El dolor crónico es el que no se va con el tiempo, puede durar meses o incluso años.
De los 50 millones de estadounidenses que viven con dolor crónico, 20 millones tienen un dolor tan intenso que les impide realizar las actividades de la vida diaria.
Según un informe de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) el dolor crónico y el dolor crónico de alto impacto son más comunes en las mujeres, en los adultos mayores, en las personas pobres, en las que no tienen un empleo, en las que tienen un seguro de salud pública y entre las que viven en áreas rurales.
Para tratarlo, muchas veces se recurre a los opiáceos, que pueden ser muy efectivos cuando se toman según las indicaciones; sin embargo, muchas personas que hacen un mal uso, se vuelven adictas.
Ahora, un nuevo estudio del Hospital For Special Surgery, en Nueva York, sugiere que la meditación puede ayudar a las personas que padecen de dolor crónico, a sentir alivio y mantenerse fuera o reducir el uso de analgésicos opioides adictivos.
"El abuso y la adicción a los opiáceos son un problema de salud pública importante en Estados Unidos, y aproximadamente el 70% de las personas que usan opioides, a largo plazo tienen un trastorno como dolor lumbar o artritis", dijo una de las autoras del nuevo estudio, la Dra. Maggie Wimmer.
En los últimos años, los médicos han comenzado a adoptar y a recomendar prácticas alternativas sin efectos secundarios como la meditación y la respiración consciente como tratamientos complementarios para el dolor.
Probar con meditación
La Dra. Wimmer y su equipo decidieron probar un nuevo programa en el cual inscribieron a algunos de los pacientes del Hospital For Special Surgery para estudiar la eficacia de los tratamientos alternativos en el alivio del dolor. Se seleccionaron 122 participantes que asistirían a talleres mensuales de meditación con un instructor y guiados por un trabajador social.
Los investigadores enseñaron a los participantes a usar la respiración profunda y la meditación para reducir el estrés y recurrir a éstas -en lugar de los medicamentos- para mitigar el dolor.
Luego de acceder a sesiones de meditación presenciales y a distancia, casi todos (98%) de los pacientes dijeron que estaban contentos con el programa, y la mayoría de ellos reportó haber aprendido cómo estas técnicas de atención plena podrían reducir su dolor y estrés.
Un tercio de los participantes dijo que meditaba o respiraba conscientemente al menos 5 veces por semana. Y más de la mitad reportó que lo aprendido en las clases les ayudó a controlar el estrés y el dolor.
Además, un dato muy satisfactorio es que el 11% dijo que utilizaba la meditación en lugar de fármacos. El Hospital For Special Surgery planea ahora expandir su programa de meditación, y dará clases a pacientes con artritis, que a menudo dependen de los opioides durante años e incluso, por décadas, para controlar el dolor.
Más beneficios de la meditación
Una definición clásica de meditación es que consiste en la autorregulación deliberada de la atención por medio de la cual el flujo de conciencia se suspende de manera temporal. Consiste en alcanzar un estado de "conciencia sin pensamientos" sobre las sensaciones y actividad mental que ocurren en el momento presente, según informa el sitio Natural Standard.
Además de combatir el estrés, otros beneficios comprobados de la técnica de meditación incluyen: reducir el azúcar en sangre, aliviar el dolor y la tensión lumbar, ayudar a dejar de fumar, mejorar la concentración, alejar la depresión, combatir las migrañas, y mejorar la función intestinal.
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