Los pistachos, pistaches, pistacheros, alfóncigos o alfónsigos son uno de los frutos secos comestibles más antiguos de los que se tienen registros, y si bien son reconocidos por su uso en la gastronomía de distintos países, también suelen consumirse por sus propiedades y beneficios para la salud.
Los pistachos son los frutos de Pistacia vera, un árbol que pertenece a la familia Anacardiaceae que tarda entre 10 y 12 años en producir la primera cosecha. Los pistaches no son estacionales, por lo que se encuentran disponibles durante todo el año. Además, son frutos secos, esto significa que comparten un rasgo en común con las nueces, almendras, o castañas, entre otros, y es que menos de la mitad de su composición está conformada por agua.
Los pistachos son una excelentes opción para obtener carbohidratos, proteínas, aminoácidos, grasas y fibra dietética. También son una rica fuente de minerales como calcio, fósforo, hierro, magnesio, potasio, sodio, y vitaminas, A, B, C, E y K. Por este motivo, es que su consumo se vincula con diferentes beneficios para la salud:
Cuidado del corazón
Por su riqueza en compuestos antioxidantes, fitoesteroles y grasas saludables, el consumo de pistachos se asocia a beneficios sobre la salud cardiovascular, específicamente la prevención de la hipercolesterolemia (niveles elevados de colesterol). Además, al igual que otros frutos secos, es una buena fuente de l-arginina, un aminoácido que puede prevenir el endurecimiento arterial y la formación de coágulos.
Comer pistachos también te puede ayudar a tener una buena digestión, gracias a su gran aporte de fibra dietética. Esta es una sustancia que agrega volumen a las heces, estimula el movimiento de los alimentos a través del tracto digestivo, aumenta las secreciones de jugos gástricos, y alivia los síntomas del estreñimiento y la diarrea.
¿Sirven para controlar el peso?
A diferencia de otros frutos secos, como las nueces de Macadamia, los pistachos tienen un aporte calórico relativamente bajo. Si a esto se le suma que aumentan la sensación de saciedad y son fáciles de trasportar y almacenar, se convierten en bocadillos ideales extender los períodos entre comidas, facilitando el control e incluso la pérdida del peso.
Afrodisíacos naturales
En los últimos años distintos estudios hallaron que los pistachos pueden influir en el desempeño sexual de los hombres. Si bien la evidencia aun es preliminar, se cree que esto se debe a que favorece el flujo sanguíneo hacia el pene, mejorando así la función eréctil.
Efectos antioxidantes
Los pistachos contienen cantidades significativas de antioxidantes, compuestos fundamentales para combatir los efectos de los radicales libres, moléculas inestables que afectan las estructuras celulares sanas, aumentando así el riesgo de diferentes enfermedades, incluido el cáncer.
Además de los beneficios antes desarrollados, el consumo de pistachos se asocia a otras bondades, como prevención de la diabetes, fortaleza cutánea (gracias a que posee ácidos grasos saludables y vitamina E) y mejor flujo sanguíneo (dado que estimula la absorción de hierro, mineral necesario para producir glóbulos rojos).
También parecen ser útiles para controlar la inflamación, por ser ricos en vitamina A y E, favorecer la salud cerebral, gracias a la presencia de vitamina B6, que ayuda a construir los aminoácidos esenciales para transmitir los impulsos nerviosos, y mejorar las defensas, debido a la presencia de antioxidantes.
Cómo consumirlos
Al igual que otros frutos secos, los pistachos se pueden conseguir en varias formas: con o sin cáscaras, endulzados o salados (aunque estas últimas opciones no suelen recomendarse debido a la presencia de sodio y azúcar). Puedes comerlos directamente crudos u horneados, así como molerlos o usarlos en polvo para agregarlos a tus platillos o bebidas favoritas. Solo recuerda guardarlos en recipientes herméticos y lugares frescos para que duren muchos meses.
Efectos secundarios
Los pistachos se consideran seguros para todas las personas si se consumen con moderación. Sin embargo, su ingesta excesiva se ha vinculado a diferentes problemas, como aumento de peso, dado su aporte calórico, aumento de presión arterial (si se los consume sazonados con sal) y problemas gastrointestinales, como diarrea, dolor abdominal, estreñimiento, hinchazón y gases.
Recuerda
Hasta contar con evidencia científica significativa proveniente de ensayos en humanos, las personas interesadas en utilizar terapias a base de hierbas y suplementos deben tener mucho cuidado. No abandones ni modifiques tus medicamentos o tratamientos, antes habla con el doctor sobre los potenciales efectos de las terapias alternativas o complementarias.
Fuentes consultadas:
Base Exhaustiva de Datos de Medicamentos Naturales, Biblioteca Nacional de Medicina de EE. UU., Clínica Mayo, Instituto Nacional de Medicina Complementaria y Alternativa.