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Un estudio confirma que el pan de trigo integral es mejor que el blanco

JUEVES, 4 de febrero de 2021 (HealthDay News) -- Una nueva investigación refuerza el consejo de incluir más granos integrales en la dieta.

Una dieta rica en granos "refinados" (como pan blanco, galletas y bollitos) podría aumentar el riesgo de enfermedad cardiaca y muerte precoz, mientras que los granos integrales podrían reducirlo, según el estudio.

Un estudio confirma que el pan de trigo integral es mejor que el blanco

"Animamos a las personas a tener un consumo moderado de carbohidratos, y a consumir distintos tipos de granos, sobre todo granos integrales", planteó la investigadora principal, Mahshid Dehghan, del Instituto de Investigación en Salud de la Población de la Universidad de McMaster en Hamilton, Ontario, Canadá.

"Reducir la cantidad y mejorar la calidad de los carbohidratos es el mensaje de nuestro estudio", aseguró Dehghan.

Los granos como la avena, el arroz, la cebada y el trigo conforman alrededor de la mitad de las dietas del mundo, y hasta un 70 por ciento en los países con unos ingresos bajos y medios, sobre todo en África y en el sur de Asia, anotaron los investigadores.

Los hallazgos no prueban que una dieta rica en granos refinados provoque accidentes cerebrovasculares, ataques cardiacos u otras formas de enfermedad cardiaca, solo que parece haber un vínculo.

En el estudio, los investigadores recolectaron los datos de más de 137,000 personas de 21 países, que tenían de 35 a 70 años, sin antecedentes de enfermedad cardiaca, a las que se dio seguimiento durante más de nueve años.

Se encontró que las personas que reportaron que comían 12 onzas (unos 312 gramos) de granos refinados al día tenían unas probabilidades un 27 por ciento más altas de muerte temprana, y un riesgo un 33 por ciento más alto de enfermedad cardiaca, que las que limitaban su ingesta a menos de 2 onzas (unos 57 gramos) al día.

Una dieta rica en granos refinados también se vinculó con una presión arterial más alta, mostraron los hallazgos.

Los participantes reportaron ellos mismos la cantidad y el tipo de granos en sus dietas, de forma que los investigadores anotaron que no pueden garantizar la precisión de esos datos.

El estudio observó al arroz blanco aparte de los demás granos refinados, porque más de un 60 por ciento de los participantes vivían en Asia, donde al arroz es un alimento básico.

Dehghan dijo que no se encontró ningún vínculo significativo entre comer granos integrales o arroz blanco y unos resultados de salud adversos.

"Obtener más o menos de un 50 a un 60 por ciento de la energía a partir de los carbohidratos es adecuado, pero animamos a las personas a reducir su consumo de carbohidratos", recomendó.

El informe aparece en la edición en línea del 3 de febrero de la revista BMJ.

Samantha Heller, nutricionista clínica principal de Langone Health de la NYU, en la ciudad de Nueva York, revisó los hallazgos.

"Todos podemos beneficiarnos si incluimos más granos integrales, como la quínoa, la cebada, la kasha, el trigo integral, la avena y el maíz, en nuestra dieta diaria", aseguró Heller.

Los granos integrales contienen fibra, vitaminas, minerales y fitoquímicos protectores que son importantes para la salud.

Los granos refinados, al contrario, no contienen fibra. Se encuentran en los cereales azucarados, el pan blanco, las galletas, los pasteles, los bollitos, las galletas saladas, las masas, los postres, y la comida rápida y basura, explicó Heller.

"Cuando consumimos demasiados granos refinados, que significa que se han eliminado la fibra y los nutrientes, privamos a nuestros cuerpos de esos nutrientes que promueven a la salud, y con frecuencia se reemplazan con azúcar, grasa saturada, sodio y calorías vacías", advirtió.

La investigación ha encontrado que los patrones dietéticos ricos en fibra, alimentos vegetales y granos integrales ayudan a reducir el riesgo de enfermedades crónicas, como la enfermedad cardiaca, ciertos tipos de cáncer y la diabetes, anotó Heller.

"Debemos equilibrar nuestros patrones dietéticos para que se enfoquen más en las fibras y sean más ricos en alimentos de origen vegetal", comentó.

Hay muchas formas de añadir granos integrales a la dieta, y las personas deben revisar los productos para asegurarse de que están consumiendo granos integrales, aconsejó Heller.

"Prueba las tortillas de trigo integral con frijoles pintos, calabacín y zanahoria; los cereales de granos integrales como la avena o el trigo triturado; el arroz integral con pimientos, brócoli, guisantes dulces y tofu salteados; el chili vegetariano hecho con bulgur, frijoles rojos y cualquier verdura que tenga a mano; o un sándwich de humus, tomate y pepino en pan de multigranos integrales", sugirió Heller.

Más información

Aprenda más sobre los granos saludables en el Departamento de Agricultura de EE. UU.

Artículo por HealthDay, traducido por HolaDoctor.com

FUENTES: Mahshid Dehghan, PhD, investigator, Population Health Research Institute, McMaster University, Hamilton, Ontario, Canada; Samantha Heller, MS, RD, senior clinical nutritionist, NYU Langone Health, New York City; BMJ, Feb. 3, 2021, online

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