El reflujo gastroesofágico, también conocido como acidez estomacal o agruras, es una enfermedad muy común, se estima que un 10 al 20% de la población occidental la ha presentado.
¿Cuáles son los síntomas del reflujo gastroesofágico?
Los síntomas típicos del reflujo son:
- Agruras.
Que es una sensación de ardor que aparece en la boca del estómago y sube por el pecho, en ocasiones hasta la garganta.
- Regurgitación.
Que es la sensación de ácido y comida que sube del estómago hasta la boca.
El reflujo gastroesofágico se debe al mal funcionamiento del esfínter esofágico inferior (EEI), la válvula que se encuentra entre el esófago y el estómago. Esta válvula permite que pase la comida e impide que regrese al esófago, pues la exposición al ácido puede lastimar esta válvula.
¿Qué pautas de alimentación se deben seguir si se tiene reflujo esofágico?
Se recomienda una dieta blanda libre de irritantes en caso de reflujo gástrico.
Aún después del tratamiento médico es importante seguir con el régimen dietético para una completa recuperación y evitar recurrencias y complicaciones.
Es necesario aclarar que una dieta blanda , no es una dieta blanda suave de consistencia, más bien es una dieta libre de condimentos e irritantes.
- Bebidas que debes restringir en caso de reflujo gástrico
-Evita café y bebidas alcohólicas.
Debes restringir el consumo de café, café descafeinado, bebidas con cafeína, como algunos tés y bebidas con chocolate.
- Evita sodas y refrescos con cafeína o a base de cola.
-Té e infusiones de cítricos.
-Té con cafeína.
Haz comidas ligeras y frecuentes en caso de reflujo gástrico
El tamaño y frecuencia de las comidas debe determinarse individualmente. Generalmente se recomienda comidas con porciones pequeñas y frecuentes.
-Evita alimentos irritantes y condimentados.
Restringe los alimentos y condimentos que irritan la mucosa gástrica, entre ellos chocolate, cebolla, ajo, chile, salsas picosas y alimentos picosos . Así como condimentos como pimienta, chile en polvo, canela, mostaza, curry, mole, achiote, entre otros.
- Evita alimentos ácidos como frutas cítricas como limón, naranja, mandarina, toronja y jitomate, por ejemplo.
-Evita comer alimentos fritos y grasosos, entre ellos las vísceras, embutidos o carnes procesadas. Así como comidas muy elaboradas o ultra- procesadas. Siempre revisa los ingredientes incluidos en las etiquetas.
-Evita el tabaco.
Inicialmente una dieta blanda es la mejor opción, sin alimentos irritantes. En forma gradual introduce otros alimentos a medida que los vayas tolerando. Omite comer alimentos que no toleres y que notas que empeoran los síntomas.
Recuerda evitar los alimentos irritantes y las bebidas alcohólicas hasta que te recuperes por completo. Y mantenerte relajado ayuda mediante técnicas de respiración y meditación, aunado a tu tratamiento médico.
Frecuencia de las comidas en caso de reflujo
En general se recomiendan comidas frecuentes cada 3 o 4 horas en raciones pequeñas y ligeras.
Deja de comer 3 horas antes de ir a dormir y recuerda dormir con cierta inclinación con almohadas o elevar ligeramente el colchón en uno de los extremos.
¿Tomar leche puede aliviar síntomas de acidez estomacal?
Beber leche puede ayudar a mejorar síntomas de acidez estomacal debido a su alto contenido en calcio. Según estudios publicados en la revista J. Neurogastroenterol Motil en 2019. La leche da una sensación de alivio al tomarla.
No obstante el consumo de leche entera o descremada puede estimular la producción de ácido gástrico por su contenido en proteínas. Entonces lo prudente es observar tu tolerancia.
Consulta a tu médico para un diagnóstico y tratamiento adecuado del reflujo gástrico.
Recuerda incluir una dieta blanda, sin alimentos irritantes ni condimentados. Haz comidas frecuentes en pequeñas porciones.
Trata de manejar el estrés cotidiano. El ejercicio diario, el yoga y la meditación son algunas alternativas para controlar el estrés.
Los tratamientos actuales para el reflujo esofágico les dan a los pacientes la oportunidad de escoger alternativas menos invasivas que las utilizadas en décadas pasadas y que se ajusten mejor a sus necesidades. Acude con tu médico para obtener más información sobre estas terapias.