Nada como el tomillo para dar un sabor único a nuestros platillos, además, su particular aroma lo convierte en un buen ingrediente a la hora de fabricar perfumes, jabones y cosméticos. Lo que no todos saben es que esta hierba también puede traer grandes beneficios para la salud.
El tomillo o Thymus pertenece a la familia de las Lamiáceas. La más conocida y utilizada con fines gastronómicos, medicinales y ornamentales es Thymus vulgaris. Los antiguos egipcios la utilizaban para realizar embalsamamientos, y los griegos y romanos para purificar templos, viviendas y como ritual para los funerales. Actualmente, es utilizado para con diferentes fines medicinales:
El principal ingrediente activo del tomillo es el timol. Este compuesto tiene una gran variedad de efectos sobre el funcionamiento del organismo, entre ellos, mejorar las defensas contra agentes dañinos. Distintas investigaciones encontraron que esto es posible gracias a su acción antifúngica, antiviral y antibacteriana.
Caída del cabello
El tomillo puede ayuda a tratar la alopecia areata, es decir, la pérdida repentina de cabello en una o varias zonas de la cabeza. Puedes hacer una preparación hirviendo en agua una cucharada de tomillo, una de romero y otra de cedro. Luego cuela, deja que enfríe y aplica sobre el cuero cabelludo a medida que realizas masajes.
Mejor respiración
Tal vez se trata de su uso medicinal más antiguo, debido a que el tomillo posee sustancias antiinflamatorias y propiedades expectorantes. Algunos estudios lo vincularon con beneficios para quienes padecen bronquitis, asma, congestión, o gripe, ya que previene el desarrollo microbiano que provocan estas enfermedades. Para aprovecharlo puedes beberlo en infusión o hacer baños de vapor.
Salud bucal
Por ser rico en timol, un antiséptico natural, enjuagarse la boca con una infusión de tomillo todos los días ayuda a evitar el mal aliento y otros problemas bucales, como infecciones. Este compuesto también se utiliza junto a otra sustancia química llamada clorhexidina, como un barniz dental para prevenir las caries. Además, su aceite se usa en enjuagues bucales y linimentos para matar los gérmenes.
Acné
El tomillo tiene un poderoso efecto antiséptico y antibiótico, útil para eliminar las bacterias en la piel que causan el acné, y así decir adiós a los molestos barros y espinillas. Algunos estudios incluso señalaron que sería más efectivo que el peróxido de benzoilo, el activo más común de los tratamientos contra esta enfermedad.
Dispraxia
La dispraxia es un trastorno motriz que se manifiesta como lentitud o dificultad al hacer acciones tan simples como atarse los cordones de los zapatos. Existe evidencia que vincula el aceite de tomillo, combinado con el de onagra y pescado, y dosis de vitamina E, con mejoras en esta afección, especialmente en niños. Sin embargo, son necesarios más estudios en los que no se involucren otras hierbas, para saber si el tomillo es el verdadero responsable.
Controla el apetito
Si estás pasando por una temporada en la que no te provoca comer nada porque estuviste enfermo o tuviste anemia y te sientes débil, el tomillo puede ayudarte. Esto se debe a que estimula el apetito a partir de estimular la producción de jugos gástricos. También puedes tener en cuenta esto si lo que buscas es no comer de más.
Buena circulación
El tomillo es rico en hierro (100 g ofrecen el 20% del consumo diario recomendado) y en otros minerales esenciales que favorecen la circulación sanguínea, y así, la oxigenación de los órganos. Esto se debe a que estimulan la producción de glóbulos rojos. También posee magnesio y potasio, que se asocian a niveles bajos de presión arterial.
No existen muchas referencias sobre los efectos perjudiciales del tomillo, aunque en exceso puede provocar daño gastrointestinal. Cómo con cualquier otra hierba y suplemento los especialistas recomiendan consultar a un profesional para saber si puede interferir con algún medicamento que estés tomando. Tampoco se recomienda para las mujeres embarazadas o en período de lactancia.
Recuerda
Hasta contar con evidencia científica significativa proveniente de ensayos en humanos, las personas interesadas en utilizar terapias a base de hierbas y suplementos deben tener mucho cuidado. No abandones ni modifiques tus medicamentos o tratamientos, antes habla con el doctor sobre los potenciales efectos de las terapias alternativas o complementarias.
Fuentes consultadas:
Base Exhaustiva de Datos de Medicamentos Naturales, Biblioteca Nacional de Medicina de EE. UU., Clínica Mayo, Departamento de Agricultura de EE. UU., Instituto Nacional de Medicina Complementaria y Alternativa.