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Ébola: médicos que combaten el virus en África
Por pandalo@holadoctor.net
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Médicos Sin Fronteras (MSF) es una organización humanitaria fundada en 1971 por un grupo de profesionales preocupados por llevar cuidado médico a países con necesidades sanitarias extremas. En la foto, un médico de MSF lleva a una niña con síntomas de Ébola a hacerse exámenes, el 5 de octubre en Paynesville, Liberia.
Siempre listos
La organización está presente de manera activa en 70 países, en situaciones de epidemias, conflictos armados o desastres naturales, para ofrecer atención médica. En estos momentos hay 204 profesionales de la salud extranjeros en Liberia, Sierra Leona y Guinea para enfrentar la epidemia de Ébola. Ellos trabajaban con 1,700 profesionales locales.
Día a día
Según informó la Organización Mundial de la Salud (OMS) el 14 de octubre, hasta el momento se han registrado 8,914 casos, con 4,447 muertes, la mayoría en esos tres países. Pero el pronóstico es sombrío: vaticina 10,000 casos semanales, con más víctimas fatales.
Principios
La filosofía de Médicos Sin Fronteras es que, para controlar una epidemia, lo primero que hay que hacer es trabajar y fortalecer el sistema de salud del lugar en donde se originó. Por eso, el organismo ha manifestado que para acabar con el Ébola, hay que destinar más recursos a África.
Trabajo
MSF interviene en crisis sanitarias de emergencia como la del Ébola, pero también mantiene proyectos a largo plazo en distintos países para erradicar la malaria, el Chagas o el cólera, entre otras enfermedades; y también para asistir a los sistemas de salud locales.
Alto riesgo
Los médicos que trabajan en esta línea de fuego enfrentan graves riesgos de salud. Hasta el momento, 240 médicos se han contagiado el virus del Ébola trabajando en África, 120 de los cuales han muerto.
Recursos
MSF lanzó la voz de alarma ya en marzo de este año, y desde entonces reclama a la comunidad internacional mayor presencia en los países afectados por el Ébola. En un discurso ante las Naciones Unidas en septiembre, la doctora Joanne Liu, presidenta de MSF, dijo que por la falta de ayuda, "en vez de construir centros de salud estamos obligados a construir crematorios".
Educando
El trabajo de los profesionales de MSF no es sólo médico sino también político y social. Se trabaja con los gobiernos locales y con las comunidades. Desde informar sobre los síntomas del Ébola hasta explicar que los cadáveres son altamente infecciosos, el camino de la educación es largo.
En los vecindarios
Estos niños sentados en la puerta de la vivienda de Monrovia, Liberia, en donde contrajo el Ébola Thomas Duncan, crecerán sabiendo mucho sobre el Ébola, pero quizás no teniendo los recursos necesarios para que sea para ellos una epidemia del pasado. Duncan murió en Dallas, Texas, el 8 de octubre.
Resistencia
Hay barreras culturales, tradiciones ancestrales que han sido aliadas involuntarias del Ébola para que éste se expandiera de manera virulenta, por ejemplo, la creencia de que la infección es una especie de castigo. Los médicos llegan a las aldeas para explicar la realidad sanitaria y logran generar más prevención.
Ayuda colectiva
En estos tiempos en los que los virus emergen en un país y llegan a otro en avión, contener una epidemia es una responsabilidad colectiva, considera MSF. "No se trata sólo de proteger las propias fronteras", dijo la doctora Liu, en la reunión de Naciones Unidas.
Presencia humana
Los profesionales de salud son la presencia urgente en las zonas epidémicas, pero la "hoja de ruta" para erradicar el Ébola es más larga y necesita de planificación y recursos. Y es ahí en donde debe tener un papel crítico el liderazgo internacional. Sin esa fuerza colectiva, los virus seguirán ganando la batalla.