Jessica Simpson no podrá seguir con la Dieta Weight Watchers

El día de Navidad la actriz ya había ratificado los rumores. A través de un video institucional del programa Weight Watchers 360º informó que había bajado 50 libras (22,5 kilos), que estaba nuevamente embarazada y que se sentía en la cima del mundo. Pero no pudo seguir con la dieta porque está contraindicado para ese estado.

Para anunciar al mundo la noticia, Jessica publicó en Twitter una foto de la bebé Maxwell con una gran inscripción que dice “big sis” en la arena. Conjuntamente, los voceros de Weight Watchers confirmaron en su página de Facebook el nuevo estado de la actriz: “Tras bajar 50 libras, volvió al peso que tenía antes del embarazo, y espera un niño para el próximo año”.

De esta manera, se develó el misterio sobre su peso. Aún así, se la vio paseando por la playa ocultando con un abrigo su segundo embarazo, a solo siete meses del nacimiento de su primera hija Maxwell Drew. La rubia fue noticia durante varios meses. desde que firmó un contrato por $4 millones de dólares con la empresa Weight Watchers

Simpsons se convirtió en una de las embajadoras de la marca, y se comprometió a recuperar el peso ideal en un tiempo estipulado por la empresa. Nunca se supo con certeza lo que subió durante el embarazo, pero se dijo que llegó a pesar 176 libras (80 kilos) y otros aseguran que alcanzó las 200 libras (90 kilos).

La empresa habría puesto como fecha límite el fin de agosto para que la actriz perdiera entre 22 y 33 libras (10 y 15 kilos) de las supuestas 66 (30 kilos) ganadas en el embarazo. Las autoridades del programa indicaron que para una altura como la de ella (5`4” pies – 1,60 metros) el peso ideal rondaba entre las 117 y 146 libras (53 y 66 kilos).

Pasada esta primer etapa comenzaron una serie de rumores porque la actriz no terminaba de recuperar la figura. La verdad estaba bien oculta…en el vientre de Jessica, ya que lo que le impedía seguir bajando de peso era el nuevo embarazo del futuro hermanito o hermanita de Maxwell Drew.

Los voceros de WW felicitaron a Jess, Eric y Maxwell y comunicaron que la rubia no continuará con el programa para bajar de peso durante el embarazo, pero podrá aprovechar todo lo que aprendió. Ahora sabe cómo hacer elecciones saludables para no subir tanto de peso como en su anterior embarazo. “Para tener un bebé sano hay que ser una madre sana”, agregaron.

Al seguir el programa se le empezó a ver más delgada, haciendo ejercicio físico 4 días por semana y una hora de cardio. Otro factor importante fue la dieta que asigna puntos a las comidas según su cantidad de proteína, fibra, carbohidratos y grasas. Casi todas las frutas y vegetales tienen cero puntos y se puede consumir cuanto se quiera.

La duda es si finalmente Jessica logró cumplir el contrato firmado con la empresa, si realmente se hará acreedora de los $4 millones, o si lo bajado no fue suficiente como para contentar a Weight Watchers. Tal vez el nuevo bebé traiga, como se dice, un pan debajo del brazo, para compensar los millones que no pudo embolsar.

La dieta que permitió que Jessica recuperara su figura siempre estuvo guardaba celosamente, aunque se “filtró” un menú titulado “La dieta Simpson / Johnson” que respetaba el clásico sistema de puntos de la empresa, e incluía platos vegetarianos indicados para un tal “Eric”.

Desayuno: omelette de clara con tomate, albahaca, zuchini y cebollas rojas. Tostada de pan fermentado. Almuerzo: pinchos de pollo con salsa de maní, repollo con salsa de sésamo y cítricos. Snack: pincho de vegetales grillados con salsa verde. Cena: langostinos con fideos soba y tomates.

Desayuno: papas revueltas con huevo poché. Almuerzo: pescado a la sartén con gazpacho. Snack: ensalada de melón y pepino. Cena: pollo grillado al limón con ensalada primavera. Postre: brochetas de ananá grillada con miel y tomillo.

Desayuno: avena con frambuesas y jarabe de arce. Almuerzo: sándwich de pollo grillado con verduras orgánicas y aderezo liviano. Snack: crocantes de maíz con queso. Cena: carne grillada con cebollas y brócoli al jengibre. Postre: pastel de melocotón

Desayuno: cereales con quinoa y manzanas. Almuerzo: langostinos salteados con ensalada de tomate y maíz, verduras orgánicas con aderezo liviano. Snack: manzanas en rodajas, con queso Cena: atún salteado con papas asadas. Postre: melocotones asados.

Desayuno: no figura. Almuerzo: brochetas de pollo grillado con salsa de maní, vegetales asados con salsa verde, hummus de pimiento rojo y tortilla chips horneados. Snack: pastel de albaricoque y frutillas. Cena: pavo con chile, espinacas salteadas. Postre: nuevamente, pastel de albaricoque y

Desayuno: tostadas a la francesa con pan de grano entero. Sandía. Almuerzo: pescado blanco salteado con papas asadas y cebollas rojas, romero y espárragos Snack: pizza mediterránea de pan pita. Cena: pavo asado con ensalada de brócoli. Postre: macarrons

Desayuno: muffins de harina de maíz con arándanos. Almuerzo: brocheta de langostinos a la pimienta y ensalada de verduras orgánicas. Snack: pizza de zuchinis. Cena: linguini con brócoli, pollo y queso de cabra. Postre: rollos de canela.