Un número cada vez mayor de mujeres embarazadas está usando marihuana, y este hábito se está expandiendo más rápidamente entre adolescentes y mujeres jóvenes en Estados Unidos, según un reciente estudio.
La prevalencia del consumo de marihuana entre futuras mamás en el estado California aumentó del 4,2% al 7,1% entre 2009 y 2016, señaló la investigación publicada en la revista JAMA. Pero, entre las adolescentes embarazadas menores de 18 años, se incrementó notablemente del 12.5% a 21.8%, y entre las mujeres de 18 a 24 años, subió de 9.8% a 19%.
El estudio involucró solamente a un grupo mujeres en California, pero una investigación anterior entre mujeres embarazadas en Estados Unidos, publicada en enero también en JAMA, encontró que aquellas que reportaron haber consumido marihuana en el mes anterior creció de 2.37% en 2002 a 3.85% en 2014. Las mujeres tenían entre 18 y 44 años.
En el reciente estudio más de 279,000 mujeres embarazadas, que estaban siendo tratadas las instalaciones del sistema Kaiser Permanente Northern California, completaran una encuesta sobre el consumo de marihuana y también se le realizó una prueba de orina.
Los investigadores analizaron los datos de ocho años y encontraron que el número de mujeres que reportaron fumar marihuana aumentó con el tiempo, especialmente para las futuras madres que tenían menos de 18 años en ese momento y para las que tenían entre 18 y 24. En 2016, casi una cuarta parte de las adolescentes embarazadas había consumido marihuana, al igual que aproximadamente una de cada cinco mujeres de entre 18 y 24 años.
¿Cuál es el problema?
Entre 2001 y 2013, el uso de marihuana entre los adultos estadounidenses se duplicó con creces, muchos estados legalizaron el uso de marihuana y las actitudes hacia la marihuana se volvieron más permisivas, señala el estudio.
A medida que más estados legalizan la marihuana medicinal y recreativa, algunas mujeres embarazadas recurren al uso de la marihuana para aliviar las náuseas u otros síntomas del embarazo.
Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) destacan que los investigadores no saben mucho sobre cuáles podrían ser los efectos y mientras la investigación está en progreso, la mayoría de los expertos recomiendan a las mujeres embarazadas que no consuman marihuana.
Muchos de los productos químicos de la marihuana (en particular, el tetrahidrocannabinol o THC) pueden pasar el sistema de la madre al bebé y afectar negativamente su salud. El consumo de marihuana durante el embarazo puede causar o aumentar el riesgo de desarrollar problemas de salud en los recién nacidos, como bajo peso al nacer.
El Colegio Americano de Obstetras y Ginecólogos recomienda que "se debe alentar a las mujeres que están embarazadas o que contemplan el embarazo a suspender el consumo de marihuana" y "suspender el uso de marihuana con fines medicinales a favor de una terapia alternativa".
