Ampliamente utilizado en la gastronomía mundial y con una larga cantidad de registros históricos en los que se menciona su uso, el eneldo es una hierba que no puede faltar en tu cocina. Sin embargo, no solo puede complementar tus platillos, también puede ser de gran ayuda para cuidar tu salud.
Foto: GETTY IMAGES
El eneldo (Anethum graveolens) también llamado abesón, es una planta que pertenece a la familia Apiaceae. Es originario de la zona del mediterráneo y existen registros que datan de la antigüedad sobre el uso de sus frutos, hojas y semillas con fines gastronómicos, comúnmente como condimento e infusión, medicinales e incluso como ofrenda o valor de cambio.
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El eneldo se caracteriza por otorgar un sabor fuerte a las comidas y bebidas, pero también es conocido por sus múltiples propiedades medicinales. Los investigadores informan que esto puede deberse a que es rico en aminoácidos, flavonoides, como vicenin y kaempferol, vitaminas, como la A, B y C, y minerales, especialmente calcio, hierro y manganeso. Aquí te mostramos sus principales beneficios:
Controla el azúcar en sangre
Durante mucho tiempo se vinculó al eneldo con un control de la diabetes. Si bien la evidencia que respalda este uso es preliminar y los investigadores desconocen a que se debe, todo indica que su consumo ayuda a reducir las fluctuaciones de los lípidos en suero y los niveles de insulina en la diabetes inducida por corticosteroides.
Una forma de prevenir la osteoporosis, una enfermedad que se caracteriza por provocar fragilidad de los huesos, es cumpliendo con el consumo recomendado de calcio. Este mineral brinda protección contra la pérdida de densidad mineral ósea y el debilitamiento de los huesos. Por su rico contenido de calcio, el eneldo es un buen complemento para proteger nuestros huesos.
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Dormir mejor
Históricamente el eneldo fue utilizado para conciliar el sueño. En la actualidad, muchas investigaciones señalan que esto puede deberse a la presencia de flavonoides y vitaminas del complejo B que se hallan en sus aceites esenciales. Estas sustancias estimulan la secreción de hormonas y enzimas que promueven efectos sedantes y calmantes, ayudando a dormir.
Previene infecciones
Desde la medicina tradicional se informa que el eneldo es una hierba útil para prevenir o tratar infecciones, especialmente las provocadas en heridas de la piel. Sin embargo, no existe suficiente información sobre la forma de uso, seguridad y efectividad.
Para el hipo
El eneldo tiene propiedades carminativas, es decir, ayuda a expulsar los gases y también reduce la formación de estos, por lo que puede ser de ayuda para aliviar el hipo. También se cree que puede ser útil gracias a sus efectos sedantes, que sirven frente a otros factores comunes de hipo, como las alergias o trastornos nerviosos.
Su efecto carminativo también permite prevenir una de las afecciones que más vergüenza genera: las flatulencias. Si bien pueden resultar incomodas, sus consecuencias también pueden ser dañinas, ya que el gas que constantemente se acumula puede presionar y afectar los órganos de la cavidad torácica.
Contra la diarrea
El eneldo suele señalarse como una opción natural para frenar la diarrea, ya que posee propiedades germicidas y bactericidas (debido a la presencia de flavonoides), combatiendo las infecciones que la provocan. También se lo asocia con efectos digestivos, por lo que puede aliviar otra de las causas más comunes de diarrea: la indigestión.
Salud bucal
Las semillas y hojas de eneldo pueden brindar protección a los dientes y encías, ya que poseen aceites esenciales con propiedades desinfectantes, antioxidantes, y antimicrobianas. Además, se cree que puede refrescar el aliento.
Efectos secundarios
Si bien el eneldo está repleto de propiedades saludables y no se han comprobado efectos secundarios directos por su consumo, se recomienda precaución a personas con gastritis u otros padecimientos digestivos, problemas de presión arterial, diabetes, trastornos cutáneos o alergias, y a mujeres embrazadas o en período de lactancia.
Recuerda
Hasta contar con evidencia científica significativa proveniente de ensayos en humanos, las personas interesadas en utilizar terapias a base de hierbas y suplementos deben tener mucho cuidado. No abandones ni modifiques tus medicamentos o tratamientos, antes habla con el doctor sobre los potenciales efectos de las terapias alternativas o complementarias.
Fuentes consultadas:
American Botanical Council, Base Exhaustiva de Datos de Medicamentos
Naturales, Biblioteca Nacional de Medicina de EE. UU., Departamento de
Agricultura de EE. UU.
