El sedentarismo es uno de los males de la vida moderna, y las limitaciones que provoca la actual pandemia por coronavirus puede hacerlo más peligroso de lo que imaginamos. Por suerte, con pequeños cambios en nuestra rutina podemos provocar grandes mejorías en nuestro organismo y convertir la actividad física en un estilo de vida. Aquí te contamos cómo lograrlo:
Estilo de vida sedentario
El estilo de vida sedentario consiste en estar mucho tiempo sentado o acostado, haciendo poco o nada de ejercicio. Esto puede ser la causa de muchas enfermedades crónicas, como obesidad, niveles de colesterol y presión arterial alta, síndrome metabólico, diabetes, osteoporosis e incluso ciertos tipos de cáncer. Puedes combatirlo con los siguientes cambios en tu estilo vida:
Aunque los beneficios de hacer ejercicios abundan, al momento de realizarlo nos enfrentamos con un gran obstáculo: la falta de motivación. Por este motivo, los especialistas recomiendan aprovechar una parte de la vida cotidiana para comenzar a hacer frente a la vida sedentaria: caminar. Está comprobado que es una buena forma de cuidar al organismo y una vía de entrada a la actividad física.
Utilizar las escaleras te ayuda a consumir dos veces más calorías que caminar, y es considerado un ejercicio de tipo cardiovascular. Por lo tanto, subiendo escaleras regularmente estamos contribuyendo a cuidar nuestro corazón y vasos sanguíneos. Recuérdalo la próxima ves que vayas a elegir el ascensor.
3. Muévete durante la jornada
La oficina, por lo general, suele ser el lugar donde pasamos la mayor parte del día. Invertir menos de dos minutos por hora para hacer ejercicios sencillos y estiramientos prevendrá las consecuencias del sedentarismo, reducirá las molestias físicas, te ayudará a despejar la mente y liberarte del estrés acumulado.
Puedes incorporar los pasos durante cualquier actividad que realices a diario: camina mientras conversas por teléfono, o párate, y da unos pocos pasos mientras trabajas. Aunque no lo parezca, puedes obtener grandes resultados de forma sencilla. Por ejemplo, si hablas una hora por teléfono y caminas mientras tanto, puedes llegar a gastar hasta 70 calorías.
Si quieres pasar tiempo con tus hijos y promover en ellos el ejercicio, la mejor manera es dar el ejemplo. Convierte la actividad física en un componente esencial de tu vida familiar, así le inculcarás a tus hijos hábitos saludables desde sus primeros años de vida para que luego sean adultos saludables.
6. ¡Baila!
Bailar, además de ser una actividad divertida y relajante, aporta muchos beneficios para la salud. En general, está indicado para toda clase de personas, pero es una actividad perfecta para aquellos a los que no les gustan los gimnasios o practicar deportes.
7. Desempolva la bicicleta
Andar en bicicleta puede tener mejores resultados de lo que te imaginas. Pedalear se ha vuelto una moda ecológica y es una buena manera de estar en condición casi sin darse cuenta. Aunque las piernas son las más activas en este ejercicio, también estás trabajando la parte superior del cuerpo, pues permite mantener balance y equilibrio.
8. Cuidado con las pantallas
Mientras más televisión o tiempo pasan frente a una pantalla las personas, menos ejercicio hacen. Sin embargo, se puede aprovechar ese tiempo, y, mientras miras tus videos o programas favoritos, realiza una rutina o tabla de actividades cómodamente desde tu hogar. ¡Haz la prueba!
9. Ejercicio con las compras
El consejo de aprovechar cualquier oportunidad para moverte también se extiende para las compras. Prueba hacerlas caminando, o, si necesitas del auto, estaciónalo un poco más lejos de los normal. Recuerda, hasta el cambio más pequeño hace la diferencia.
10. Usa un podómetro
El podómetro es un aparato pequeño empleado para calcular el número de pasos efectuados cada día y puede ser de mucha utilidad para las personas que quieren estimular el hábito del ejercicio. También puedes conseguir aplicaciones para tu teléfono. De esta forma podrás hacer un seguimiento, buscar mantenerlo o incluso superarlo día a día.
Fuentes consultadas
Asociación Estadounidense del Corazón, Biblioteca Nacional de Medicina de EE. UU., Clínica Mayo, Instituto Nacional del Corazón, los Pulmones y la Sangre, Organización Mundial de la Salud.