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¿Tienes piedras en el riñón? Deshazte de ellas
Por julioguzbra@hotmail.com
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Piedras dolorosas
Tener piedras en el riñón, o mejor dicho, cálculos renales podría complicar tu vida más de lo que imaginas. ¿Sabes por qué se producen?, ¿de qué tamaño son?, ¿de qué material están hechas? Por suerte, todas las respuestas se encuentran en esta fotogalería que a continuación te presentamos.
Según explica la Asociación Médica Americana se trata de un trozo de material sólido que se forma en un riñón cuando hay niveles altos de ciertas sustancias en la orina. Aunque dichos compuestos normalmente se encuentran en la orina no suelen causar problemas a niveles más bajos.
El tamaño y la forma de las piedras en los riñones varía, ya que hay piedras que pueden ser tan pequeñas como un grano de arena o más grandes como una perla. Incluso hay algunas piedras que pueden llegar a alcanzar el tamaño de una pelota de golf, ¿puedes imaginarlo?
Tipos de piedras
Como si se tratara de una mina instalada en tu riñón, se pueden encontrar piedras de distintos materiales. El más común es el calcio, el cual forma parte normal de una dieta sana y se acumula en los riñones cuando no es utilizado por los huesos y los músculos, explica el Departamento de Salud y Recursos Humanos de EU.
Se puede formar una piedra de ácido úrico cuando la orina contiene en demasía este compuesto. Las personas que comen mucha carne, pescado y mariscos son más propensos a desarrollarlas. De ahí la importancia de mantener una dieta equilibrada.
Otros materiales
La estruvita también puede alojarse después que se sufre una infección urinaria. Del mismo modo, las piedras de cistina se producen por un trastorno genético, lo que significa que es un problema que se transmite de padres a hijos.
Algunas personas corren más peligro que otras para presentar cálculos renales. Si presentas una afección que altera los niveles de sustancias en la orina, existen antecedentes familiares de piedras en los riñones, hay bloqueos de las vías urinarias o tienes problemas digestivos, el riesgo de presentar esta complicación es muy alto.
¿Debo llamar al médico?
Aunque depende del tipo de situación, existen casos en donde la atención médica ante los cálculos renales es urgente. Si se presenta dolor extremo en la espalda que no desaparece, hay presencia de sangre en la orina, fiebre y escalofríos, vómitos, así como orina con mal olor y molestias al momento de evacuar líquidos consulta al doctor.
Para saber si padeces cálculos o no el médico te realizará un examen físico en donde te preguntará tus antecedentes médicos. Los análisis de orina y sangre, así como los estudios con imágenes lo ayudarán a completar el diagnóstico.
¿Cómo se tratan?
Esto dependerá del tamaño y su composición. Por ejemplo, cuando las piedras son muy pequeñas no se requiere de un tratamiento pero sí del suministro de medicamentos para el dolor. Una forma de deshacer las piedras es mediante el consumo de líquidos, informa la Biblioteca Nacional de Medicina.
Existen algunos fármacos de venta con receta que pueden ayudar con esta complicación. Por ejemplo, los medicamentos conocidos como bloqueadores alfa relajan las paredes del uréter, lo que amplía las vías por lo que las piedras, cuando son pequeñas caben fácilmente y pueden ser evacuadas al orinar.
¿Y si las piedras son grandes?
En este caso el procedimiento es distinto, ya que el médico puede usar una máquina con ondas de choque para aplastar la piedra, lo cual se conoce como litotricia. Por otro lado, la ureteroscopía consiste en un dispositivo que se inserta por la uretra y se pasa por la vejiga hasta llegar al uréter que puede fraccionar la piedra con energía láser.
Es otro instrumento diseñado para reducir el tamaño del cálculo, el cual tiene la forma como de un cable delgado que se inserta directamente al riñón mediante un corte en la espalda. Una vez que localiza a la piedra se encarga de eliminarla. Informa el Departamento de Salud y Recursos Humanos de EU.
Pronóstico
Los cálculos renales en sí son muy dolorosos, pero la mayoría de las veces se pueden eliminar del cuerpo sin causar daño permanente. Sin embargo, cuando no se encuentra y trata la causa este problema suelen reaparecer y el riesgo de presentar infección urinaria o daño al riñón debido a un mal tratamiento es latente.
Por fortuna esto sí es posible. Mediante cambios en las cantidades que se consumen de ciertos alimentos como líquidos, sodio, proteína animal, calcio y oxalato se pueden prevenir. No obstante, si padeces este problema, es posible que tu médico mande a hacerte estudios de orina para calcular los niveles de minerales que hay.
El secreto
Gran parte de la clave para evitar esta molesta situación consiste en beber abundantes líquidos. Por ejemplo si consumes entre 2 y 3 litros de agua natural todos los días las posibilidades de presentar una piedra es cada vez más lejana.
Si se busca evitar las piedras de oxalato de calcio, reducir el consumo de sodio, proteínas animales, así como evitar los alimentos con altos niveles de oxalato como espinaca, nueces y salvado de trigo puede ayudar, pero si el material acumulado es ácido úrico limitar las proteínas naturales es la prioridad.
Factores de riesgo
Aunque hay escenarios que con cambios en la alimentación se pueden evitar, existen algunos otros que simplemente suceden. Por ejemplo, se ha encontrado que los hombres blancos tienen un mayor riesgo de desarrollar cálculos que otros grupos a partir de los 40 años, mientras que algunas mujeres aumentan el riesgo a partir de los 50.