Cómo prevenir enfermedades tras el paso del huracán Irma

Los hospitales de las zonas afectadas están tratando las secuelas, luego del paso del huracán. Al menos 35 hospitales en Florida, Georgia y Carolina del Sur cerraron totalmente y ordenaron evacuaciones parciales antes de Irma. El departamento federal de salud desplegó 500 empleados a Orlando para reforzar la respuesta médica y de salud pública.

El riesgo de los cortes de luz pone a las personas en peligro de contaminación por alimentos. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) recomiendan botar a la basura los alimentos cuyo consumo pudiera ser peligroso.

Debes desechar la comida que haya podido estar en contacto con el agua de una tormenta o inundación. La que tenga olor, color o textura anormal. Los alimentos perecederos (incluidos la carne, el pollo, el pescado, los huevos) que hayan estado a 40 grados Fahrenheit (4.5 grados Celsius) o más, por 2 horas o más. Todos los enlatados que estén abiertos, dañados o inflados.

Cuando vayas a descartar un alimento, hazlo de forma segura colocándolo en papel periódico, preferiblemente con doble papel y en bolsas plásticas amarradas. Y si comes en un establecimiento de alimentos, debes verificar que posean un generador eléctrico y abastos de agua potable, así sea agua de cisternas o en botellas.

Es importante mantener cerradas las puertas de la nevera y el congelador el mayor tiempo posible hasta que regrese la electricidad. Mientras no haya hay que poner en la nevera bloques de hielo o hielo seco.

Si los bebés están siendo amamantados, deben seguir siendo amamantados. Para los bebés que toman fórmulas, se les debe dar las fórmulas que vienen preparadas, si es posible. Si no es posible utilizar fórmulas ya preparadas, lo mejor es usar agua embotellada o hervida para preparar las fórmulas en polvo o concentradas. Lávate las manos antes de preparar los teteros y antes de alimentar al bebé.

También desecha las bebidas en cajas como jugos, leche, leche en fórmula para bebés y alimentos enlatados en casa que hayan entrado en contacto con las aguas de la inundación, ya que estos no pueden limpiarse o higienizarse de manera efectiva para ser consumidos.

No debes usar agua contaminada para lavar trastos, cepillarte los dientes, lavar o preparar comida, lavarte las manos, hacer hielo ni preparar fórmula para bebé. En el caso del agua potable que se vaya a consumir, se debe hervir por un mínimo de tres minutos antes de utilizarla, como medida preventiva.

Como medida de protección, las autoridades recomiendan a residentes que se laven las manos después de entrar en contacto con el agua estancada. Los juguetes de los niños u otros objetos que hayan estado en contacto con el agua de la inundación deben ser desinfectados antes de usarlos o incluso deben ser desechados.

Una vez restablecido el servicio, el agua puede contener sedimentos y estar muy turbia por eso es importante hervirla, de lo contrario se corre el riesgo de contraer enfermedades gastrointestinales, enfermedades respiratorias, hay una mayor prevalencia de infecciones causadas por bacterias, como la Salmonelosis, Hepatitis A y lesiones de la piel como sarna y dermatitis.

Hay una línea de ayuda que se activa en casos de desastre para ayudar a las personas a manejar el impacto psicológico de la tormenta. Preocupa que el estrés pueda conducir a algunas personas con problemas de adicción a sufrir una recaída. Por esa razón, las autoridades han contemplado esas posibilidades en sus planes de respuesta al huracán.

Otra causa importante de muerte antes o después de los huracanes son las lesiones. Ten cuidado al acercarte a los cuerpos de agua por las líneas de energía eléctrica que pueden haberse caído para evitar ser electrocutado. Los transeúntes siempre deberían pensar que un cable en la vía pudiera tener electricidad. El agua, además, es un buen conductor de electricidad y hasta un simple charco podría estar cargado de electricidad.