Las 15 partes más “inservibles” del cuerpo

Tratar de discutir sobre las teorías del creacionismo y el evolucionismo podría desencadenar la siguiente guerra mundial. Y es que, las opiniones sobre estos temas son muy divididas. Sin embargo, algunos investigadores atribuyen a la evolución el que el ser humano haya dejado de emplear algunas partes de su cuerpo.

Se trata del tercer molar que suele aparecer en las dentaduras de personas de entre 16 y 25 años. De acuerdo con las teorías evolucionistas, estos dientes servían a los antepasados para masticar las raíces y los alimentos crudos. Sin embargo, hoy en día la dieta del ser humano ha cambiado y estas piezas dentales sólo funcionan como adorno.

La única función que tienen es la de engalanar el pecho de los varones. De acuerdo con el investigador del Departamento de Zoología de la Universidad de Oxford, Pau Carazo, el que los hombres tengan pezones simplemente es una prueba de que la evolución no es perfecta, pues se desconoce su aplicación en la actualidad.

Se encuentra ubicado cerca del punto de unión del intestino delgado y el colon, según explica la Biblioteca Nacional de Medicina. De acuerdo con algunas teorías podría funcionar como reserva de la flora intestinal para ayudar en digestiones problemáticas. No obstante, la gran mayoría opina que sólo se encarga de ocupar espacio.

La Biblioteca Nacional de Medicina explica que el cóccix es el hueso que se ubica en la punta inferior de la columna vertebral. Aunque en la actualidad no tiene gran uso, se considera que esta parte era empleada cuando los ancestros del hombre usaban la cola.

Conocido también como membrana nictitante, es una característica muy propia de ciertos animales, es una especie de telilla que puede cerrarse para proteger el ojo y humectarlo mientras se mantiene cierta visibilidad. Curiosamente el ser humano tiene esta membrana, pero sólo como un pequeño pliegue en la esquina del ojo.

Es un engrosamiento cartilaginoso en el borde de la oreja, el cual está presente en muchos seres humanos, pero con un uso inexistente. Esta parte del cuerpo se ha llegado a interpretar como un vestigio de la punta de la oreja común de los mamíferos.

Es un músculo que se encuentra en la parte inferior del abdomen y delante del recto mayor. Su origen está en el pubis y contribuye a mantener la tensión. Se dice que no todas las personas nacen con esta parte. De la misma forma, su función no queda del todo clara.

Algunas personas pueden presumir que tienen la habilidad de mover los músculos extrínsecos del pabellón auricular. Sin embargo, este tipo de “don” no ayuda en lo más mínimo a la realización de tareas importantes del cuerpo humano, a menos que fueras el elefante Dumbo y pudieras volar con ellas.

Un estudio de la Universidad de Lovaina y otro la Universidad de Barcelona encontraron que el vello corporal suele ser muy abundante en personas de raza blanca. Esto no significa que los blancos lo lleguen a emplear más que otros, pues se ha llegado a descartar su contribución en el desarrollo del organismo.

Se dice que este músculo fue empleado por otros primates, sobre todo para agarrar objetos con los pies. Se encuentra en la planta del pie y es el responsable de las famosas contracciones doloras de esta zona.

O también conocido como órgano de Jacobson, se encuentra en la nariz y es un órgano olfativo que detecta feromonas (una sustancia que provoca entre otras cosas, el deseo sexual). Aunque todos nacemos con éste, en una etapa temprana sus capacidades disminuyen hasta un grado en que no se utiliza en lo mínimo.

Es el pliegue de piel que cubre el extremo del pene, de acuerdo con una explicación de la Biblioteca Nacional de Medicina. Su uso en la actualidad es obsoleto, pues muchas personas recurren a la circuncisión para deshacerse de este exceso de piel.

¿Por qué se nos pone la “piel de gallina”? Un estudio encabezado por Richard Smith, de la Universidad de Kentucky, explica que es una reacción que protege al cuerpo del frío y que emerge en los momentos de asombro. Para algunos investigadores, la reacción de estas fibras musculares no son de gran ayuda para el cuerpo.

Se encarga de unir el codo de la muñeca y no todas las personas nacen con él. De hecho, su importancia en la actualidad es tan mínima que algunos cirujanos la aprovechan para reconstruir de ahí otro músculo.

Se trata de un pequeño músculo situado por debajo del hombro, que va desde la primer costilla hasta la clavícula. Su función ha sido debatida en la revista International Journey of Morphology. Algunos investigadores sostienen que era muy importante cuando el ser humano caminaba en cuatro patas.