Las enfermedades de transmisión sexual (ETS) alcanzaron una nueva marca histórica: cerca de 2,3 millones de casos de clamidia, gonorrea y sífilis fueron diagnosticados en Estados Unidos en 2017, según datos publicados por los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) en agosto de 2018.
Esto superó el récord anterior de 2016 en más de 200,000 casos y marcó el cuarto año consecutivo de fuertes aumentos en las ETS.
Una infección de transmisión sexual (ETS) es una enfermedad que puede contagiar a otra persona a través del contacto sexual. Éstas son la clamidia, gonorrea, herpes genital, verrugas genitales, Virus de Inmudeficiencia Humana (VIH), Virus del Papiloma Humano (VPH) y sífilis.
Estas infecciones se propagan por contacto directo con una úlcera en los genitales o en la boca, los fluidos corporales y a veces por contacto con la piel alrededor de la zona genital.
¿Cómo se pueden prevenir? Teniendo relaciones sexuales con precaución (sexo seguro) que significa tomar medidas antes y durante las relaciones sexuales que puedan impedir que contraigas una infección o que se la transmitas a tu pareja.
Prevención antes de tener una relación sexual
Tu pareja sexual debe ser alguien que sabes que no tiene ninguna ETS. Antes de tener sexo con una pareja nueva, cada uno debe hacerse exámenes de detección de ETS y compartir mutuamente los resultados de las pruebas.
Si sabes que tienes una ETS, como VIH o herpes, infórmale a tu pareja antes de tener relaciones sexuales. Permítele decidir qué hacer. Si mutuamente acuerdan tener contacto sexual, usen condones de látex o poliuretano. Para minimizar los riesgos, estos consejos de especialistas de los Institutos Nacionales de Salud (NIH) te pueden ayudar:
- Conoce a tu pareja y habla de sus antecedentes sexuales.
- No te sientas forzado a tener relaciones sexuales.
- No tengas contacto sexual con nadie, excepto con tu pareja.
- Usa condones para todas las relaciones sexuales orales, anales y vaginales: el condón debe estar puesto desde el inicio hasta el final de la actividad sexual. Usa uno cada vez que tengas relaciones sexuales. Los condones de poliuretano son menos susceptibles de romperse que los de látex, pero cuestan más.
- Ten en cuenta que las ETS se pueden transmitir por contacto con zonas de piel alrededor de los genitales. Un condón reduce pero no elimina el riesgo de contraer una ETS.
- Usa lubricantes. Éstos pueden ayudar a reducir la probabilidad de que el condón se rompa. Usa sólo los que son a base de agua. Los lubricantes a base de aceite o vaselina pueden hacer que el látex se debilite y se rompa.
- El uso de condones con nonoxynol-9 (un espermicida) puede aumentar la probabilidad de transmisión del VIH.
- Mantente sobrio. El consumo de alcohol o drogas deteriora el juicio. Si estás ebrio o bajo el efecto de una droga, probablemente no elijas a tu pareja con tanto cuidado. Además, te puedes olvidar del uso del condón o usarlo de manera incorrecta.
- Hazte exámenes regularmente para detectar una ETS si tienes nuevas parejas sexuales. La mayoría de las ETS no tienen síntomas, así que tienes que hacerte examinar con frecuencia si hay alguna posibilidad de que hayas estado expuesto. Tendrás un mejor pronóstico y menos probabilidad de propagar la infección si te haces un diagnóstico a tiempo.
- Las mujeres deben contemplar la posibilidad de hacerse aplicar la vacuna contra el VPH para evitar contraer el virus del papiloma humano. Este virus puede ponerlas en riesgo de tener cáncer de cuello uterino y verrugas vaginales.
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