No es ningún secreto que el desayuno es la comida más importante del día. Activa el metabolismo, mantiene los niveles de azúcar en la sangre constante y les da a los niños la energía que necesitan para enfrentar sus primeras horas de clases.
La Doctora Jennifer Willoughby, de Cleveland Clinic se refiere a cómo elegir el mejor desayuno para los niños.
El problema es que el desayuno sólo puede ser beneficioso si se pone el tipo correcto de combustible en su cuerpo. Es muy fácil darle al pequeño una barra de granola azucarada o pasteles, pero eso va a enviarlo a una depresión energética antes de hacer su primer problema de matemáticas del día. Y si usted desayuna de ese modo, probablemente le faltará energía antes de su primera reunión. Incluso el café no siempre puede arreglar un colapso de azúcar.
El tipo de combustible es importante
Los carbohidratos son el combustible que el cuerpo utiliza para funcionar, pero diferentes tipos de carbohidratos no afectan al cuerpo de la misma manera. Desafortunadamente, muchos alimentos del desayuno comunes y fáciles de disponer, son altos en carbohidratos y azúcar, mientras que son bajos en fibra.
Estos alimentos -incluyendo pasteles tostadores, muffins, bagels, donuts, granola en barra y cereales azucarados- dan a los niños un rápido estallido de energía, pero esa energía es seguida por el hambre y variaciones de azúcar en la sangre, que puede causar irritabilidad, concentración y comportamientos que impidan el aprendizaje.
Muchos niños optan por desayunar en la escuela, ya sea por medio del Programa Nacional de Desayuno Escolar o por elección. Aunque las escuelas buscan proporcionar opciones nutritivas para los niños, éstos deciden lo que van y no van a comer. Así que es importante ser consciente y tener una discusión con sus hijos sobre lo que deben elegir.
Las escuelas ofrecen opciones a la carta como frutas, cereales integrales y cereales de bajo contenido de azúcar o barras de granola, leche blanca, queso u opciones con huevos para asegurar el consumo de proteínas. Cualquiera de estas sería una opción saludable para los niños.
Crear un buen desayuno balanceado
Así que ¿cuál es desayuno más equilibrado? Dos nutrientes son clave: la proteína y la fibra. Éstos ayudarán a equilibrar los azúcares en la sangre, lo cual es clave para mantener a los niños bien alimentados y atentos durante el día. Echa un vistazo a algunos de estos dúos de desayuno:
- Harina de avena (un carbohidrato de alta fibra) con nueces agregadas o mantequilla de nuez (proteínas y grasas saludables para mantener a los niños llenos). Endulza con un poco de fruta (bayas, compota de manzana, plátano). También puedes agregar aromas como cacao en polvo, canela o extracto de vainilla.
- Yogur griego lleno de proteínas (natural es mejor) con bayas (alto contenido de fibra) para endulzar. Añadir una pequeña porción de nueces o semillas de chía (grasa saludable) para brindar saciedad.
- Tostadas de granos enteros (fibra alta en carbohidratos) con una o dos cucharadas de mantequilla de cacahuete natural (proteína). O preparar un sándwich de mantequilla de maní la noche anterior y tener listo para tomar en la mañana.
- Huevos duros (proteína) con una manzana (carbohidratos de alta fibra) es un desayuno rápido si está apurado/a.
- El queso (proteína) y una barra de granola con alto contenido de fibra y bajo en azúcar (carbohidratos) es otra opción rápida.
- Intente hacer los sándwiches del desayuno y congelarlos. Pruebe un muffin inglés de grano entero (carbohidratos de alta fibra) con un huevo revuelto y una rebanada de queso (proteína).
- Las tazas de quiche pueden hacerse con antelación y congelarlas o mantenerlas en el refrigerador durante unos días. Mezcle los huevos con cualquier coberturas que le gustaría (jamón, salchichas de pavo, verduras), vierta en un molde y hornee hasta que esté firme. Son divertidos porque los niños pueden involucrarse y escoger las mezclas que les gustan más.
Desayuno, un rito obligatorio
“Por ser la primera comida, pone el cuerpo en marcha para el resto del día”, dice el Dr. William Cochran, de la American Academy of Pediatrics (AAP). Sin embargo, aproximadamente del 8% al 12% de todos los niños en edad escolar se saltan el desayuno, afirma Cochran. Para el momento en que los niños entran en la adolescencia, entre el 20% y el 30% ha abandonado por completo la comida de la mañana.
Sin embargo, la realidad es que hay más probabilidades de que saltarse el desayuno cause aumento de peso a que lo prevenga. Muchos de estos niños se saltan el desayuno y el almuerzo, pero luego llegan a su casa y no paran de comer.
Desayunar también tiene repercusiones en el rendimiento escolar. “Un estudio tras otro demuestra que los niños que desayunan tienen un mejor rendimiento” dijo La Dra. Marcie Beth Schneider, de la AAP. “Les va mejor en la escuela, tienen mejor concentración y más energía” agregó.
En general, los niños que desayunan tienen mejor salud integral, lo cual puede atribuirse a los tipos de alimentos que suelen asociarse a la comida de la mañana. El desayuno ofrece una excelente oportunidad de fortalecer a su hijo adolescente con nutrientes que pueden quedar relegados con facilidad durante el resto del día.
“El desayuno es un muy buen momento para consumir fibra en forma de cereales y panes integrales”, indica el Dr. Cochran. La fibra puede ayudar a controlar el peso y también ha sido ligada con ayudar a mantener niveles más bajos de colesterol, concluyó.