Cómo es vivir con enfermedad celíaca

La enfermedad celíaca es un trastorno autoinmune, en que los alimentos que contienen gluten hacen que el sistema inmunitario ataque y produzca daños al intestino delgado. El gluten es una proteína que se encuentra de forma natural en los granos, como el trigo, la cebada y el centeno.

La mayoría de las personas con enfermedad celíaca tienen uno o más síntomas estomacales; sin embargo, algunas no presentan síntomas ni sienten malestar. Algunos eventos de salud como una cirugía, el embarazo, el parto, una gastroenteritis bacteriana, una infección viral o el estrés mental grave, pueden desencadenar los síntomas de la enfermedad celíaca.

Hinchazón o inflamación en el abdomen, diarrea crónica, estreñimiento, gases, náuseas, heces grasosas y con mal olor, dolor de estómago, vómitos. En niños celíacos, la incapacidad de absorber los nutrientes en un momento tan importante para el crecimiento y desarrollo, puede ocasionarles retraso en el crecimiento y pérdida de peso.

Son menos propensos a tener problemas digestivos, pero pueden aparecer. Otros signos son: anemia, lengua roja y brillante, dolor de huesos o articulaciones, depresión, ansiedad, dermatitis herpetiforme, dolores de cabeza, infertilidad o abortos involuntarios, ausencia de períodos menstruales, aftas o sequedad en la boca, convulsiones, hormigueo o entumecimiento de manos y pies, cansancio.

Afecta sólo a personas con genes particulares. Éstos son comunes y casi un tercio de la población los tiene. Para que el trastorno se manifieste, la persona tiene que comer alimentos que contengan gluten. A veces, se desencadena en personas en situación de riesgo que comen gluten durante mucho tiempo. También puede ser hereditaria en 10 al 20% de los casos.

Evitar alimentos con gluten es fundamental, como la mayoría de los cereales, granos, pasta y muchos alimentos procesados. Si bien tendrán que evitar ciertos alimentos, la buena noticia es que hay disponibles muchos alimentos saludables libres de gluten, y que la dieta libre de gluten mejora los síntomas y previene daños mayores.

Los alimentos como carne, pescado, frutas, verduras, arroz y patatas, sin aditivos ni condimentos, no contienen gluten y son parte de una dieta balanceada. Se puede comer pan, pasta y otros alimentos libres de gluten que ahora son más fáciles de encontrar en las tiendas. También pueden comer papa, arroz, soya, amaranto, quinua, trigo sarraceno o harina de frijol en lugar de harina de trigo.

Soledad Sarraceno Pérez tuvo una niña a la que le diagnosticaron enfermedad celíaca a los pocos meses de haber nacido. Al averiguar los antecedentes familiares, descubrieron que su esposo era celíaco asintomático, de modo que él mismo desconocía su enfermedad. Le costó mucho aceptar la idea y encontrar el modo de idear un plan de alimentos por fuera de lo tradicional.

“Lo más complicado no es la compra de productos, pues éstos por suerte ya están disponibles en muchos más lugares que antes, sino explicar a maestros, familiares y compañeros que la niña no puede ser invitada con galletas o cierto tipo de golosinas que otros comen habitualmente, porque le harían mucho daño. Y lo mismo, llevado a un cumpleaños, cualquier fiesta o reunión: todo parece estar hecho para la gente no celíaca” explicó Soledad.

Lee las etiquetas de los alimentos -especialmente alimentos en conserva, congelados y alimentos procesados- para descartar que contengan gluten. Identifica a los alimentos etiquetados como “libres de gluten”. Pregunta en el restaurante si hay disponible un menú libre de gluten y al anfitrión de una cena o fiesta acerca de las opciones libres de gluten, antes de asistir.

En los últimos años, cada vez más personas sin la enfermedad celíaca han adoptado una dieta libre de gluten, ya que creen que esta opción es más saludable o que podría ayudarlos a perder peso, y se transformó en una dieta de moda. Sin embargo, no existen datos que sugieran que la gente deba evitar el gluten para perder peso o gozar de mejor salud.

Una dieta libre de gluten no es siempre una dieta saludable, ya que puede no proporcionar los suficientes nutrientes, vitaminas y minerales que el cuerpo necesita, como fibra, hierro y calcio. Algunos productos libres de gluten pueden ser altos en calorías y azúcar. Si crees que podrías tener enfermedad celíaca, no empieces a evitar el gluten sin consultar antes con tu médico.

Escuela de Medicina Rutgers de Nueva Jersey, en Newark, Nueva Jersey, EE.UU.; Instituto Nacional de la Diabetes y las Enfermedades Digestivas y Renales de EE.UU., Celiac Disease Foundation.