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Buscan en México erradicar el cáncer en la niñez
Por Julio Guzmán
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Objetivo: terminar con esta enfermedad
¿Qué es lo primero que desearías a un niño con este padecimiento mortal? Seguramente su pronta recuperación. Es por esto que recientemente se inauguró el edificio de Hemato-Oncología e Investigación en el Hospital Infantil de México, con el cual se pretende brindar una mejor atención, detección y tratamiento oportuno a menores con algún tipo de cáncer.
El cáncer infantil, un problema latente en México
De acuerdo con Samuel Ruíz, quien es oncólogo del Centro Médico Nacional Siglo XXI del IMSS, las cifras en torno a este tema no son nada favorables, puesto que cada año mueren más de mil 630 niños y niñas por este padecimiento, destacando la leucemia y los linfomas como los problemas principales.
¿Cuáles son las principales causas del cáncer en México?
“Hay factores como la radiación, cancerígenos como derivados del benceno que están en diversas sustancias presentes en el ambiente; hay metales pesados, así como alimentos con algunos conservadores y otros que contienen fertilizantes”, explicó la Dra. Aurora Medina, jefa del departamento de Hemato-Oncología del Hospital Infantil.
Ella es Gloria Martínez y desde que le diagnosticaron a su hijo cáncer en un tejido blando, su vida no ha sido la misma. “Ya habíamos pasado por 18 ciclos de quimioterapia y le hicieron una biopsia, pero salió positivo otra vez”, comentó angustiada.
El Hospital Infantil, un centro que abre las puertas a todos los pacientes
Además de tener 27 especialidades, esta unidad lleva el caso de aproximadamente 3 mil enfermos con cáncer y cada año se suman a alrededor de 400 niños con un nuevo diagnóstico, lo que cada vez incrementa la demanda en el tratamiento de este tipo de padecimientos.
Desde hace varios años el Hospital Infantil se ha caracterizado por tener el equipo y personal médico especializado para tratar varios tipos de problemas. “Es un hospital donde vienen todos los casos que no se pueden resolver en el país”, comentó el Dr. José Alberto García Aranda, director de dicho centro de salud.
Con problemas de espacio y atención
A pesar de la preparación del personal médico y del equipo que se tiene para tratar el cáncer, la alta demanda de los pacientes hizo que se pensara en ampliar el servicio mediante la creación de una nueva unidad.
Con una inversión de 300 millones de pesos (aproximadamente 230 mil dólares) en este nuevo edificio de Hemato-Oncología se buscará mejorar la atención y el tratamiento a menores con problemas complejos como leucemia, linfomas, tumores de los tejidos blandos, neoplacias, entre otros.
Brindará mayor cobertura a pacientes con esta enfermedad
Entre otros hallazgos, el inmueble cuenta con 40 camas de hospitalización, 12 cubículos para quimioterapia de corta estancia, 25 cubículos para quimioterapia, 10 consultorios, una unidad de trasplante de médula ósea, dos cuartos con aislamiento especial para la administración de fármacos radiactivos y un área de investigación.
“Con esta unidad tenemos una infraestructura para hacer un excelente diagnóstico, contamos con equipos de tomografía, resonancia magnética de medicina nuclear y especializados en biología molecular. Hay unidad de radioterapia, excelentes cirujanos, oncólogos, neurocirujanos y especialidades pediátricas”, definió la Dra. Medina.
La leucemia, uno de los mayores enemigos a vencer
Es uno de los principales problemas que padecen los niños. De acuerdo con la Red de Lucha contra el Cáncer, una asociación conformada por 30 organizaciones de la sociedad civil, es la principal causa de muerte en el país, lo que ha alarmado al sector salud para tratar esta enfermedad.
Los tumores sólidos, la segunda amenaza de cáncer en pacientes
Aunque los tumores cerebrales son otros de los principales problemas que presentan los menores en esta unidad, existe la preparación para combatir esta afección. “Tenemos todos los medios, desde un acelerador lineal para mandar una radiación exacta en un punto del cerebro hasta neurocirujanos perfectamente entrenados para hacer un tratamiento correcto y adecuado”, explicó García Aranda.
Entre otras cosas, este centro cuenta con el apoyo de personal especializado en temas de cáncer. “Contamos con geneticistas que han estado en Londres y que van a engrosar el equipo de investigación”, comentó la Dra. Medina.
Aunque se trata de un hospital público, “hay quienes nos dicen que es un hospital privado” comentó Aranda. A simple vista, el nuevo centro presenta una arquitectura distinta con materiales y equipo llamativos que hace que cualquiera lo confunda con una clínica privada.
Enfocados en la comodidad
De acuerdo con el director del hospital se tiene pensado incluir en la unidad videojuegos y computadoras para que los menores olviden por un momento que padecen una enfermedad. “Un hospital público no tiene porque ser feo, pongámosle cosas para que los niños estén cómodos y se sientan a gusto”, comentó Aranda.
Mediante el programa impulsado por la Secretaría de Educación Pública “Sigamos Aprendiendo” se busca que los pacientes que debido a su tratamiento no hayan podido asistir a la escuela acudan dentro del hospital a clases personalizadas de acuerdo a su nivel escolar.
Inicialmente las familias no podían costear los gastos de la quimioterapia debido a los altos precios que representaban; sin embargo, en años recientes se implementó en México el Seguro Popular, un programa que, entre otras cosas, se encarga de cubrir estos gastos a los pacientes con esta enfermedad.
Se atiende a los sectores más pobres de la población
Para estimar un costo aproximado de los tratamientos, se hace un tabulador de cuotas donde una entrevistadora hace una visita al domicilio del paciente y hace un estudio socioeconómico; en base a los resultados se determina el monto a pagar. “El 90% de nuestros pacientes prácticamente no pagan nada”, declaró Aranda.
Él es Axel, quien a sus escasos 5 años de edad perdió una pierna y estuvo a punto de suceder lo mismo con su visión por unos tumores cancerígenos; no obstante aún tiene deseos de salir adelante. “Cuando crezca me gustaría ser doctor porque así puedo curar a las personas”, comentó.
Ejemplos como el de Axel llenan de inspiración a varios de los médicos del hospital para realizar su trabajo de la mejor manera. “Los niños son nuestros mayores maestros porque son muy especiales, siguen con tanto entusiasmo y llenos de vida a pesar de una enfermedad potencialmente mortal”, finalizó la Dra. Medina.