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Cómo enfrentan el duelo los hijos de los famosos
Por HolaDoctor
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“Era mi héroe”
Tras la muerte del actor Paul Walker a causa de un accidente automovilístico el 30 de noviembre de 2013, una de las personas más afectadas ha sido su hija Meadow Walker, quien ha expresado su sentir: “me enseñaste a sonreír y a no rendirme nunca. Le amaba incluso antes de saber lo que era el amor. Era mi héroe real”.
Padre de una niña
Walker se convirtió en padre por accidente, a los 25 años. Justo cuando su carrera comenzaba a despegar, descubrió que su entonces novia, Rebecca McBrain estaba embarazada. Pero todo cambió en 2011 cuando su hija Meadow se mudó a California para vivir con él. Walker dijo que su crecimiento personal fue inmediato.
De acuerdo con Paul William Walker III, padre del actor, el artista temía que tras vivir con su hija, su carrera actoral pudiera afectarle a la adolescente de 15 años, por lo que planeaba tomarse un descanso. “No sabía qué hacer. Tenía un corazón enorme. Yo estaba muy orgulloso de él”, confesó William.
Paris Jackson, totalmente desubicada
Tras la muerte de su padre Michael Jackson en 2009, Paris ha experimentado cambios en su estado emocional al grado de intentar quitarse la vida en junio de 2013. Ante estos hechos, acudió a un centro de rehabilitación donde recibió terapias.
Hijos de Michael Jackson
Al morir el "Rey del Pop" en junio del 2009 por una sobredosis de profopol, sus hijos Prince Michael, Paris, y Prince Michael II, estuvieron en el foco de atención del mundo entero. Sus rostros se conocieron después que su padre los había mantenido en secreto usando máscaras.
En el homenaje póstumo que se le realizó a Michael Jackson, su hija de tan sólo 11 años, conmovió al mundo al decir: "Mi padre fue el mejor padre que jamás pude imaginar". También defendió el honor del cantante al decir que muchos niños tienen que hacer frente a la controversia cuando son figuras públicas.
La muerte de un padre resulta un hecho traumático que marcará al hijo de por vida. Pero todo se complica cuando, además, están en la mira pública porque sus padres fueron estrellas, que murieron de manera súbita o trágica. Un recuerdo de cómo transitar mejor este triste camino.
Jenicka López, no pierde la esperanza
Tras el accidente aéreo en el que murió Jenni Rivera en diciembre de 2012, una de las hijas expresó su sentir por las redes sociales y llegó a asegurar que ella seguía viva. “No está muerta. Se trata de tener fe”, escribió.
Su hijo niega lo que pasó
A través de la misma red, Johnny López Rivera, escribió varios mensajes conmovedores, en los que también se aferró a que su madre seguía con vida. “A todos, tenemos buenas noticias de una psíquica. Ella está viva. Lo sabía, gracias a Dios”. Escribió en un “tuit”. No obstante, la realidad es que Jenni falleció.
Bobbi Kristina Brown, en shock
La hija de Whitney Houston y Bobby Brown transitó un difícil momento cuando perdió a su madre el 11 de febrero de 2012 por ingestión de un "cóctel de medicamentos mezclados con alcohol". Una forma de ayudarlos a sobrellevar la pérdida es hacerles entender que ellos no ocuparán el lugar del pariente perdido.
Cuando Bobbi Kristina se enteró de la muerte de su madre, fue internada de urgencia en el hospital Cedars Sinai de Beverly Hills por un shock emocional. Ahí fue tratada por un cuadro de estrés y ansiedad. El mayor temor: que la joven vuelva a caer en las drogas como en 2011, cuando fue fotografiada inhalando cocaína.
Bobby Brown, ex marido de Houston y padre de la joven de 18 años, solicitó privacidad para su hija en estos duros momentos. "Ella está mejor, y prefiere despedir a su madre fuera de la vista del público", declaró el también cantante. La privacidad, indican expertos, es clave para apaciguar el dolor.
Lo peor, el aislamiento
De pequeños, a los niños les cuesta comprender la realidad de una muerte familiar, y pueden elaborar el duelo de una manera errática: un día se los verá muy bien y al siguiente estarán irritables, aislados y se sentirán inseguros, explican expertos de la red de autoayuda Women's and Children's Health Network.
El apoyo adulto
Para evitar que el joven se deprima, es esencial el apoyo adulto: no deben sentir que la pérdida del padre los deja solos en el mundo, explica una guía de la Universidad de Delaware, que aconseja a los familiares a lidiar con el duelo joven.
Frances Bean Cobain
El 8 de abril de 1994, el líder y vocalista de la banda Nirvana se suicidó de un balazo en la cabeza. Su pequeña hija tenía sólo 2 años y a pesar de que no era del todo consciente de su realidad por su corta edad, el trágico hecho la etiquetó de por vida.
Kurt Cobain dejó un recado póstumo a la madre de su hija: "Courtney, sigue adelante por Frances, por su vida que va a ser mucho más feliz sin mí". A partir de ese momento, el futuro de la pequeña comenzó a ser oscuro. Contra lo que muchas veces se cree, un menor tan chiquito como Frances siente intensamente la pérdida y el dolor.
Su sufrimiento continúa
Courtney Love se hizo cargo de su hija después de la muerte de Kurt Cobain pero los excesos y abusos de droga de la cantante la llevaron a ser internada en una clínica de desintoxicación en 2003. La abuela paterna y la tía de Frances pelearon por su custodia. Y después la ganaron.
Los clásicos síntomas
Los niños y adolescentes que sufren una pérdida pueden sufrir los siguientes síntomas, indica la Universidad de Delaware: problemas al dormir, pérdida de apetito, empeorar su desempeño escolar, y volver a conductas de bebé como por ejemplo orinarse en la cama.
Tiger Lily
Tras las muertes de sus padres, el ex vocalista del grupo INXS Michael Hutchence, y la ex presentadora de televisión Paula Yates, por suicidio y sobredosis de heroína respectivamente, la pequeña fue centro de una dura batalla por su custodia. Finalmente el compositor y ex pareja de Yates, Bob Geldolf, se quedó con la niña.
Comunicación, el primer paso
Según explica el doctor Bruce Perry, autor de "The Child's Loss: Death, Grief and Mourning", los que queden a cargo del joven doliente no deben temer hablar de la tragedia que acabó con la vida de uno o los dos padres. El silencio, el misterio y los secretos son enemigos de la recuperación.
Nico Hoon, sin padre
Su padre, Shannon Hoon, vocalista de la banda Blind Melon, murió de una sobredosis de cocaína el 21 de octubre de 1995. A pesar de no haber tenido contacto con él, los fans del grupo le ayudan a mantener viva su memoria: en 2011, Hoon compartió escenario con el grupo de su padre, en un homenaje.
Cuando Elvis Presley murió en 1977, sólo tenía 9 años pero recuerda con exactitud cuál fue su reacción. "Me sucedieron cosas muy extrañas ese día. Corría de un lado para otro y fumaba cigarrillos en la caseta de seguridad. Estaba como loca", ha comentado en varias entrevistas.
Décadas para aceptar la muerte
En 2002 grabó un dueto con su padre llamado "Dont Cry Daddy", un momento muy significativo para Presley pues ha declarado que fue una situación emocional que no había vivido antes ayudándole a sanar heridas de la infancia. Tal vez el cierre que necesitaba para terminar el duelo.
Compartir el dolor
Uno de los consejos de la Asociación Americana de Psiquiatría es impulsar al hijo a expresar su dolor de distintas maneras, si le gusta escribir a través de cartas; si adora mirar fotos, creando un nuevo álbum, si escucha música componiendo una canción. El arte, dicen, ayuda a canalizar positivamente los sentimientos dolorosos.
Anna Nicole Smith
El 8 de febrero de 2007, la modelo y conejita de Playboy Anna Nicole Smith, murió a causa de una intoxicación provocada por una combinación de drogas: lorazepam, clorazepam, y valium, entre otras. Dejó una hija de seis meses, Dannielynn, quien luego de una disputa por paternidad, se fue a vivir con su padre, Larry Birkhead.
Crecer con afecto
Dannielynn (en la foto con su papá en mayo de 2011) seguramente no recuerde a su madre. Pero, indican los expertos, es tarea del padre vivo, o el familiar que quede a cargo, mantener viva la memoria del muerto, para que los hijos puedan sentirse completos, apoyados en un amor pasado, en su camino hacia la adultez.