Rajeshwari, la madre del pequeño de Tamil Nadu, en la India, presenció horrorizada una tarde cómo su bebé estallaba en llamas que salían de su pequeño cuerpecito sin ninguna causa aparente. Lo llevaron al hospital y allí los médicos también quedaron asombrados, porque no encontraron la causa de sus quemaduras. Y los padres regresaron con la esperanza de que eso no volviera a ocurrir.
Pero las llamas volvieron a brotar como por arte de magia tres veces más y el pequeño Rahul acabó con quemaduras de segundo y tercer grado.
Puntos clave
Los médicos del hospital de la ciudad de Chennai, en la India, quienes están examinando ahora al bebé, le están realizando varias pruebas y siguen sin encontrarle explicaciones al caso. Y por supuesto, se ha descartado la posibilidad de que el fuego sea intencional.
Algunas personas piensan que las llamas pueden ser obra de un maleficio, otros piensan que se trata de superpoderes, o sospechan que el culpable puede ser el combustible que contienen los materiales utilizados para construir la casa donde vive la familia.
Pero los médicos creen que las cantidades existentes en los materiales son mínimas y que de ninguna manera podrían provocar esas llamas. En cambio, están considerando la posibilidad de afirmar que Rahul es víctima de uno de los más extraños y misteriosos fenómenos que afecta al cuerpo humano: la combustión espontánea. "Estamos en un dilema y no hemos llegado a ninguna conclusión," dice el Doctor Narayan Babu, quien atiende al bebé.
Misteriosas llamas sin causa
Aunque la combustión espontánea se ha conocido desde hace siglos, hay muchos que son escépticos acerca de su existencia. Y culpan a diversos factores externos cuando aparecen personas quemadas misteriosamente. Pero muchos médicos aceptan que esta enfermedad existe, aunque es muy rara y se sabe poco sobre las causas que la originan.
En 1806, un científico pensó que tenía la respuesta a este mal. En un ensayo sobre la combustión de los seres humanos, Pierre Guarida sugirió que el problema era la bebida del demonio, (por el alcohol) y culpó de la combustión al abuso de los licores espirituosos.
Aunque la explicación fue aceptada por gran parte de la comunidad científica, más tarde no se pudo comprobar la relación entre ser alcohólico y tener combustiones espontáneas. A través de horribles experimentos, esta idea luego fue descartada.
La teoría de la acetona
El Doctor británico Brian Ford tiene otra teoría más convincente: explica que la combustión humana espontánea puede ser causada por una sustancia química llamada acetona que se produce naturalmente en el cuerpo, según explica en un artículo reciente aparecido en New Scientist, de Reino Unido.
En los seres humanos sanos, la acetona se elimina normalmente de a través de la orina, pero cuando las personas sufren de ciertas enfermedades, se acumula en el cuerpo. Y es extremadamente inflamable.
Aunque es razonable la explicación del Doctor Ford, la semana pasada los médicos de la India dieron a conocer los resultados de las pruebas realizadas en Rahul y mostraron que los niveles de acetona en su sangre eran normales.
Por ahora, el misterio del bebé que se prende fuego, continúa...