De acuerdo a la reciente investigación realizada por los sociólogos de la Universidad Estatal de Georgia, si los hombres se involucran más en el cuidado de los hijos, dividiendo las responsabilidades equitativamente con sus parejas, las parejas heterosexuales tienen una relación y vida sexual más satisfactoria.
Esta investigación fue presentada recientemente en la reunión anual de la Asociación Sociológica Americana.
Daniel L. Carlson, junto con las estudiantes graduadas Sarah Hanson y Andrea Fitzroy recopilaron datos de respuestas de más de 900 parejas heterosexuales, expuestas en el Estudio Marital del año 2006 (MARS).
Los investigadores encontraron que cuando las mujeres se hacían cargo de casi todo el cuidado del hijo, ambos miembros de la pareja manifestaron tener una muy baja calidad de relación y vida sexual.
"El punto importante a destacar es que cuando examinamos el cuidado del niño, la diferencia que encontramos es, en realidad, entre los acuerdos, donde la madre es responsable casi totalmente del cuidado del hijo y de todo lo demás,” explica Carlson.
Se concluyó que más allá de dividir las responsabilidades equitativamente, los papas de una pareja heterosexual podían asumir la mayoría de estas responsabilidades sin perjudicar la calidad de la relación de la pareja. Estas parejas tenían tantas relaciones sexuales como las parejas con arreglos igualitarios, y se sentían igual de satisfechas.
"Lo que encontramos es que existe apenas una muy pequeña o nula desventaja en que los hombres sean responsables en su mayor parte del cuidado de los chicos”, explicó Carlson. "Nuestra conclusión es que ser un padre comprometido es muy importante para los hombres. Si así no lo fuera, no observaríamos tan alto nivel de satisfacción. Esto sugiere que el compromiso de ser padre y el compartir el cuidado del hijo con la pareja es importante en ambos sexos."
Sin embargo, existe una salvedad: Carlson dijo que cuando los hombres tienen casi toda la responsabilidad del cuidado del hijo, sus parejas femeninas mostraron una gran satisfacción de su vida sexual, pero los hombres mostraron muy poca.
En algunos aspectos, esta investigación fue limitada, incluyendo el hecho de que se estudiaron parejas heterosexuales y no parejas del mismo sexo. Aunque los investigadores examinaron 5 tipos diferentes de tareas en 3 dimensiones del cuidado del niño, los criterios fueron limitados, Carlson dijo, especialmente en lo referente a las tareas físicas.
"Solo tuvimos una tarea física, que se centró principalmente en jugar con el niño, lo que incluyó hacer deportes y juegos, pero no se incluyó alimentar o bañar al niño”, expresó Carlson. “Estas últimas tareas físicas fundamentales han sido tradicionalmente responsabilidad de las mujeres."
Carlson también desea aprender más acerca de los mecanismos que se esconden detrás del por qué estás parejas con acuerdos igualitarios con respecto al cuidado del niño informaron tener una mejor calidad de relación y vida sexual.
Una investigación previa de la Universidad de Ohio aseguró que si las parejas cuidan juntas a sus hijos en edad preescolar podrían tener más desacuerdos que aquellas en las que la madre es la cuidadora principal como las tareas escolares por ejemplo.
"Tratamos de comprender qué es lo que existe detrás del compartir, que hace que las parejas lo vean tan positivo" dijo Carlson.
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