Un condición médica pre-existente es un problema de salud, como el asma, la diabetes, la hipertensión o el cáncer, que la persona tenía antes de la fecha en que comienza una nueva cobertura de salud.
Antes que entrara en vigencia en 2010 la Ley de Cuidado de Salud a Bajo Precio (ACA, popularmente conocida como Obamacare), las aseguradoras de salud podían rechazar a una persona por padecer una condición pre-existente. O cobrarle primas más caras. Hasta podían considerar a un embarazo como una condición pre-existente.
Esto cambió después de ACA y hoy, por ley, las compañías de seguros no pueden negarse a cubrir el tratamiento por una condición pre-existente o cobrar más.
Todos los planes del mercado de seguros deben cubrir el tratamiento para condiciones médicas pre-existentes.
Según explica el sitio federal cuidadodesalud.gov:
- Una vez que estás inscrito, el plan no puede negar tu cobertura o aumentar las tarifas en función de tu salud.
- Medicaid y el Programa de Seguro de Salud Infantil (CHIP) tampoco pueden negar la cobertura o cobrar más por una condición de salud pre-existente.
- El embarazo está cubierto desde el día que comienza el plan
- Si estás embarazada cuando solicitas un plan, no pueden rechazarte ni cobrarte más porque estés embarazada.
- Una vez que estés inscrita, tu embarazo y parto estarán cubiertos desde el día que comienza su plan.
Si tienes un plan médico 2020 y tienes o adoptas un bebe luego de inscribirse:
El nacimiento o la adopción del niño lo califica para un Período Especial de Inscripción (SEP). Esto significa que tú puedes inscribirte o cambiar de planes fuera del Período Abierto de Inscripción.
Tu cobertura puede comenzar desde la fecha del nacimiento o la adopción aún si te inscribes hasta 60 días después del nacimiento o adopción.