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Un poco de vino y ciertos alimentos podrían ayudar a mantener la presión arterial sana

MARTES, 24 de agosto de 2021 (HealthDay News) -- Una manzana y una pera al día podrían ayudar a mantener la presión arterial bajo control, un beneficio que explican, en parte, las bacterias intestinales, sugiere un estudio reciente.

Los investigadores encontraron que los adultos que consumían ciertos alimentos de forma regular (manzanas, peras, bayas y vino tinto) tendían a tener una presión arterial más baja que sus pares.

Un poco de vino y ciertos alimentos podrían ayudar a mantener la presión arterial sana

Una cosa que estos alimentos tienen en común es un alto contenido de unos compuestos vegetales antioxidantes, llamados flavonoides. Los estudios han sugerido que los flavonoides pueden ser buenos para la salud del corazón, al reducir la presión arterial y el colesterol, y al mejorar la función de los vasos sanguíneos, entre otras cosas.

Los nuevos hallazgos añaden otra capa: los alimentos ricos en flavonoides se vincularon con una mayor diversidad en el microbioma intestinal, la inmensa agrupación de bacterias que viven de forma natural en el sistema digestivo.

Y la diversidad del microbioma pareció explicar en parte los beneficios de los alimentos en la presión arterial.

Las bacterias intestinales tienen un importante rol en el procesamiento de los flavonoides para poder hacer su trabajo, explicó la investigadora sénior, Aedin Cassidy, profesora de la Universidad de la Reina en Belfast, Irlanda del Norte.

Al mismo tiempo, señaló, la composición del microbioma intestinal varía mucho entre las personas. Es posible que la variabilidad pueda ayudar a explicar por qué algunas personas parecen obtener unos mayores beneficios que otras para el corazón y los vasos sanguíneos de los alimentos ricos en flavonoides, según Cassidy.

Los investigadores apenas comienzan a comprender las complejas formas en que el microbioma intestinal afecta a la salud humana. En los últimos años, los estudios han encontrado que los microbios tienen unos roles clave en una variedad de procesos corporales normales, desde el metabolismo hasta las defensas inmunitarias y la función del cerebro.

Todavía no está claro exactamente qué constituye un microbioma "sano". Pero los expertos creen que mientras mayor es la diversidad en las bacterias intestinales, mejor.

En el nuevo estudio, el equipo de Cassidy encontró que las personas que comían las mayores cantidades de alimentos ricos en flavonoides tenían, en promedio, una mayor diversidad de bacterias intestinales. Una mayor diversidad de ciertas bacterias se vinculaba, a su vez, con una presión arterial sistólica (el número "superior" en una medición de la presión arterial) más baja.

Los hallazgos, que se publicaron el 23 de agosto en la revista Hypertension, se basan en 904 adultos alemanes de 25 a 82 años. Todos completaron un cuestionario detallado sobre la dieta, y proveyeron muestras de heces para que se pudieran analizar sus bacterias intestinales.

En promedio, encontró el estudio, el tercio de los participantes con el mayor consumo de flavonoides tenía una presión arterial sistólica 3 puntos más baja que el tercio que tenía la ingesta más baja de flavonoides.

Entonces, los investigadores indagaron sobre ciertos alimentos que eran fuentes populares de flavonoides. Encontraron que las personas que comían entre una y dos porciones de manzanas, peras o bayas cada día reducían de 2 a 4 puntos en su presión arterial sistólica, en comparación con las personas que evitaban esos alimentos.

Se observaron beneficios similares entre las personas que bebían poco menos de tres copas de vino tinto por semana.

En general, encontró el estudio, la diversidad de las bacterias intestinales explicó hasta un 15 por ciento del vínculo entre eso alimentos ricos en flavonoides y una presión arterial más baja.

Estudios como éste están ayudando a los investigadores a comprender mejor cómo la dieta afecta a la salud, según Linda Van Horn, experta voluntaria de la Asociación Americana del Corazón (American Heart Association, AHA).

Pero para la persona promedio, el foco debe ser la calidad general de la dieta, planteó Van Horn, que también es directora de nutrición de la Facultad de Medicina Feinberg de la Universidad del Noroeste, en Chicago.

"Las personas comen alimentos, no nutrientes individuales, y hay una sinergia entre los alimentos que hace que los nutrientes estén más biodisponibles", aclaró Van Horn.

Esto, añadió, significa que los nutrientes se absorben y se utilizan mejor, cuando están en presencia de otros nutrientes en particular.

De forma similar, el microbioma intestinal puede verse influido por una variedad de factores de la dieta. Un estudio reciente encontró que las personas que comían bastantes verduras y frutas, pescado, frutos secos y granos ricos en fibra en general tenían más bacterias intestinales que combaten a la inflamación.

Al contrario, las personas que favorecían la carne, los alimentos procesados y el azúcar tendían a tener agrupaciones de microbios intestinales que fomentan la inflamación, un estado que se asocia con muchos procesos de enfermedad.

Todo esto concuerda con las recomendaciones dietéticas para la salud del corazón. Según la AHA, las personas deben intentar consumir nueve porciones diarias de verduras y frutas de todos los tipos, junto con seis porciones de granos integrales ricos en fibra.

Y no solo es por el bien de un microbioma diverso. Comer alimentos enteros en lugar de comida procesada ayuda a reducir la sal y el azúcar añadidos, aseguró Van Horn.

Y aunque unas cantidades modestas de vino tinto se vincularon con beneficios en este estudio, la AHA insta a la precaución: consumir alcohol conlleva riesgos, y las personas no deben iniciar un hábito de vino tinto con la esperanza de obtener beneficios para el corazón.

Más información

La Asociación Americana del Corazón ofrece consejos para seguir un estilo de vida saludable para el corazón.

Artículo por HealthDay, traducido por HolaDoctor.com

FUENTES: Aedin Cassidy, PhD, professor, nutrition and preventive medicine, Institute for Global Food Security, Queen's University, Belfast, Northern Ireland; Linda Van Horn, PhD, RD, chief, nutrition, department of preventive medicine, Northwestern University Feinberg School of Medicine, Chicago, and volunteer expert, American Heart Association, Dallas; Hypertension, Aug. 23, 2021, online

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