Los hábitos cotidianos, incluyendo el número de comidas y su calidad, deben formar parte de las estrategias de prevención primaria en temas de salud. Así, una reciente investigación realizada en España señaló que saltarse el desayuno de forma regular puede ser perjudicial para el corazón.
En el estudio, publicado en la revista del Colegio Americano de Cardiología, hombres y mujeres de mediana edad que regularmente se saltaban el desayuno o tomaban café o jugo presentaron el doble de riesgo de desarrollar aterosclerosis que las personas que consumían alimentos saludables por la mañana.
La aterosclerosis, o el endurecimiento y el estrechamiento de las arterias, puede aumentar el riesgo de enfermedad cardíaca de una persona.
Desayuno y corazón
En el estudio, los investigadores recopilaron datos de unos 4,000 adultos en España, de 40 a 54 años. Los participantes proporcionaron información sobre sus hábitos alimenticios habituales, incluyendo una estimación de cuántas calorías la gente comía en un solo día.
Usando esta información, los investigadores identificaron tres patrones de comidas para el desayuno dentro del grupo que se correspondían con un desayuno de alta energía, con un aporte mayor al 20% de la ingesta energética diaria total (27% de la población); un desayuno de baja energía, con un aporte entre el 5% y el 20% de la ingesta diaria total de energía (70% de la población); o saltarse el desayuno, cuando se consumía menos del 5% de la energía diaria total (3% de la población).
El estudio encontró que las personas de mediana edad que se saltaban el desayuno o comían muy poco tenía 1,5 veces más placa en sus arterias, en comparación con los consumidores de alta energía del desayuno. Quienes no desayunaban también tenían más probabilidades de presentar sobrepeso u obesidad y tenían una dieta general peor que aquellos que consumían más y mejores alimentos por la mañana.
Los consumidores de desayunos de baja energía también tenían un mayor riesgo de aterosclerosis, pero su riesgo era mucho menor que el de las personas que no desayunaban. Algunos participantes en el grupo de baja energía, aquellos que sólo tomaban café, tostadas o un pastel para empezar el día en lugar de aquellos que en el mismo grupo que comía un poco más, tenían más placas que las personas que tenían desayuno de alta energía, señalaron los investigadores.
Mejor alimentación por las mañanas
Una investigación de la American Heart Association señaló a principios de año que no ingerir alimentos por las mañanas puede traer aparejados riesgos de salud como obesidad, diabetes y enfermedades cardíacas, por el contrario, comer un desayuno saludable y balanceado en las mañanas disminuye el riesgo de sufrir ataques cardíacos a lo largo de los años.
Este nuevo estudio proporciona más evidencia para apoyar esa recomendación; sin embargo, la calidad nutricional de los alimentos seleccionados es importante tanto en el desayuno como en otras comidas durante el día.
Para un desayuno de alta energía consistente con las pautas usadas en el estudio, los científicos sugirieron una tortilla vegetal y una tostada del grano entero, o un tazón de cereal entero con la fruta fresca o las tuercas, así como café y jugo.