Los hallazgos realizado por investigadores del Centro Médico Langone de la Universidad de Nueva York en Estados Unidos y que fueron presentados en la reunión anual del Colegio Americano de Cardiología (ACC, por sus siglas en inglés) resaltan que estar casado tiene un riesgo del 5% menor de sufrir una enfermedad cardiovascular que la soltería.
Viudas y personas divorciadas mostraron ser entre un 3 y 5% más propensos a sufrir de algún tipo de enfermedad cardiovascular, incluyendo la enfermedad arterial periférica, enfermedad cerebrovascular, aneurisma de la aorta abdominal y enfermedad de la arteria coronaria.
Para llegar a dicha conclusión, los científicos analizaron los resultados de una encuesta realizada entre el año 2004 y 2008 a 3.5 millones de hombres y mujeres estadounidenses en 20,000 centros de salud en todo el país.
De acuerdo a los resultados, entre los factores de riesgo de las enfermedades cardiovasculares, el tabaquismo fue mayor en las personas divorciadas (31%) y menor en las personas viudas (22%). La obesidad fue más frecuente en las personas solteras y divorciadas (al 31 y 30%, respectivamente). La hipertensión, la diabetes y el sedentarismo fueron más comunes en las personas viudas (al 77, 13 y 41%, respectivamente).
Los efectos protectores del matrimonio fueron aún más pronunciados entre los participantes casados más jóvenes (menores de 50 años), quienes mostraron tener un riesgo 12% menor de desarrollar enfermedad cardiovascular en comparación con las personas jóvenes solteras, mientras que en las parejas de edades comprendidas entre 51 y 60 años este riesgo es un 7% inferior, y solo un 4% más bajo entre los cónyuges de 61 años y más.
El Dr. Jeffrey Berger, cardiólogo y autor principal de estudio indicó en un comunicado difundido por la Universidad de Nueva York que se necesita más investigación para comprender mejor las razones por las que el estado civil influye en el riesgo de enfermedades del corazón, pero sugirió que una pareja en matrimonio ofrece un sistema de apoyo físico y emocional en tiempos de enfermedad y salud general.
"Las personas casadas pueden cuidar de sí, asegurándose de que su cónyuge coma sano, se ejercite regularmente, y tome la medicina según lo prescrito", aseguró. "Un cónyuge también puede ayudar a mantener las citas médicas y proporcionar el transporte, por lo que para facilitar el acceso a servicios de atención de la salud”, añadió.
Enfermedades cardíacas
De acuerdo con el Instituto Nacional del Corazón, los Pulmones y la Sangre (NHLBI, por sus siglas en inglés) existen muchos tipos de enfermedades cardiacas pero la causa más común es el estrechamiento o bloqueo de las arterias coronarias, los vasos sanguíneos que suministran sangre al propio corazón. A esto se le llama enfermedad de las arterias coronarias y se desarrolla lentamente con el transcurso del tiempo. Es la causa más importante por la cual las personas sufren infartos.
Otros tipos de problemas cardíacos pueden ocurrir en las válvulas del corazón, o el corazón puede no latir bien a causa de una insuficiencia cardiaca. Ciertas personas nacen con una enfermedad cardiaca.
Por su parte, la Asociación Americana del Corazón refiere que más de 82 millones de personas en los Estados Unidos tienen alguna enfermedad del corazón y de los vasos sanguíneos. Cada año más de 813,000 personas mueren a causa de estas enfermedades, más de 33% de todas las muertes en EE.UU.
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