Alimentos que debes comer cuando tienes gripe

Llega de manera rápida y fuerte. Dolores de cabeza, musculares, fiebre, congestión, escalofríos y cansancio son algunos de los síntomas con los que se hace acompañar la gripe, una infección respiratoria causada por cierto número de virus que afecta a entre 5 y 20% de los estadounidenses año con año.

Por suerte, y por muy difícil que pueda parecer, saborear una paleta de hielo podría calmar otro de los signos como es el dolor de garganta. Además, al mantenerte hidratado se obtienen suficientes líquidos para estimular la mucosidad y así disminuir la congestión, según explica la Biblioteca Nacional de Medicina.

En tanto, la carne de pavo es una buena fuente de nutrientes. ¿Sabías que en sólo en 4 onzas de pavo hay 32 gramos de proteína? Además contiene zinc, que fortalece el sistema inmunológico contra cualquier enfermedad como la gripe. Como una sugerencia, trata de agregar salsa de arándano a tu emparedado, le dará un sabor inigualable.

La carne de pavo también tiene una buena densidad de vitaminas B3 y B6 para asimilar la energía de los alimentos y posee menos grasa saturada que la carne roja. De la misma manera contiene fósforo para tener huesos y dientes fuertes y hierro para ayudar a transportar el oxígeno en la sangre a todas las células.

Prepararte una ensalada de varios vegetales quizás no suene tan tentador para el paladar, sobre todo, cuando se tiene gripe, pero mezclarlos en un jugo te cargará de antioxidantes que estimularán la función inmunológica y te mantendrán hidratado. Informa la Biblioteca Nacional de Medicina.

Nutritiva e hidratante, así es la sopa de pollo. Si no nos crees, entonces presta atención a lo que reveló un estudio de la Universidad de Nebraska, al confirmar que es capaz de hacerte sentir mejor porque reduce la congestión nasal y lubrica la garganta aliviando la irritación.

Además, otros estudios han demostrado que la sopa de pollo puede mejorar la capacidad de los cilios, las partes diminutas parecidos a los pelos de las fosas nasales, para proteger al cuerpo de las bacterias y los virus. Ahora no nos queda más que reconocer que nuestras abuelas tenían razón al recomendarlo tanto.

Según el Dr. Mark Moyad, de la Universidad de Michigan, "la vitamina C fortalece el sistema inmunológico, ayuda al cuerpo a combatir la gripe y a evitar complicaciones, como la pulmonía". Una manera estupenda de obtener esta vitamina es a través de las frutas cítricas.

Se trata de una buena opción para darle sabor a algunas comidas, pero también tiene propiedades antimicrobianas y estimulantes del sistema inmunológico. Además brinda un leve alivio a la molesta congestión.

De igual modo, este ingrediente también es rico en alicina, una sustancia con propiedades antisépticas que ayuda al cuerpo a combatir otras infecciones. Goza de sus beneficios tomando una infusión de ajo picado, con miel y limón.

Un estudio de los Archives of Family Medicine encontró que este alimento contiene propiedades analgésicas, antipiréticas y antibacteriales, lo que te ayudará a sentirte mejor y a salir a la brevedad de esta enfermedad. Puedes servirlo en polvo junto a otro alimento. ¡Sentirás sus efectos!

Tanto el té verde como el oolong y el negro ofrecen antioxidantes para combatir enfermedades. Además, respirar sus vapores son una efectiva alternativa para aliviar la congestión. Agregar una cucharada de miel y unas gotas de limón a estas bebidas ayudará a calmar el dolor de garganta. ¡Pruébalos!

Ya sea en rebanadas o en puré, las bananas pueden acabar con algunos de los síntomas que provocan la gripe. Junto con el arroz, el puré de manzana y el pan tostado, las bananas conforman la dieta médica BRAT que se les da a pacientes que se recuperan de la gripe.

Se trata de un expectorante natural que contribuirá a eliminar las flemas y es útil para combatir las infecciones en la garganta, debido a sus propiedades antisépticas. Para que trabaje en tu garganta prepara una infusión tibia de hojas de frambuesa y dos cucharadas de miel en media taza de agua, después haz gárgaras.

Si en tu caso aún no te contagias de gripe, lavarte las manos puede hacer la diferencia. De hecho, los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) estiman que al hacer esto reduce el número de personas que contraen resfriados y otros males en un 21%.

Si no te has vacunado contra esta enfermedad, todavía estás a tiempo. Todas las personas, a partir de los seis meses de edad deben hacerlo. Además es vital para quienes padecen asma, diabetes y enfermedades pulmonares crónicas, esto con la finalidad de evitar complicaciones.

Otra buena medida de prevención es evitar salir a lugares donde hay grandes concentraciones de personas. Si piensas hacerlo, evita saludarlas de mano y hazte acompañar de un gel antibacterial. De igual forma, si tú o tu hijo presentan síntomas de la gripe, eviten salir de casa.

Evita tocarte los ojos, la nariz o la boca, pues los gérmenes se diseminan de esta manera. Duerme bien, practica ejercicio y controla tu estrés. Cúbrete la nariz y la boca con un pañuelo al toser o estornudar y arroja el pañuelo a la basura. Informaron los CDC.