1. El orgasmo del hombre y de la mujer se parecen
Se habla mucho de las diferencias del orgasmo masculino y del femenino, pero si bien existen: a los hombres les gusta más hacer que hablar, ellas tardan más en calentarse, etc, hay estudios que aseguran que las similitudes son también muchas.
El orgasmo propiamente dicho, es bastante similar: tanto en duración como en la serie de contracciones musculares pélvicas que provoca (unas 15 contracciones regulares en unos 20 segundos aproximadamente), así como también en las sensaciones corporales que provoca, el mismo nivel de producción de oxitocinas o la llamada "hormona del amor" y hasta hay investigaciones que aseguran que hombres y mujeres utilizan las mismas palabras para describir el orgasmo (por supuesto referidas a distinto aparato genital).
2. Reduciría el cáncer de próstata
Un estudio presentado en la reunión anual de la American Urological Association in New Orleans asegura que los hombres que tienen una alta frecuencia en la eyaculación, unas 21 veces por mes reducen el riesgo de contraer cáncer de próstata en un 20%. Uno de los autores del estudio, Dr.Jennifer Rider, asegura que esto se debe sobre todo a la liberación de la hormona oxictocina, la cual reduce la presión arterial entre otras cosas.
El cáncer es el segundo cáncer más común entre los estadounidenses. Según la American Cancer Society existen unos 220 mil nuevos casos cada año, con unas 27 mil muertes derivadas de ese diagnóstico. Sin embargo, tener cáncer de próstata no es una sentencia de muerte, se calcula que casi 3 millones de hombres viven con esa condición.
3. Existe el orgasmo seco
El orgasmo seco también conocido como orgasmo retrógrado es el que se presenta cuando el semen ingresa en la vejiga en lugar de salir por la uretra durante la eyaculación.
Si bien no es muy frecuente, la principal razón para que ocurra es que el cuello de la vejiga no se cierra, lo cual provoca que el semen se devuelva hacia ésta en lugar de salir del pene. Puede ser causada por diabetes, algunos medicamentos, entre ellos, algunos fármacos para tratar la hipertensión (presión arterial alta) y algunos que afectan el estado anímico y por medicamentos o cirugía para tratar problemas de la próstata o la uretra.
Si tienes este tipo de eyaculación, puedes experimentar orgasmos igual pero sin semen o con una cantidad muy pequeña, por lo que muchas veces está asociado a problemas de infertilidad.
4. El primer semen sería de mejor calidad
De acuerdo con un estudio de la clínica de reproducción Ginemed Assisted Human Reproduction, existe una diferencia significativa entre la calidad del ADN del semen entre la primera y la segunda eyaculación.
Por otro lado, en cuanto a los espermatozoides, la cantidad y movilidad de los mismos también sería más importante en el primer orgasmo masculino. Los científicos creen que estas diferencias se deben a cuestiones de naturaleza reproductiva ya que la primer eyaculación estaría más a fertilizar el óvulo y la segunda a reforzar.
5. Podría curarte un dolor de cabeza
Cuando un hombre tiene un orgasmo, el cerebro libera una cantidad de endorfinas que son los mismos neurotransmisores asociados por ejemplo al beneficio psicológico de realizar ejercicio aeróbico.
Las endorfinas son poderosos inhibidores del dolor entre otras cosas, con lo cual hubo investigadores en Alemania que decidieron ir más allá y decidieron estudiar lo que sucedía si un grupo de hombres tenía relaciones sexuales con un dolor de cabeza.
Los investigadores llegaron a la conclusión de que el 60% mejoró su dolor de cabeza después de tener un orgasmo. Los expertos también dicen que las personas entrenadas físicamente y que corren maratones por ejemplo, en general liberan endorfinas más fácilmente por ese mismo entrenamiento y pueden curar sus migrañas con orgasmos.
6. El orgasmo por coito es más satisfactorio que la masturbación
Cuando se habla de orgasmo por relaciones sexuales o por masturbación, resulta bastante obvio que el primero puede ser mucho más estimulante y satisfactorio para el hombre si está bien con su pareja.
Sin embargo, más allá de las razones psicológicas, los científicos aseguran que lo es también desde lo biológico ya que en coito el cuerpo masculino libera una cantidad de la hormona prolactina mayor, unas 400 veces más, que cuando se produce la eyaculación por masturbación.
A pesar de que es una hormona en general relacionada con la lactancia, existen investigaciones que aseguran que un bajo nivel de prolactina puede relacionarse con disfunciones eréctiles.
7. Más barriga, menos semen
Se calcula que la cantidad promedio de una eyaculación es unos 3.4 milímetros, lo cual sería equivalente a menos que una cucharadita de té. Sin embargo, los hombres que tienen sobrepeso y un índice de masa corporal superior a 30 tenían un 69% más de posibilidades de producir una cantidad de esperma de 2 milímetros o menos, asegura una investigación de Escocia.
Los investigadores no están seguros de cuál sería la relación entre obesidad y esperma, pero suponen que se relaciona con la temperatura de los testículos, la vida sedentaria y la mala alimentación frecuentemente asociada con el sobrepeso.
8. El orgasmo sería como una droga
Al realizar escaneos cerebrales de los hombres al momento de experimentar un orgasmo, los científicos descubrieron que se activan ciertas áreas cerebrales relacionadas con el premio o recompensa.
Es más, un grupo de investigadores daneses compararon estos mapeos con los que se producen con el consumo de heroína y aseguran que son similares los efectos a nivel de neurotransmisores. El autor del estudio, Dr Gert Holstege aseguró que esto tiene que ver con temas de conservación de la especie y reproductivos, es decir, la eyaculación es la conducta más premiada, explicó.
9 . Sin orgasmo se puede embarazar a una mujer
Durante el juego previo, muchos hombres eliminan lo que se llama una pre-eyaculación que es un fluido que ayuda a la lubricación y a faciliar la relación sexual. Un análisis del líquido pre-eyaulatorio publicado en la revista científica journal Human Fertility aseguró que el 41% de los hombres produce líquido pre-eyaculatorio que contiene espermas, unos 40 millones. Si pensamos que con uno es suficiente para fertilizar un óvulo.
10. Algunos lo fingen también
Un estudio realizado por la Universidad de Kansas asegura que el 28% de los hombres ha fingido alguna vez un orgasmo.
Muchos refieren eso a que estaban demasiado borrachos y no lograban concentrarse para terminar y terminaban fingiéndolo para poder ir a dormir.
Según el equipo de investigadores, liderado por la Dra. Charlene Muehlenhard, los hombres que fingen en general se encuentran dentro de una relación y lo hacen porque no quieren lastimar a sus parejas. Si bien esto puede llamar la atención, el uso de condón puede ayudar a esconder la falta de semen.
