15 secretos sobre el uso del condón

El condón fue introducido en la década de los años 50 y desde entonces fue comercializado, principalmente, entre las fuerzas armadas. Antes de ser fabricados con látex, se hacían unos de lino y tripas de animales. Hay libros que aseguran que ya los antiguos egipcios los utilizaban en el año de 1350 antes de Cristo y entonces, los hacían con partes de la vejiga e intestinos de varios animales.

Si bien está confeccionado con un material resistente y flexible, capaz de retener hasta 3.7 litros de agua, lo cierto es que el condón puede romperse. Muchos hombres optan por utilizar de a dos a la vez lo cual es un error ya que utilizar dos condones al mismo tiempo es peor que usar uno sólo, pues la fricción entre ambos puede causar rompimiento y desgarramiento, y por ende, ser mucho más peligroso.

Las temperaturas extremas harán que el látex pierda sus propiedades de estiramiento y resistencia. Debe ser guardado en un lugar seco y fresco a temperatura ambiente. Además, el condón pierde efectividad bajo el agua y con la fricción que produce el agua puede desprenderse.

Desde el año 1937 la Administración de Drogas y Alimentos (Food and Drug Administration o FDA) de Estados Unidos decidió clasificar a los preservativos dentro del grupo de medicamentos, por lo cual la prueba de calidad en ellos es obligatoria.

La mejor forma de abrir un paquete de preservativo es con la mano, pero siempre con cuidado. Es importante no rasgar la cobertura externa con los dientes ya que el látex es muy delicado y se puede romper. Si el empaque de un condón está dañado, no lo utilice, ya que también puede estar averiado.

Una buena noticia para quienes sufren de eyaculación precoz: Usa condón. Esta es una forma sencilla, barata y discreta de reducir la sensibilidad de tu pene (en particular la parte de la punta), ayudándote al mismo tiempo a extender el tiempo de duración del sexo. Si el problema interfiere con tu vida sexual, consulta a un médico.

Si está usado correctamente, el condón puede prevenir el 97% de embarazos. Sin embargo, su efectividad real es del 80% y 90%, es decir 10 de cada 100 parejas podrían tener un embarazo no planificado. El motivo por el que esto puede suceder es que haya una ruptura del condón por defectos de fabricación, que se rompa en plena relación sexual, que haya un derrame de semen a la hora de retirarlo o mucha demora para colocar el condón.

El látex es un elemento alergénico para algunas personas. Los síntomas de esta alergia son picazón e irritación en la zona genital. A veces salen unas pequeñas verrugas o ampollas como pequeñas quemaduras. Puedes conseguir condones sin látex o con bajo contenido de látex, son más caros pero valen la pena. Cambiarse a condones hechos con membranas de animales o poliuretano también puede ayudar.

No lleves condones en la billetera durante largos períodos. Reemplázalos cada tanto. El uso y el desgaste pueden hacer que se formen pequeños orificios en el condón. Se recomienda renovarlo después de unos días y usar uno nuevo en cada relación. Es preferible usar un condón que ha estado mucho tiempo en tu billetera que no usar nada.

Existen condones de distintos tamaños, colores y sabores, y también con alas. La compañía americana Sensis Condoms ha fabricado un preservativo con dos tiras de caucho plegables (como alitas) que facilitan el proceso de la colocación. Es ideal para aquellos que por la emoción y el apuro del momento lo colocan mal.

Muchos hombres temen que al ponerse un condón, la erección se caiga o tambalee. La empresa Futura Medical anunció la fabricación de un preservativo que incorpora un compuesto erectogénico, el cual ayudará a mantener la erección más firme durante el coito. Se espera que ya esté a la venta en el año 2015.

Hay que colocarlo como viene enrollado, poner el enrolle hacia afuera, para que resbale bien, colocar el redondel del preservativo en el glande, sujetar con el dedo índice y el pulgar de la mano izquierda el sombrerito que tiene arriba para que no se meta aire y deslizar con la mano derecha la arandela dura para que el preservativo se desenrolle por completo.

Para que no se baje, la mujer puede aprender a ponérselo jugando, estimulando la zona del pene, toqueteando o mostrándose picarona, para que el juego erótico no se pierda. Para ponerlo con la boca, lo colocas dentro de la misma, con el capuchón hacia la lengua, luego coronas el pene con él y poco a poco, como si se tratara de una felación empujas el condón hacia abajo.

Si bien los preservativos vienen en tamaño regular y les va a la mayoría de los hombres, las marcas de preservativos tuvieron que hacer tallas más grandes para algunos hombres. Lo importante es que el condón no sea ni demasiado corto (pueden pasar las enfermedades igual), ni demasiado largo, ni demasiado grande que se puede salir. Si tu pene mide más de 7 pulgadas de largo y unas 5 de ancho puede que necesites un extra grande.

El condón debe colocarse cuando el pene está erecto, antes de que se produzca el contacto entre el pene y la vagina. Ten cuidado de no romperlo o hacerle un agujero al abrir el empaque o al retirarlo. Verifica que no quede aire entre el pene y el condón. Esto puede producir su ruptura.

Asegúrate de que los condones estén siempre cerca y al alcance de tu mano para cuando los necesites. Si no se tienen a la mano, puedes sentirse tentado a tener relaciones sin condón por miedo a que se pierda el momento adecuado. Utiliza cada condón sólo una vez y guárdalos en un lugar fresco y seco, lejos de la luz del sol y del calor. No utilices condones que están frágiles, pegajosos o descoloridos.