En la semana de la lactancia materna, que se celebrará en 176 países, el desafío de 2015 es "La lactancia materna y el trabajo: ¡Vamos a hacer que funcione!" donde se abordan las trabas que tienen millones de mujeres del mundo que trabajan y quieren dar el pecho a su bebé.
Encontrar el lugar para hacerlo, tener el tiempo y los espacios apropiados, son los grandes desafíos que enfrentan las madres para amamantar a sus bebés.
La lactancia materna es la forma normal de proporcionar a los bebés los nutrientes que necesitan para un crecimiento y desarrollo saludables, según la Organización Mundial de la Salud (OMS). Prácticamente todas las madres pueden amamantar, siempre que cuenten con información precisa, y el apoyo de su familia, el sistema de salud y la sociedad en general.
Sin embargo, a nivel mundial “más de 800 millones de mujeres trabajadoras o el 41%, aún no cuentan con una adecuada protección de la maternidad", dijo Guy Ryder, Director General de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y agregó que el tema de la protección de la maternidad y el trabajo es una prioridad para la mejora de la igualdad de género en todo el mundo.
La otra barrera es la aceptación de hacerlo en público, una traba que enfrentan las mujeres desde hace décadas. Muchas se animan a dar el pecho en una cafetería, en un local o en el transporte público, pero muchas lo evitan por vergüenza. Y el rechazo que genera provocó varios incidentes.
Hoy en día, en Estados Unidos son 44 los estados que han promulgado leyes específicas para permitir a las mujeres amamantar en público y en locaciones privadas. Estas leyes aseguran que una mujer pueda alimentar a su bebé en cualquier lugar siempre que sea necesario.
Es un tema muy sensible, lleno de tabúes y que ha desatado grandes polémicas. Históricamente, las mujeres que alimentaban a sus bebés en público eran sujetas a penalizaciones por faltas a la moral.
Aunque algo parece estar cambiando. La lactancia materna en público es vista como algo completamente natural por más de dos tercios de las madres en Estados Unidos.
Las mujeres se sienten ahora más cómodas de amamantar en público: el 67% de las madres o embarazadas del país, creen que es un acto completamente natural, de acuerdo con la Encuesta Global de Lactancia Materna realizada por Lansinoh en 2015.
Este número mejoró 10 puntos comparado con los datos de la encuesta de 2014, lo cual demuestra un avance en la aceptación de las prácticas de la lactancia materna. Sin embargo, el 25% dicen haber sido juzgadas mientras amamantaban en público.
Para hacer algo en contra del rechazo, muchas madres se movilizaron en las redes y crearon #Brelfie, que apoya y promueve la lactancia sin prejuicios y a la que mujeres de diferentes países y edades se sumaron. Las imágenes son expuestas en redes sociales como Twitter, Instagram y Facebook.
Las famosas no se hicieron esperar, y se sumaron al movimiento donde miles de mujeres se muestran felices dando el pecho. Gisele Bündchen, Miranda Kerr, Nagore Aramburu o Gwen Stefani, hicieron pública su foto mientras amamantaban a sus hijos.
La polémica, no se hizo esperar y mientras una parte las apoyaba, muchos las tildaron de exhibicionistas.
¿Es ofensivo amamantar en público?
En 2014, una flamante graduada en la Universidad Estatal de California en Long Beach, Karlesha Thurman, de 25 años, volvió a su asiento después de recibir el diploma y dio el pecho a su pequeña que lloraba de hambre.
Un compañero se acercó y tomó una foto que luego subió a facebook, y aunque fue un acto natural para ella, generó una enorme polémica. Muchas personas la felicitaron, pero otros publicaron comentarios de rechazo, diciendo que no era apropiado hacerlo en público, que debería haberse cubierto, y otras apreciaciones negativas.
Pero a veces la condena social llega más lejos. En 2014, en un local de Starbucks, en Canadá, una mujer fue advertida por amamantar a su bebé. Le pidieron que cubriera su cuerpo al hacerlo. El hecho se hizo público y cobró dimensiones descomunales de debate a nivel mundial.
La empresa se pronunció públicamente diciendo que no tenía una política al respecto, pero sí un código que pone ciertos límites a la desnudez del cuerpo, y que tal vez el hecho fue mal interpretado.
Lactancia materna en EE.UU.
El amamantamiento le brinda al bebé calorías, vitaminas, minerales y otros nutrientes esenciales para su crecimiento y desarrollo óptimo. Beneficia tanto a la madre como al bebé y también brinda una oportunidad importante para estrechar los lazos afectivos entre ambos.
Al igual que la OMS, la Academia Americana de Pediatría (AAP) recomienda la lactancia materna exclusiva durante los primeros 6 meses de vida del bebé, y luego continuarla durante al menos el primer año de vida, a la par que se introducen los alimentos sólidos.
Sin embargo, muchas madres en EE.UU. no son capaces de cumplir estas recomendaciones.
Los datos del la encuesta de 2014 de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) muestran que el 79% de los recién nacidos acceden a la lactancia materna, el 49% siguen siendo amamantados hasta los 6 meses y sólo el 27% hasta los 12 meses.