Dietas keto para bajar de peso

La popularidad de las dietas keto para bajar de peso, y la razón por la que la gente se entusiasma, es que a corto y mediano plazo se consigue rápidamente bajar de peso.

Las dietas keto son altas en proteínas y grasas y bajas en carbohidratos. Si se eligen proteínas y grasas saludables podría haber ciertos beneficios para la salud.

Si sigues una dieta Keto, que sea por poco tiempo y siempre bajo vigilancia médica. | Foto: GETTY IMAGES

Otros beneficios es que tienen un mayor efecto de saciedad y permiten disminuir la ingesta de calorías.  Además, en ocasiones ciertas personas de algunos estudios redujeron los niveles de colesterol total y triglicéridos y presentaron aumento de colesterol HDL (colesterol bueno).

Sin embargo, algunos estudios médicos encontraron que no muestra tener efectos positivos sobre los niveles de colesterol LDL (colesterol malo).

 Si bien hay algunos estudios recientes que resaltan sus ventajas médicas, la dieta keto debe realizarse bajo vigilancia médica. Consulta con tu médico si tomas bebidas alcohólicas y sigues una dieta keto por tiempo prolongado.

Existe controversia en literatura médica acerca del uso de dietas cetogénicas y su implicación en el manejo de pacientes para bajar de peso o pacientes con diabetes. 

¿Qué son las dietas keto o dietas cetogénicas?

Las dietas cetogénicas son dietas bajas en carbohidratos, altas en grasa y comúnmente se usan para bajar de peso.

Al restringir los carbohidratos y aumentar la ingesta de grasa puede llevar a un estado metabólico alterno de cetosis, el cual se basa en que tu cuerpo use primariamente a la grasa como fuente de energía en lugar de usar los carbohidratos.

¿Cuáles son los riesgos potenciales de la dieta Keto?

  • Al ser dietas bajas en carbohidratos (menos de 50 g al día) las dietas keto pueden originar desecompensaciones en el organismo. 


  • Al inicio de la dieta Keto, al usar cetonas y grasas como fuente de energía puedes experimentar como efectos secundarios algunos síntomas como dolor de cabeza, mareos, fatiga, calambres, náusea y constipación, halitosis o mal aliento, síntomas que se deben al estado de cetosis, a la deshidratación y al desequilibrio de electrolitos.


  • El consumir en exceso alimentos de origen animal en la dieta keto puede originar mayor acidez en la orina y mayor riesgo de cálculos renales y de enfermedades renales.


  • Las dietas keto suelen ser bajas en fibra, lo que puede ocasionar constipación y tener efectos negativos en la salud del colon.


  • Algunos estudios indican que las dietas keto proveen insuficientes vitaminas y minerales, en especial potasio y magnesio. Con el tiempo podría originar deficiencias de algunos nutrientes.


  • A pesar de que las dietas bajas en carbohidratos han mostrado que contribuyen al control de azúcar en la sangre en personas con diabetes, también pueden incrementar el riesgo de eventos de hipoglucemia (niveles bajos de azúcar en sangre), especialmente en personas con diabetes tipo 1, lo cual es un riesgo para la salud.


  • Las dietas keto pueden reducir la densidad ósea y comprometer la salud de los huesos con el tiempo.


  • Algunos estudios muestran que las dietas bajas en carbohidratos con alto contenido de alimentos de origen animal podrían propiciar mayor riesgo de enfermedades coronarias y algunos tipos de cáncer.


  • La dieta keto no es apta para personas con enfermedades coronarias ya que puede presentarse arritmias y otras complicaciones ni tampoco para personas con enfermedades del hígado, ni enfermedades del riñón.


  • En algunas investigaciones se observó que personas que habían seguido una dieta cetogénica se habían visto afectadas algunas funciones mentales como atención, memoria y  procesamiento de información en general.


En general las dietas bajas en calorías ya sean cetogénicas o equilibradas funcionan para cumplir metas de reducción de peso. 

Las dietas Keto son muy usadas para bajar de peso y por tener ciertos beneficios para la salud. Sin embargo tienen algunos riesgos y no se recomiendan  para personas con enfermedades renales, coronarias, óseas o con diabetes.

Si sigues una dieta Keto sólo debe ser por  un tiempo limitado y bajo vigilancia médica. Se recomienda consultar a un nutricionista para que la dieta sea equilibrada y minimice riesgos de complicaciones por deficiencia de nutrientes.