Vacas ayudarían a luchar contra el Ébola

A simple vista son vacas que no tienen nada en especial. Pero estas 50 Holstein-Jersey blancas y negras hacen algo más que rumiar y producir leche: están generando litros de plasma sanguíneo que podría utilizarse para tratar a las personas con el virus del Ébola, que infectó a más de 21,000 personas en África occidental.

"Estos animales producen niveles muy altos de anticuerpos humanos," dijo a NBC News Eddie Sullivan, CEO de SAB Biotherapeutics, la empresa que desarrolló la modificación del ganado. Éste ha sido diseñado genéticamente con ADN humano para que produzca los mismos anticuerpos que las personas.

| Foto: SHUTTERSTOCK

El ganado es vacunado contra varias enfermedades mortales como el Ébola y como consecuencia produce una respuesta: son los anticuerpos que se utilizarían para tratar a las personas que contraen la enfermedad, un enfoque similar al de la transfusión de plasma de sobrevivientes del Ébola en pacientes.

Por su parte, las pruebas de las transfusiones de sobrevivientes en personas enfermas de Ébola están en marcha y se testean en Liberia y en el Hospital de la Universidad de Emory, en Atlanta.

El principio es claro: cuando una persona o animal se infectan, el cuerpo produce anticuerpos y células inmunes para combatir a los gérmenes invasores. Pero el sistema inmune humano es especialmente avanzado porque puede producir anticuerpos y células inmunes (células T) que tienen memoria sobre las infecciones previas y les permite defenderse de una segunda infección provocada por el mismo germen.

¿Sangre sanadora?

Muchos pacientes sobrevivientes del Ébola -como el Dr. Kent Brantly- han donado su sangre para ayudar a otros enfermos a curarse, y en ese camino va este desarrollo que genera gran expectativa.

Lo bueno es que el ganado podría producir anticuerpos a mayor escala. "A partir de estos animales podemos recoger de 30 a 60 litros de plasma cada mes," expresó Sullivan. "Podría significar entre 500 y 1,000 dosis humanas de vacunas mensuales por cada animal" agregó.

La compañía SAB Biotherapeutics trabaja en colaboración con el Instituto de Investigación Médica de Enfermedades Infecciosas del Ejército de EE.UU. (USAMRIID por su sigla en inglés). El siguiente paso será probar el método en monos, y si funciona, se pasaría a la fase del testeo en personas.