El doctor Peter Piot, uno de los descubridores del Virus del Ébola en 1976, y actual director de la Escuela de Higiene y Medicina Tropical en Londres, aseguró en una reciente entrevista que él viajaría en un vagón de tren acompañado por personas infectadas, porque tiene la certeza de que no se contagiaría.
Este pionero que vio de cerca el primer brote de Ébola en Zaire y que conoce lo que es capaz de hacerle este virus al organismo, no siente miedo. Y recomienda no tenerlo. 
La siguiente es una lista de 10 motivos para no entrar en pánico.
1) El Ébola no es un virus aéreo, es decir, no se transmite de persona a persona a través de partículas de aire, como por ejemplo el virus que causa el SARS (Sindrome Agudo Respiratorio Severo) o la tuberculosis. El riesgo de contagio se presenta si se está en contacto directo con un paciente y se manipulan sus fluidos sin la debida protección. Ésta es una de las razones por las que este brote se ha expandido rápidamente en África: cuando la familia cuida al enfermo ella misma sin aislarlo, y por la falta de medidas de bioseguridad básicas en hospitales o centros de salud.
2) Y justamente una de las medidas básicas es el aislamiento del paciente, apenas se sospecha que puede portar el Virus del Ébola. La mayoría de los casos en África han ocurrido en pequeñas aldeas, alejadas de hospitales, en donde no existe la capacidad de aislar al paciente. En contraste, más de 40 hospitales en Estados Unidos están preparados para posibles casos, con sus salas para manejo de infecciones, alistadas.
3) Es cierto que no hay cura para el Ébola, pero sí hay tratamientos paliativos que pueden mantener al paciente estable, hidratado y bien controlado, para permitir que el organismo se fortalezca y expulse al virus. Los mismos hospitales del país que están en condiciones de recibir a posibles pacientes, cuentan con la tecnología y las medicinas necesarias para tratarlos.
4) Uno de los laboratorios de referencia internacional que recibe muestras de sangre sospechosas de contener Ébola está aquí, en Estados Unidos, en la sede de los CDC en Atlanta, Georgia. Esto ayuda a que se diagnostique el virus más rápido y se empiece rápido un tratamiento. Lo opuesto ocurre en los poblados remotos de Guinea, Liberia y Sierra Leona, los países en donde se expandió primero el virus, en los cuales muchas veces el paciente muere sin siquiera ser diagnosticado, y cuando muchos ya estuvieron en contacto cercano con él.
5) Lamentablemente ocurre cuando aumentan las muertes, pero finalmente la comunidad médica internacional le está prestando atención a este brote de Ébola, y los laboratorios aceleran el desarrollo de drogas y vacunas para tratar la infección. De hecho, la Organización Mundial de la Salud la ha catalogado como una "emergencia global". Esto ayudará a que se controle la epidemia en África, en donde se originó el brote y, con el tiempo, logrará que el virus deje de propagarse.
6) En algunas regiones de África Occidental en donde se está expandiendo el Ébola, los pobladores han atacado a los profesionales de salud extranjeros que están tratando a los pacientes porque creen que son los que traen el mal a sus regiones, aunque paradójicamente ya han muerto 150 por tratar de curar a los contagiados. Esta desconfianza en médicos, enfermeras y el sistema de salud en general, no existe aquí.
7) En algunas de las poblaciones afectadas está muy enraizada la creencia de que una persona enferma porque hizo algo malo. Por eso, no llevan al familiar enfermo a tratarse, por vergüenza. Eso jamás pasaría aquí, en donde seguramente el caso sospechoso llegaría rápidamente a la emergencia de un hospital.
8) Thomas Frieden, director de los CDC, dijo que tal vez se presenten casos de viajeros que hayan estado en las zonas epidémicas, pero que se podrán controlar. Frieden, quien es una de las máximas referencias en salud pública del país, aseguró que la posibilidad de contagio del Ébola en territorio estadounidense es "cercana a cero".
9) Para poner este brote en perspectiva, los epidemiólogos explican que el VIH, el virus que causa el sida, ya ha matado a 17.2 millones de personas en África, una cifra miles de veces mayor que la de los casos de Ébola desde 1976. Es cierto, el Ébola puede ser letal en pocos días y con terribles hemorragias, pero la cifra de casos es notoriamente menor.
10) Si hay algo de qué preocuparse en Estados Unidos, enfatizan los CDC, es en aplicarse la vacuna contra la gripe este año, ya que este virus que está desde hace siglos en el país, mata hasta a unas 49,000 personas al año. Y nadie parece tenerle miedo.
