La preocupación por el avance de ciertas enfermedades no es igual en todos los países. Por ejemplo, el sida y el alcohol son las mayores amenazas para la salud entre los rusos, la desnutrición amenaza los niños en África y Afganistán, y la violencia está cobrando la vida de muchos jóvenes en gran parte de América Latina.
Para establecer qué es lo que más afecta a cada lugar, el equipo de la Universidad de Washington, en Seattle, comparó diferentes causas de muerte y enfermedades en 187 países. Se examinaron miles de fuentes de datos, certificados de defunción individuales y encuestas mundiales sobre la enfermedad, para elaborar el informe.
Puntos clave
Y en particular, para conocer de cerca las enfermedades que más crecen en Estados Unidos. Así, se comprobó lo que ya decían otras entidades, como la Asociación contra el Alzheimer: EEUU tendrá que hacer frente a un gran caudal de enfermos de Alzheimer, a medida que la población envejezca.
Otro informe de febrero de 2013, también alerta sobre el crecimiento del Alzheimer y prevé que el número de pacientes con esta forma de demencia incurable, se triplicará en los próximos 40 años y llegará a 13,8 millones en 2050.
Además, se observaron los malos hábitos que afectan a la salud. "En general, los tres factores de riesgo que dan cuenta de la mayor carga de la enfermedad en los Estados Unidos, son la alimentación poco sana, el tabaquismo y el alto índice de masa corporal", dice el informe.
Aunque los datos revelados son preocupantes, hay algunas buenas noticias. "De las 25 causas más importantes de muerte, la violencia interpersonal mostró una gran disminución: cayó un 26% entre 1990 y 2010", según el relevamiento.
Hay otra buena noticia en el estudio: las infecciones por el sida parecen haber alcanzado su máximo nivel mundial y la gente vive vidas más largas y saludables. "Si bien el VIH/Sida se ha cobrado un precio devastador en muchos países de África, la epidemia parece haber alcanzado su punto máximo en 2004", cita el informe.
Las tasas de mortalidad por VIH están disminuyendo, según la Organización Mundial de la Salud. Los programas para tratar a los pacientes con cócteles de medicamentos, realmente salvan vidas y también pueden prevenir nuevas infecciones. "Este éxito se debe en gran medida a la ampliación masiva de la terapia antirretroviral en la última década", señala el informe.