Bajo el título ‘Maternidad en la niñez. Enfrentar el embarazo en adolescentes’, el documento advierte que los riesgos de un embarazo en la adolescencia están fuertemente asociados con las desigualdades, la pobreza y la inequidad de género, señalando que las probabilidades de que las adolescentes de entre 15 y 19 años mueran debido a complicaciones durante el embarazo o el parto son dos veces mayores que las de una mujer de 20 a 30 años.
Refiere que entre los países que conforman la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), México ocupa el primer lugar en embarazos en adolescentes y jóvenes de entre 15 y 19 años, y tiene la tasa de natalidad más alta con una tasa de 64.2 por cada mil nacimientos.
Puntos clave
- Una de cada dos adolescentes mexicanas de 12 a 19 años que inicia su vida sexual se embaraza.
- En 2012 se registraron más de 388 mil nacimientos de madres menores de 20 años.
- México tiene la tasa de natalidad más alta en adolescentes.
Asimismo, informó que la incidencia de embarazo adolescente es más alta en las entidades de Tabasco, Campeche, Guerrero, Morelos, Chiapas, Oaxaca, Veracruz y Michoacán, donde ocurren matrimonios o uniones a edades tempranas. En tanto los que menos incidencia presenta son el Distrito Federal, Guanajuato, Jalisco, Quintana Roo y Zacatecas.
El informe señala que entre 1990 y 2011 se registraron en México casi 28 mil muertes maternas, de las cuales, tres mil 473 fueron adolescentes de entre 15 y 19 años, y 160 niñas de entre 10 y 14 años.
El documento establece que cuando una niña queda embarazada o tiene un hijo, su salud, educación, potencial de obtener ingresos y todo su futuro pueden estar en peligro, y puede quedar atrapada en una vida sumida en la pobreza, la exclusión y la impotencia.
La opinión de los médicos
El embarazo en la adolescencia se considera de alto riesgo y conlleva más complicaciones. La adolescente no está preparada ni física ni mentalmente para tener un bebé y asumir la responsabilidad de la maternidad.
La Doctora Kimberly Gecsi, ginecóloga y obstetra de Medical Center en Cleveland, aseguró que "en una niña, la pelvis puede no estar lista o ser lo suficientemente grande como para dar a luz un bebé", refiriéndose a la posibilidad de tener un parto por vía vaginal o natural.
Otro profesional médico, el Dr. Frederick González, profesor clínico de obstetricia y ginecología de NYU Langone Medical Center, afirmó que las madres extremadamente jóvenes también tienen un mayor riesgo de preeclampsia y además sus bebés corren el riesgo de restricción del crecimiento fetal.
De acuerdo con la Fundación de Niños con Defectos de Nacimiento, las madres adolescentes tienen más probabilidades que las madres mayores de 20 años de tener un bebé prematuro (antes de las 37 semanas de embarazo), además de anemia y alta presión arterial. Estos riesgos son incluso mayores cuando las mujeres tienen menos de 15 años. En tanto que los bebés prematuros corren un mayor riesgo de sufrir problemas de salud, incapacidades permanentes e incluso la muerte.
La misma fuente agrega que los bebés de madres adolescentes tienen más probabilidades de morir durante su primer año de vida que los bebés de madres de entre 20 y 40 años de edad. Y detalla que el riesgo es mayor para los bebés de madres de menos de 15 años de edad.
