El cómo nos sentimos con nosotros mismos, las creencias que tenemos, las cualidades y capacidades que nos atribuimos, nuestra forma de pensar y sentir, todo eso forma lo que se llama autoestima. La autoestima puede ser alta o baja depende si te sientes bien o no en relación a ti mismo, pero también puede fluctuar y cambiar en el tiempo y muchas veces depende también de las cosas que nos sucedan.
Autoestima y enfermedad mental
Las personas que tienen alguna enfermedad mental como depresión o ansiedad suelen tener la autoestima baja. Construir la autoestima es un proceso de larga duración que viene desde la infancia pero que se construye sobre la base de sensaciones y experiencias que vamos incorporando a lo largo de la vida. Esta valoración es muy importante, ya que de ella dependen en gran parte la realización de nuestro potencial personal y nuestros logros.
Cómo se construye
Desde niños vamos formando un sentimiento de identidad y reconocimiento de nuestra propia autonomía. Vamos descubriendo nuestros sentimientos, que somos niños o niñas, que tenemos manos, piernas, cabeza y otras partes de nuestro cuerpo. También vamos reconociendo que somos diferentes a las otras personas y experimentamos sensaciones de aceptación y de rechazo por parte de los demás. Poco a poco, vamos construyendo una idea de nosotros mismos.
La adolescencia
Un momento de autodeterminación y afirmación de la identidad. Para poder crecer el joven necesita despegarse y desafiar a sus padres de la infancia. Pasa de la dependencia de la infancia a una etapa de independencia y confianza en sus propios recursos. Si llega con una fuerte autoestima a esta etapa, le será fácil alcanzar la madurez, si se siente inseguro o poco valioso, puede llegar a caer en conductas autodestructivas.
Pensamientos que no ayudan
La persona con baja autoestima tiende por ejemplo a sobregeneralizar, es decir, si algo no funcionó o no le gusta de sí mismo, pensar que todo será así o que todo lo que tiene que ver con él no sirve. Es decir, si la persona fracasa en algo, puede pensar que fracasará en todo. La generalización no ayuda, todo lo contrario.
Ser o estar
No es lo mismo ser torpe que actuar como un torpe, y así sucesivamente. Las personas con baja autoestima tienden a designarse y describirse en forma peyorativa y utilizan algo que sucedió como una forma de valoración en todo. Se sienten culpables de todo y se incriminan por no haberse dado cuenta antes y evitar el problema.
Blanco o negro
Muchas personas que tienen baja autoestima tienden a ver al mundo como polarizado, es decir las cosas son blanco o negro, como categorías absolutas. Son extremadamente críticos de sí mismos y no aceptan medias tintas. O sale todo bien y perfecto o no sirve de nada. Por otro lado, tienden a pensar que las cosas salen mal es por un problema personal y que tiene que ver con él como persona y no con cosas que pasan.
Presuposiciones
Las personas que sufren de baja autoestima muchas veces piensan que a los demás no le interesa lo que les sucede y que todos piensan mal de él. Entonces, muchas veces se ponen a la defensiva y tienden a ponerse agresivos o desafiantes con los demás como respuesta a esa indiferencia. Esto puede generar un sin fin de malos entendidos y una cadena de agresiones.
Cámbia un signo negativo por uno positivo
Anímate a cambiar el No por alternativas positivas. Por ejemplo, si te sientes inhibido, no te quedes en silencio, piensa en qué cosas importantes tienes para decir y hacer. Piensa en forma positiva hacia lo que está por venir, pero siempre teniendo en cuenta que se trata de un proceso global, no de algo que sucederá de la noche a la mañana.
No te compares con los demás
Lo peor que puedes hacer es compararte con los demás. La realidad es que nunca se conoce a fondo la vida de los demás y lo que uno realmente conoce es la superficie y lo que los demás desean mostrar. Concéntrate en lo que es realmente importante y en tus propios objetivos y fortalezas, recomienda la presidente de la consultora en desarrollo Lolly Daskal, de la revista Inc.
No necesitas hablar muy fuerte
Tendemos a pensar que las personas que hablan más fuerte son las que suelen tener más confianza en sí mismas. Sin embargo, las personas que más admiramos y las más profundas no son generalmente las más ruidosas, dice la autora.
Fortalezas versus debilidades
Hasta las personas que más éxito tienen pueden tener días y momentos de cierta debilidad sobre sí mismos. Lo importante es repasar cuáles son nuestras fortalezas y nuestras posibilidades en lugar de quedarnos con las debilidades y los límites, es decir, las cosas que no podemos.
El vaso medio lleno
Dicen por ahí que uno puede elegir ver el vaso medio lleno de agua o el vaso medio vacío, es decir, podemos intentar tener una visión más positiva de todo. Es cierto que tener pensamientos positivos no nos hará una persona más segura, pero también lo es, que la gente segura piensa cosas positivas de sí mismos. Recuerda siempre de lo que eres capaz y de las cosas buenas que has logrado en la vida, dice la experta.
No te engañes
La plegaria de la Serenidad, frase célebre del escritor estadounidense de origen alemán Reinhold Niebuhr dice así: Señor, concédeme serenidad para aceptar todo aquello que no puedo cambiar, fortaleza para cambiar lo que soy capaz de cambiar y sabiduría para apreciar la diferencia. Cambia lo que puedes cambiar. La gente con autoestima alta sabe que no puede cambiar el pasado pero sí el futuro, y decidir cómo quieren vivir.
Conseguir lo deseado
Una forma de mejorar tu relación contigo mismo es proponerte algo. Debe ser una meta clara y concreta que sepas que puedes lograrla en un plazo no muy largo. Por ejemplo, bajar 10 libras. La meta debe ser sincera, personal y realista. Establece tareas o pasos que se deben realizar para lograrla. Organiza esas tareas en el orden en que se deberían realizar y pon en marcha la primera y así sucesivamente. Evalúa los logros que vayas consiguiendo.
Lo mejor de ti mismo
Comprometerse con las cosas, dar lo mejor de ti mismo, es una forma de construir una carrera de éxitos y sentirte bien. Ya sabes que eres responsable de mucho de lo que sucede en tu vida, también sabes que debes apoyarte en tus fortalezas y decidir hacia dónde quieres ir. Ahora, es el momento de no dejarte llevar por excusas y dar lo mejor de ti en cada cosa que te propongas. Además de logros, tendrás una imagen de ti mismo fortalecida.