Tres drogas que están matando a los jóvenes

En setiembre de 2013, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) alertó sobre el preocupante aumento del consumo de drogas de diseño y sintéticas a nivel mundial, con cifras nunca vistas. La cocaína y la heroína pierden fama frente a las “Nuevas Sustancias Psicoactivas” (NPS, su sigla en inglés).

El panorama se refleja en el Informe Mundial de Drogas 2013 publicado por la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (ONUDD). Allí informan que el número de NPS conocidas por la organización, se incrementó de 166 en 2009, a 251 en 2012, y cada vez son más difíciles de controlar.

En el marco de la Ley de Cuidado de Salud a Bajo Precio, los servicios de salud se enfocan más que nunca en el cuidado preventivo, y se garantiza que las personas con problemas de adicciones podrán recurrir en busca de ayuda.

La Administración de Abuso de Sustancias y Salud Mental (SAMHSA) informa que entre 2005 y 2011, las visitas a salas de emergencia por el consumo de MDMA (metilendioximetanfetamina) y sus derivados, como éxtasis y Molly, subió en la última década un 128% en jóvenes menores de 21 años.

El éxtasis, que está gozando de especial popularidad entre los asistentes a conciertos, clubes nocturnos y discotecas, contiene fuertes estimulantes y propiedades alucinógenas. Provoca confusión, ansiedad, malestar psiquiátrico, hipertensión, hipertermia, e insuficiencia cardíaca y renal.

Peter Delany, Director de SAMHSA, dijo que los peligros reales a veces son difíciles de predecir. "El éxtasis es una droga de la calle que puede estar mezclada con otras sustancias aún más dañinas. Tenemos que aumentar la conciencia sobre los peligros y tomar medidas para evitar su uso", declaró.

Es una versión moderna y depurada del éxtasis. Es MDMA puro, el ingrediente principal de esas pastillas. MDMA es una droga sintética psicoactiva y químicamente similar al estimulante metanfetamina y al alucinógeno mezcalina. Se consigue en forma de cápsulas a entre $15 y $ 20 la unidad.

Molly es droga de moda entre los jóvenes, quienes la venden dicen que es más pura que el éxtasis, y ese “beneficio” se corre de boca en boca. Estas pastillas están asociadas a la muerte de varios jóvenes en discotecas de Nueva York, Boston y Washington D.C. y a centenares de hospitalizaciones.

Según el Instituto Nacional de Abuso de Drogas: confusión, depresión, problemas de sueño, deseo de fármacos y ansiedad, problemas de atención y memoria, aumento de la frecuencia cardíaca, hipertensión, náuseas, visión borrosa, desmayos y escalofríos. En dosis altas puede provocar la muerte.

Son estimulantes parecidos a las anfetaminas que se han vuelto cada vez más populares entre los usuarios de drogas recreativas en los últimos años. A pesar de su nombre, estas drogas sintéticas no tienen nada que ver con los cristales que se usan en la bañera. Se trata de una droga muy peligrosa.

Las sales de baño se vincularon con 23,000 visitas a salas de emergencia en 2011, según un informe de setiembre de 2013 de la Administración de Abuso de Sustancias y Servicios de Salud Mental (SAMHSA), en el primer estudio nacional sobre la relación entre emergencias y consumo de sales de baño.

Las sales se hicieron tristemente famosas en 2012, cuando se supo que fue la sustancia que consumió el caníbal de Miami, Rudy Eugene, antes de perpetrar su horroroso acto. Una nueva y poderosa adicción que causa psicosis y conducta violenta. Fue prohibida en 30 estados y su avance es preocupante.

En 2011 se registraron más de 10,600 casos de intoxicación por sales de baño, 18 veces más que en 2010. La Drug Enforcement Agency (DEA), emitió su prohibición en octubre de 2011, calificando a las "bath salts" (sales de baño) como drogas altamente peligrosas y adictivas.

Para alejar al mundo del avance de las drogas "El objetivo de nuestro trabajo debe ser reducir el número de personas en prisión, disminuir la carga de salud física y mental de las drogas y prevenir la transmisión del VIH", fue el mensaje difundido por el Centro de Noticias de la ONU.

En declaraciones a CNN, Rusty Payne de la DEA, dijo que los esfuerzos para disminuir los riesgos de consumo son generalmente compensados por las estrategias del marketing inteligente de los proveedores y distribuidores, quienes aseguran que éxtasis y Molly son sustancias "puras".