Los cálculos biliares son una especie de piedras que se forman en la vesícula, generalmente compuestas de calcio, colesterol o ambos; pueden llegar a tener el tamaño de un huevo. Generalmente no causan problema, excepto cuando se atoran en un ducto bloqueando el paso de la bilis, en cuyo caso provocan un dolor agudo. Los factores de riesgo son obesidad, dieta alta en grasas y edad avanzada.
Para cuidar tu vesícula:
- Tomar dos tazas de té de diente de león al día para disolver los cálculos (es un tratamiento tardado, aproximadamente seis meses).
- Baje de peso.
- Tomar una cucharada de aceite de olivo con unas gotas de limón en ayunas, le ayudara a limpiar el organismo y deshacer los cálculos.
- La ingesta de magnesio (arroz integral, soya, levadura de cerveza, trigo integral, legumbres), ayuda a prevenir la formación de cálculos.
- La lecitina (yema de huevo, frijol de soya, hígado, carne, pescado, coliflor, col) ayuda a tratar y prevenir los cálculos biliares.
- Tomar licuados de berros con cebolla.
- Tomar castilleja en cocimiento como agua de uso.
- Té de prodigiosa, dos tazas al día.
- Para mitigar el dolor, dar masaje con aceite de lavanda o romero sobre el área de la vesícula.
- Tomar mucha agua, cuando menos seis vasos al día, es crucial para prevenir la formación de cálculos biliares.
- Comer mucha fibra.