El ballet la salvó de la anorexia

Su nombre es Charlotte Amos y es originaria de Devon, Inglaterra. Podría pasar como cualquier chica común y corriente excepto por un detalle, a los 11 años desarrolló anorexia nerviosa, que con el tiempo fue empeorando.

De hecho, tal era su condición que sobrevivía con una dieta de 50 calorías al día. Incluso, se negaba a comer durante semanas, al grado de no tener energías para poder levantarse de la cama. Las ideas de suicidio eran cada vez más recurrentes en su cabeza.

La gota que derramó el vaso fue cuando en medio de una de sus clases de ballet se desmayó y fue a parar al hospital, en septiembre de 2014. Ahí los médicos que la evaluaron determinaron que sólo le quedaban dos semanas de vida. El mundo se acababa para Charlotte.

Son muchos los factores que influyen en que alguien tenga anorexia. Por ejemplo, los genes y hormonas pueden jugar un papel. Asimismo, las actitudes sociales también pueden intervenir. En el caso Amos, las burlas que recibía en la escuela sobre su manera de comer influyeron en que cayera en este trastorno. (womenshealth.gov)

De acuerdo con womenshealth.com, las personas con este trastorno suelen tener miedo intenso de aumentar de peso o engordar, incluso cuando su peso es insuficiente. Además se niegan a mantener el peso en lo que se considera normal y su imagen corporal está muy distorsionada.

En tanto, otros signos incluyen piel amarillenta o manchada que está reseca y cubierta con fino vello, pensamiento confuso o lento, depresión, boca seca, sensibilidad extrema al frío, pérdida de la fortaleza ósea, así como atrofia muscular y pérdida de la grasa corporal.

Sin embargo, fue la misma prohibición de las clases lo que motivó a Amos a luchar por su vida. De la mano de un diario, Charlotte fue registrando los cambios que tenía que hacer para poder ganar peso y recuperar salud. Sus padres estuvieron con ella en todo momento.

Los objetivos del tratamiento se basan en restaurar el peso corporal normal y los hábitos alimentarios; un aumento de peso de 1 a 3 libras se considera una meta segura. No obstante, el mayor problema se centra en admitir que se tiene esta enfermedad. (Clínica Mayo)

Según Womenshealth, al incrementar la actividad social, al disminuir la cantidad de actividad física y usando horarios para comer, la persona con anorexia poco a poco puede aumentar de peso. Fortalecer su autoestima también es muy importante.

Pese a su situación, sorpresivamente Charlotte salió adelante, pudo equilibrar su alimentación, y por consiguiente comenzó a ganar más peso. “Cuando mis padres me dijeron que estaba lo suficientemente bien para volver al ballet, lloré”, recuerda la joven en su diario.

Y aunque todavía no se recupera del todo, pues asegura que aún tiene una imagen de sí misma diferente a la de los demás, Amos no se pierde ninguna clase de ballet. Incluso, físicamente luce mejor, al grado de haber ganado un certamen de belleza en su localidad. Ahora se siente mejor que nunca.

Pese a que la anorexia nerviosa puede ser potencialmente mortal, los programas de tratamiento pueden ayudar a las personas afectadas a regresar a un peso normal. Las mujeres que desarrollan anorexia a temprana edad tienen mayor posibilidad de recuperación completa. La supervisión médica constante es importante.