Por una vez en su vida, el musculoso Hulk Hogan, de 57 años, tuvo que permanecer como si lo hubieran derrotado en el ring: boca abajo durante 10 horas. Eso es lo que duró la operación de reconstrucción de columna vertebral que le realizaron al actor y luchador profesional, según informó E! News.
Aunque en su documento figura como Terry Gene Bollea, alcanzó la fama con su nombre de "batalla" Hulk Hogan, con el que se convirtió en un héroe americano en la Federación Americana de Lucha Libre. En 2005, ingresó al hall de la fama de la federación luego de haber sido 12 veces campeón mundial.
El luchador de “Comando suburbano”, que pesa 280 libras (127 kilos) había sido sometido a otra cirugía en junio como consecuencia de una herida antigua sufrida durante una lucha.
La espalda de los luchadores
Los luchadores de lucha libre sufren un 59% más de dolor de espalda de por vida, según un estudio del Departamento de Ortopedia del Hospital Sahlgren de la Universidad de Gothenburg, de Suecia, publicado en la Revista Americana de Medicina del deporte (en inglés, American Journal of Sports Medicine). La investigación reunió a 32 luchadores retirados de entre 39 y 62 años y a 12 levantadores de pesas de 40 a 61 años para ser evaluados. Los hallazgos radiológicos y los exámenes físicos de los atletas fueron comparados con las conclusiones de otro estudio de personas activas de edades similares. Las conclusiones demostraron que los luchadores son los que más sufren de dolor de espalda: con un 59% más que el resto de las personas; los levantadores de pesas sufren 23% más, mientras que las personas activas que no realizan ninguna de estas actividades tienen una incidencia del 31% de dolor de espalda.
Sin embargo, a pesar de ser quienes más padecen de esta dolencia, los atletas son los más tolerantes hacia el dolor.
Los luchadores, que son quienes tienen mayor cantidad de fracturas, representan el grupo con dolor más frecuente en la parte baja de la espalda.