Mientras las cifras de víctimas del virus cambian a cada momento, los gobiernos africanos y varias organizaciones de salud trabajan frenéticamente para controlar el más mortífero brote de Ébola de la historia. La mayoría de los casos se han producido en los países de África Occidental, en Guinea, Liberia, Sierra Leona y Nigeria.
El brote es tan grave y la lucha es tan desigual frente a un enemigo para el que no se tienen armas, que la OMS anunció esta semana que los medicamentos experimentales -que no han sido probados en humanos- se podrán utilizar para intentar curar a los pacientes que sufren de la enfermedad. La desesperación está derribando los protocolos que rigen en la autorización de los fármacos.
Lo que está debatiendo ahora un panel de expertos de la OMS es qué criterios deben manejarse, en qué condiciones se deben administrar los tratamientos experimentales y quién debe ser tratado. En principio, varias fuentes noticiosas señalaron que las pocas dosis de ZMapp que EE.UU. envió a Liberia, serían para tratar a los médicos que trabajan en la zona afectada.
Cinco vacunas en proceso de experimentación
1. Hay pruebas de GlaxoSmithKline (GSK) cuyo estudio de inocuidad (etapa anterior a los test en personas) se hará en septiembre, "primero en EE.UU. y luego probablemente en un país africano", indicó Jean-Marie Okwo-Bele, del departamento de vacunas de la OMS. El Dr. Anthony Fauci, director del Instituto de Alergias y Enfermedades Infecciosas (NIAID por su sigla en inglés) dijo que se están acelerando los procesos y que “podría estar disponible para los tratamientos médicos en 2015".
2. El NIAID respalda a la empresa Crucell (de Johnson & Johnson) que desarrolla una vacuna contra los virus Ébola/Marburg, ya probada en seres humanos. Y se prevé una nueva prueba de fase 1 (test con voluntarios sanos) para fines de 2015 ó principios de 2016, indicó el organismo. El NIAID financia además a la empresa norteamericana Profectus Biosciences, que desarrolla otra vacuna preventiva.
3. Los Institutos Nacionales de Salud (NIH) y la Universidad Thomas Jefferson trabajan conjuntamente en el desarrollo de una vacuna anti-Ébola sobre la base de una droga contra la rabia, que podría servir para prevenir las dos enfermedades; está siendo probada en animales.
4. TKM-Ébola, de la compañía canadiense Tekmira, es otra opción en estudio experimental. Para su desarrollo, dispone de un subsidio de 140 millones de dólares del departamento de Defensa de Estados Unidos. Y la Administración de Drogas y Alimentos (FDA) levantó la suspensión de una prueba clínica de este tratamiento experimental, una decisión que abre el camino para su eventual uso en personas infectadas.
5. La droga favipiravir ("T-705"), un antiviral contra la gripe de Toyama Chemical, filial de FujiFilm, podría emerger como tratamiento potencial para el Ébola, según información difundida por la compañía. Un portavoz de FujiFilm indicó estar en tratativas con autoridades estadounidenses para probarla.