Las sorpresivas causas de la anemia

Una mujer de 92 años de edad, mi paciente desde hace mucho tiempo y que aún ejerce su profesión como profesora de piano, vino a que le hiciera un examen preoperatorio. Ella estaba experimentando dolor en un hombro que no la dejaba tocar el piano y había decidido someterse a una cirugía. Para nuestra sorpresa, los exámenes preoperatorios de sangre mostraron que tenía anemia moderada, una disminución en el número de glóbulos rojos, cuya misión es abastecer de oxígeno al resto de las células del cuerpo.

A pesar de que la anemia puede causar síntomas poco específicos como fatiga y vértigo o mareo, tiene pocas señales evidentes y la condición con frecuencia es pasada por alto, especialmente en los adultos mayores.

Las sorpresivas causas de la anemia
| Foto: ISTOCK

La investigación muestra que el estar anémico empeora significativamente los resultados de las cirugías, así que la reparación del hombro se tuvo que postergar hasta curar la anemia. Para hacer esto, fue necesario precisar la causa.

La causa probable era un sangrado interno, provocado posiblemente por el ibuprofeno que ella estaba tomando para el dolor del hombro. Pero, una endoscopia superior (en que se introduce un tubo flexible hasta el estómago) no reveló la fuente del sangrado. Una colonoscopia tampoco mostró nada. Perplejo, la referí a un hematólogo, un especialista en sangre.

La anemia no es una enfermedad sino un signo de una, y posiblemente grave, así que encontrar la razón es importante. Y la anemia, en especial la anemia leve, es frecuente a medida que envejecemos. Un informe en la revista American Family Physcian destaca que más del 10% de las personas mayores de 65 años tienen cierto grado de anemia.

Cuando los niveles bajos de hierro es el problema

Existen muchas causas posibles, pero la más frecuente es la deficiencia de hierro debido a la pérdida de sangre. La anemia por pérdida de sangre se produce en casi 9 al 14% de las mujeres premenopáusicas como resultado del sangrado menstrual. Pero en los hombres y en las mujeres posmenopáusicas este tipo de anemia es casi siempre provocada por un sangrado gastrointestinal. Ese sangrado es con frecuencia provocado por el uso generalizado de la aspirina (sí, incluso la aspirina de bebé) y por analgésicos no esteroides como el ibuprofeno (Advil, Motrin IB y sus genéricos) y naproxeno (Aleve y su genérico).

Otras razones para el sangrado gastrointestinal incluyen las úlceras, los pólipos, las hemorroides y hasta el cáncer. La deficiencia de hierro también puede producirse en la ausencia de sangrado, por una dieta baja en hierro o por la poca absorción de hierro, como en la enfermedad celiaca grave o colitis.

Para descartar otras causas

Una deficiencia de vitamina B12, que se requiere para la producción apropiada de glóbulos rojos en la médula ósea, es otra causa frecuente de anemia. La habilidad de absorber la vitamina B12 está comprometida en 1 de 3 personas mayores de 60 años, posiblemente por la disminución de la producción de ácido en el estómago que se presenta con la edad.

También está disminuido en las personas con anemia perniciosa o con enfermedad inflamatoria intestinal como la enfermedad de Crohn y en aquellos que con regularidad usan el fármaco para la diabetes metformina (Glucophage y su genérico) y medicamentos para la acidez gástrica, como el esomeprazol (Nexium y su genérico), el lansoprazol (Prevacil y su genérico) y el omeprazol (Prilosec y su genérico).

Aún hay más posibilidades: La enfermedad renal crónica y la infección crónica conduce a la baja producción de glóbulos rojos. Las células cancerosas pueden invadir la médula ósea y desplazar las células generadoras de la sangre. Ciertos medicamentos pueden causar que los glóbulos rojos se cubran con un anticuerpo. Esto puede llevar a que las células mueran en un tiempo menor a su ciclo de vida de 3 meses.

Si con frecuencia experimentas fatiga y te sientes levemente mareado, consulta con tu médico, sobre todo si tomas regularmente analgésicos de venta libre como aspirina, ibuprofeno y naproxeno. Y toma nota de que que las deposiciones negras o alquitranadas pueden ser una indicación de sangrado interno. Si un simple examen de sangre indica anemia, se debe buscar la causa porque el tratamiento tiene que ser específico para el agente causante.

Un misterio resuelto

Entonces ¿qué pasó con mi paciente, la profesora de piano? El hematólogo me dijo que la causa de su anemia era cáncer, un linfoma de bajo grado. Después de varios tratamientos con un medicamento de anticuerpos y dos transfusiones de sangre, ella se sometió a la cirugía para reparar el tendón de su hombro y eventualmente volvió a dar clases a futuros virtuosos pianistas.

By: Marvin M. Lipman, M.D.

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