Los hallazgos publicados en la revista Nature, refieren que el tratamiento con resveratrol tendría efectos positivos en términos de aprendizaje, la memoria y la función de estado de ánimo en la vejez.
Para el estudio, los investigadores dirigidos por el Dr. Ashok K. Shetty, realizaron un experimento con ratones. Durante un período de dos años un grupo de ratones recibió un tratamiento a base de resveratrol y un grupo control un placebo. Los resultados mostraron que los roedodores a los que se les administró el resveratrol habían mejorado considerablemente su aprendizaje espacial y su memoria, mientras que en los del grupo placebo se redujo la capacidad de crear nuevos recuerdos espaciales.
Además, la neurogénesis (producción de neuronas en el sistema nervioso central) se duplicó en los ratones que recibieron resveratrol en comparación con los otros y se observó un mejor flujo de sangre en el cerebro y un nivel inferior de la inflamación crónica en el hipocampo.
"Los resultados del estudio fueron notables", afirmó Shetty en información difundida por Texas A&M HSC. "Para las ratas que no recibían resvaratrol, la habilidad de aprendizaje espacial principalmente se mantenía, pero la habilidad de crear nuevas memorias espaciales disminuyó significativamente entre los 22 y 25 meses. En contraste, tanto el aprendizaje especial como la memoria mejoró en los roedores tratados con resvaratrol", añadió.
"El estudio provee nueva evidencia de que el tratamiento con resveratrol a finales de la adultez pueden ayudar a mejorar la memoria y el funcionamiento del ánimo en la vejez", enfatizó la investigadora.
El resveratrol es un compuesto natural que se clasifica como polifenol (antioxidantes naturales) y se encuentra contenido en más de 70 especies de plantas entre las que se incluyen algunos frutos secos, la piel de las uvas y el vino tinto, de acuerdo con Natural Standard, una empresa de investigación internacional sobre medicina alternativa.
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Es normal olvidar cosas de vez en cuando. Todos hemos olvidado un nombre, dónde dejamos las llaves o si cerramos la puerta de la calle. Las personas mayores que se olvidan de cosas con más frecuencia que otras personas de su edad, pueden sufrir de deterioro cognitivo leve. Pero olvidarse cómo se usa el teléfono o cómo llegar a casa pueden ser signos de un problema más serio. Entre ellos se encuentran la enfermedad de Alzheimer u otros tipos de demencia, derrame, depresión, lesiones en la cabeza, problemas tiroideos o reacciones a determinadas medicinas.
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