En un estudio internacional de gran magnitud, un grupo de científicos de la Clínica Mayo logró identificar los marcadores genéticos que permitirían determinar quiénes pueden beneficiarse con un tratamiento en base a la droga acamprosato para tratar el alcoholismo.
Si bien el acamprosato es un fármaco que generalmente se receta para ayudar a pacientes a recuperarse del alcoholismo, los resultados hasta ahora han sido muy variables. Por ese motivo, los científicos quisieron determinar qué es lo que hace que el tratamiento funcione mejor, e identificaron algunas variables genéticas que hace que la abstinencia durante los primeros meses se prolongue más y por ende, el tratamiento sea más efectivo.
Los resultados fueron publicados en la revista Translational Psychiatry (Psiquiatría Traslacional) y muestran que los pacientes portadores de esas variantes genéticas tuvieron períodos más prolongados de abstinencia en los primeros tres meses de tratamiento con acamprosato.
Los científicos de Mayo estudiaron la vinculación entre la variación en genes calificables y el tiempo de sobriedad en pacientes alcohólicos que recibieron tratamiento con acamprosato en programas comunitarios y descubrieron que al considerar otros factores ambientales y fisiológicos, los pacientes con el alelo común de la variante genética rs2058878, ubicada en el gen GRIN2B, permanecían más días sobrios que aquellos con el alelo variante del mismo polimorfismo. Este resultado se repitió en una muestra de pacientes alcohólicos tratados con acamprosato en un estudio conducido por otros colaboradores en Alemania.
HolaDoctor habló con el Dr. Victor Karpyak .
"La vinculación encontrada es un primer paso hacia el desarrollo de análisis farmacogenéticos que permitan a los médicos elegir el tratamiento adecuado para subgrupos específicos de pacientes alcohólicos”, comenta el Dr. Victor Karpyak, psiquiatra de Mayo Clinic y autor principal del artículo. “Creemos que la selección del tratamiento personalizado eliminará la necesidad de recurrir a métodos de ensayo y error, además de mejorar la eficacia del tratamiento en los pacientes con trastornos alcohólicos”.
"El acamprosato prolonga la sobriedad en pacientes dependientes de alcohol como elemento adicional al tratamiento estándard. No funciona en todos los pacientes, por ese motivo es importante identificar quiénes son candidatos a tomarlo y dentro de esos factores de detección, la variación genética es importante", dijo el Dr.
Los resultados de Mayo sustentan las evidencias respecto al importante papel de los receptores del N-Metil-D-aspartato (NMDA) en los efectos terapéuticos del acamprosato. Los científicos dicen que es necesario realizar más estudios para determinar la posible importancia de las variantes genéticas identificadas sobre los efectos a largo plazo del acamprosato, así como los mecanismos moleculares y fisiológicos detrás de la acción del fármaco.
"Esta droga ayuda a minimizar el deseo de tomar alcohol en el período inicial de abstinencia", explicó el Dr. Karpyak quien agregó que este efecto permite que el paciente implemente las otras estrategias del tratamiento.
"Lograr la abstinencia en un comienzo no es fácil, requiere de mucha motivación y de poder entender cómo el alcohol llega a manipular la conducta humana", agregó el especialista.
"La medicación que proponemos ayuda a mantener la abstinencia al alcohol, no tiene efectos secundarios, pero no ha demostrado ser efectiva en otro tipo de adicciones...la clave es identificar las necesidades individuales de cada paciente y ofrecerle el tratamiento que mejor se adapte a ellas", expresó.
Alcoholismo y abuso de alcohol
El alcoholismo y el abuso del alcohol son dos tipos de problema con la bebida.
El alcoholismo es cuando el hecho de beber te causa serios problemas en su vida y aun así sigues bebiendo. También tendrás una dependencia física del alcohol. Esto significa que necesitas más y más alcohol para sentirte borracho. Suspender de manera repentina puede causar síntomas de abstinencia.
El abuso de alcohol sería el caso cuando la bebida lo lleva a tener problemas, pero la persona no es físicamente dependiente del alcohol. Estos problemas pueden ocurrir en el trabajo, el colegio o el hogar, en sus relaciones personales, con la ley, a raíz del consumo de alcohol en situaciones peligrosas, como beber y conducir.
El abuso del alcohol está en aumento. Alrededor de 3 de cada 10 personas en los Estados Unidos bebe a un nivel que las pone en riesgo de caer en problemas de alcoholismo.
El alcoholismo, en cambio, es una enfermedad crónica en la que uno depende del alcohol. Los Institutos Nacionales de la Salud informan que en Estados Unidos hay 17.6 millones de adultos alcohólicos o que tienen problemas con dicha sustancia. Los hispanos tienen la tercera tasa más alta de consumo de alcohol después de los caucásicos y las personas de raza mixta.
Unos 38 millones de adultos beben demasiado y la mayoría de ellos no son alcohólicos, dicen los expertos del CDC. Beber demasiado incluye tomar en alta cantidad similar a un atracón, un alto consumo semanal y cualquier cantidad de alcohol que consuman una mujer embarazada o los menores de 21.
El consumo excesivo de alcohol causa unas 88 000 muertes al año en los EE. UU. y le cuesta a la economía unos 224 000 millones de dólares. La detección del consumo de alcohol y la consejería breve pueden reducir en un 25 % la cantidad que toman en una ocasión (2 a 3 horas) las personas que beben demasiado, pero solo 1 de cada 6 ha hablado alguna vez con su médico, enfermero u otro profesional de la salud acerca del consumo de alcohol.
Buscar ayuda
El primer paso para detectar si una persona tiene problema con el alcohol es hablar con un paciente sobre su consumo. Es importante determinar cuánto toman y con qué frecuencia, advertirlos acerca de los peligros para la salud que tiene el tomar demasiado, recomendar a los pacientes que beben demasiado que tomen menos y a las mujeres que están (o que podrían estar) embarazadas que no tomen nada y referirlo a un tratamiento especializado en la dependencia del alcohol solo a aquellos pocos pacientes que lo necesitan.
Los médicos y otros profesionales de la salud pueden usar la detección del consumo de alcohol y la consejería breve para ayudar a que las personas que beben demasiado tomen menos. La Ley del Cuidado de Salud a Bajo Precio exige que los nuevos planes de seguro médico cubran estos servicios sin un copago.
Si crees que tienes un problema con el alcohol:
Habla con un consejero. Éste, con la ayuda de un pariente o directamente contigo, hace una evaluación y presenta un plan de tratamiento que define los problemas a tratar, las metas esperadas y cómo lograrlas. Únete a grupos de apoyo o de autoayuda. En éstos los miembros aprenden sobre su condición, se apoyan mutuamente y comparten sus experiencias. Habla con tu médico. En casos severos un médico puede recetar medicinas u hospitalización como tratamiento
Las siguientes organizaciones son buenos recursos para obtener información sobre el alcoholismo:
Alcoholics Anonymous: www.alcoholics-anonymous.org
Al-Anon/Alateen: www.al-anon.org
National Institute on Alcohol Abuse and Alcoholism: http://www.niaaa.nih.gov/alcohol-health
Substance Abuse and Mental Health Services Administration: www.samhsa.gov