Desde muy pequeños, con el fin de evitar enfermedades, nos enseñaron a evitar los gérmenes y las bacterias. Sin embargo, algunos microorganismos pueden tener gran valor benéfico para nuestra salud. ¿Sabes qué papel pueden tener los lactobacilos y bifidobacterias en tu vida?
Los probióticos son bacterias vivas y levaduras que son buenos para el cuerpo y pueden incrementar la salud del sistema digestivo. Estas bacterias se hallan en productos como kombucha (té de hongos fermentado), el kimchi (verduras fermentadas), miso (soja fermentada), el yogur y el kéfir (leche fermentada), pero también en suplementos de venta libre.
Más beneficios
Otros beneficios de los probióticos promueven el fortalecimiento del sistema inmunológico y ayudan a combatir alergias de la piel, contrarrestar los efectos del alcohol, según científicos del Departamento de Alimentación, Bioprocesamiento y Nutrición de la Universidad de Carolina del Norte, uno de los primeros en producir probióticos comerciales.
Mientras que los probióticos permanecen activos en el intestino ejerciendo importantes efectos fisiológicos, los prebióticos son una fibra dietética que están en ciertos alimentos como el trigo, el ajo, la cebolla, los espárragos, el puerro, entre otros. Sirven para alimentar y estimular el crecimiento o la actividad de uno o más tipos de bacterias en el colon.
Los lactobacilos son un tipo de probióticos que vive en nuestro sistema digestivo, urinario y genital sin causar enfermedades. Son importantes para prevenir diarreas, para la enfermedad de Crohn, inflamación del colon y enterocolitis necrotizante. Estos microorganismos se encuentran en el yogur, kéfir y leche acidophilus.
Lactobacillus acidophilos
Se tratan de bacterias pertenecientes a la familia de lactobacilos que se encuentran en el intestino y que producen vitamina K, bacteriocina, acidolina, lactasa y lactocidina, componentes esenciales para el procesamiento de los lácteos. (Biblioteca Nacional de Medicina)
Son también microorganismos benignos, que fabrican ácido láctico como producto final en el proceso de fermentación. Se encuentran en grandes cantidades en la naturaleza, así como en nuestro aparato digestivo. Aunque se las conoce sobre todo por su labor de fermentación de productos lácteos, se emplean asimismo para encurtir vegetales.
Las bifidobacterias, como mejor se les conoce a estos probióticos, pueden restaurar en el intestino las bacterias “buenas” que han sido muertas o eliminadas por la diarrea, la radiación, la quimioterapia, los antibióticos u otros problemas. Además se pueden usar para tratar la colitis ulcerosa y sus posibles complicaciones. (CDC)
Otros usos
Según la Base Exhaustiva de Datos de Medicamentos Naturales, las bifidobacterias son posiblemente eficaces para la prevención de la diarrea del viajero, reducir los efectos secundarios debido al tratamiento de la bacteria H. pyroli, tratamiento de la colitis ulcerosa, así como algunas infecciones pulmonares.
Ruminococcus
Los ruminococos son bacterias anaerobias gram positivo. Obtienen nutrientes al descomponer la celulosa que viene a través del sistema digestivo. Son esenciales para la degradación del almidón resistente del colon, según la Biblioteca Nacional de Medicina. Además, ayudan a digerir la celulosa de los vegetales gracias a la enzima celulasa.