Los médicos ya sabían que para sostener su crecimiento, los tumores cancerosos consumen mucho más glucosa que los tejidos sanos. Sobre esa base, investigadores de la University College London Centre for Advanced Biomedical Imaging (CABI), de Reino Unido, han descubierto una nueva forma de detectar el cáncer mediante el azúcar y la Resonancia Magnética.
"GlucoCEST utiliza ondas de radio para etiquetar magnéticamente la glucosa en el cuerpo", explicó el Doctor Simon Walker-Samuel. "Ésta puede ser detectada en tumores utilizando técnicas convencionales de Resonancia Magnética. El método consta de una inyección de azúcar en el paciente, que "delata" la presencia de tumores", señaló el investigador.
Puntos clave
Después de sensibilizar un escáner de Resonancia Magnética para la captación de glucosa, los investigadores fueron capaces de hacer que los tumores aparecieran como imágenes brillantes al hacer las pruebas de laboratorio.
"Podemos detectar el cáncer inyectando el mismo contenido de azúcar que se encuentra en una barra de chocolate de tamaño estándar", añadió el autor principal, profesor Mark Lythgoe. Y añadió que la investigación podría hacer posible que los pacientes se sometan a pruebas de detección del cáncer en sus hospitales locales, en lugar de tener que ser remitidos a los especialistas.
El descubrimiento aparece en la última edición de la revista Nature Medicine. "Nuestra investigación interdisciplinaria podría permitir que los grupos de pacientes vulnerables, como las mujeres embarazadas y los niños pequeños, se sometan a chequeos de detección de cáncer con mayor regularidad, sin los riesgos asociados de una dosis de radiación", dijo el profesor Xavier Golay, quien participó en la investigación.
Los científicos esperan que el nuevo sistema de detección permita arribar a tratamientos más tempranos del cáncer.