma inesperada y son inexplicables, pero siguiendo estas recomendaciones se pueden prevenir algunos y lograr un impacto positivo en la salud de tus hijos. No importa si es un niño o un adolescente, desde ya puedes comenzar.
¿Tienes más preguntas sobre este tema? Consulta con nuestros especialistas, sin costo, en HolaDoctor Consultas.
Más para leer sobre cáncer: