Las ortodoncias son uno de los tratamientos dentales más caros que existen. Se prolongan durante mucho tiempo, son complejas y, además, pueden hacer falta a cualquier edad. Por eso, es muy aconsejable que cuentes con un buen seguro dental que cubra los tratamientos de ortodoncia.
En este artículo analizamos qué tipo de seguro te viene bien para que un tratamiento de ortodoncia, ya sea para ti o para cualquier miembro de tu familia, no se convierta en un problema económico grave que te obligue a gastar tus ahorros o a endeudarte.
Sigue leyendo y averigua qué póliza te conviene más para protegerte frente a una ortodoncia o incluso ante varias, algo cada vez más habitual en las familias.
Qué vas a encontrar en este artículo
La ortodoncia: un problema caro y muy frecuente
Si tienes hijos, seguro que sabes que la ortodoncia es un tratamiento muy habitual. Los niños crecen y sus dientes se descolocan, se mueven y se retuercen. A veces salen ya descolocados. Otras veces, se les van moviendo con el tiempo. Entonces llega el momento de ir al odontólogo y pedir un presupuesto para una ortodoncia. Y no creas que solo les sucede a los niños: cada vez es más habitual la ortodoncia en adultos, bien porque no se la hicieron de niños, bien porque la dentadura se les ha ido descolocando con los años. Por ejemplo, es muy habitual que un embarazo trastoque los dientes de una mujer, que se mueven, se tuercen y acaban deformando lo que era una sonrisa ordenada. La solución, la ortodoncia.
De hecho, los tratamientos son tan comunes que se calcula que en 2015 al menos un millón de estadounidenses llevaba brackets dentales, los conocidos aparatos. Se han vuelto tan populares que incluso se habla de una cierta obsesión por la corrección dental y por tener los dientes perfectos. Es decir: es algo que va más allá de subsanar un defecto que impide comer bien o que afea un rostro infantil. Es una verdadera necesidad de tener la boca en el mejor estado posible.
Y ahí aparece el problema: las ortodoncias son caras. Aunque la tecnología las ha hecho casi invisibles y muy poco invasivas y dolorosas, todavía no ha conseguido que sean baratas. Por eso, resulta muy recomendable contar con un seguro dental que las cubra, sobre todo si tienes hijos pequeños o los vas a tener.
Un seguro dental que cubra la ortodoncia
Los seguros dentales pertenecen a los llamados seguros de salud complementarios. No son obligatorios para cumplir con la Ley de Cuidado de Salud de Bajo Precio, pero complementan perfectamente tu cobertura de salud y la de tu familia. En ocasiones se pueden comprar también en forma combinada: el más frecuente es el seguro combinado dental y de visión.
En esencia, un seguro dental es una póliza que, a cambio de una prima mensual, te permite acceder a una serie de servicios, como por ejemplo, una red de dentistas por todo el país que te ofrecerán tratamientos a precios muy bajos, porque el seguro se encarga de pagar la mayor parte de la factura. Tendrás unos deducibles, los gastos que abonas por adelantado, unos copagos (costes establecidos como fijos en algunos servicios) y unos coseguros, que determinan la parte que finalmente pagas por cada tratamiento. Por ejemplo, si tienes un coseguro por un empaste del 20 por ciento, un empaste de 100 dólares te costará solo 20.
Sin embargo, muchas pólizas de seguro dental no incluyen tratamiento por las ortodoncias. Por tanto, si esto es lo que buscas, infórmate muy bien a la hora de contratar el seguro y confirma que están incluidas. Si no lo haces, puede que a la hora de la verdad te encuentres con la sorpresa de que, incluso habiendo pagado un seguro dental, tengas que hacer frente a todo el coste del tratamiento.
Los seguros que sí incluyen estos tratamientos, tienen algunos beneficios además de los brackets. Por ejemplo, en ocasiones un diente se mueve tiempo después de haber pasado por una ortodoncia, con lo que puede hacer falta un ajuste, algo que estaría cubierto. O quizá te interese un tratamiento de tipo Invisalign, que se hacen con aparatos de plástico transparente y prácticamente no se ven. Algunos seguros también incluyen ese servicio.
Qué debes tener en cuenta al contratar un seguro de ortodoncia
Cuando vayas a elegir una póliza de seguro dental que incluya cobertura para las ortodoncias, debes revisar algunos elementos. Los principales son estos:
- Límite temporal. Asegúrate de que la póliza no tenga límites temporales para disfrutar de sus beneficios.
- Límite de gasto. Pregunta si la póliza tiene un límite de gasto anual. Recuerda que estamos hablando de servicios caros.
- Toda la familia. Como los adultos utilizan cada vez más las ortodoncias, preocúpate de que tu seguro cubra tanto a niños como a mayores.
- Carencia. Es frecuente que los seguros tengan periodos de carencia. Es decir, no se pueden hacer reclamaciones hasta pasado un tiempo. Debes consultar también qué sucede si el tratamiento empieza antes de que pase ese periodo de carencia.
- Exclusiones. A veces, algunos tipos de brackets no están cubiertos. Consulta si el seguro que quieres los cubre todos.
- Red de médicos. En ocasiones, puede haber restricciones para acudir a determinados ortodoncistas. Consulta qué red de salud dental cubre tu seguro y si están incluidos los médicos que te interesan.
- Copagos, deducibles y coseguros. Infórmate bien sobre qué partes de las facturas te corresponde pagar y cuánto te costará cada posible tratamiento.
Además de todo esto, es importante que tengas en cuenta que la mayoría de los seguros de salud que ofrecen los empleadores no cubren este tipo de tratamientos, con lo que no debes fiarte de que ya tienes el seguro de tu empresa.
Finalmente, valora con atención esta opción de contratar un seguro dental que cubra ortodoncias. Nunca sabes si lo vas a necesitar y, ante ese riesgo, es mucho mejor estar cubierto.