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Objetos extraños que se alojan en el cuerpo
Por HolaDoctor
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Ver para creer
Desde simples tenedores hasta sombrillas y clavos, algunos objetos han encontrado su hogar dentro del cuerpo humano provocando graves lesiones y complicaciones en los pacientes. Son casos extraordinarios que te dejarán con la boca abierta.
Lee Gardner, un británico de 40 años se llevó un gran susto cuando comenzó a vomitar sangre y a sentir fuertes calambres en el estómago, por lo que acudió a un centro médico. Ya en el hospital los doctores le explicaron que tenía alojado un cubierto en su estómago y que por eso se habían originado los malestares.
“Cuando me lo tragué (hace 10 años) me dijeron que lo iría expulsando poco a poco de manera natural, así que no me volví a preocupar por ello”, explicó Gardner. Sin embargo, esto no sucedió así y el objeto de plástico permaneció intacto en su interior hasta que surgieron algunas complicaciones.
¿Qué tan peligroso puede ser esto?
En alguna ocasión Gardner sintió una molestia cuando inclinó su cuerpo y sintió que algo se le clavaba por dentro, esto se debió a que las púas del cubierto habían ejercido presión sobre el estómago, lo que dio origen a una hemorragia.
“El caso de Lee es inusual”, comentó Hanis Shiwani, el cirujano que lo operó. “No solo porque el objeto es un tenedor, sino porque solo tenemos constancia de un puñado de casos como este donde un objeto extraño ha estado dentro de una persona durante tanto tiempo”.
Removieron la pieza
Para extraer el tenedor de su estómago, los médicos decidieron abrirle y después de 45 minutos de operación, extrajeron el cubierto entero, aunque algo corroído por los ácidos que produce el cuerpo humano.
Ingerir objetos extraños
La Biblioteca Nacional de Medicina informa los peligros de que al hacer esto, éstos pueden atorarse a lo largo del tubo digestivo, lo cual puede llevar a una infección, una oclusión o una ruptura en el tracto gastrointestinal.
Pon mucha atención
Es importante que detectes los principales síntomas para actuar de manera inmediata, como son: la asfixia, tos, ausencia de la respiración o problemas para respirar y silbilancias (un sonido chillón que se presenta cuando las vías respiratorias están obstruidas).
Se enterró un paraguas en el rostro
La estadounidense Jessica Yates se encontraba sumamente ebria que ni se dio cuenta en qué momento se incrustó una sombrilla en su cara, ya que mientra se aventaba hacia su cama, el objeto se clavó en su cabeza: “Por fortuna estaba borracha y no sentí que me doliera” comentó.
Tras llegar a urgencias los médicos optaron por cortarle la parte del paraguas que colgaba de su rostro. Después sacaron los 15 centímetros del mango del objeto que se había metido a su nariz. El cirujano que la atendió explicó que estuvo a un centímetro de necesitar reconstrucción facial.
Lo que implica la reconstrucción
Para esta cirugía se deben cortar y reubicar algunos huesos de la cara. Se pueden tomar pedazos de hueso de la pelvis, las costillas o el cráneo para llenar los espacios. Por lo general la intervención tarda de 4 a 12 horas y puede ocasionar mucha hinchazón de la cara por semanas.
Según información de Medicina de Urgencias, entre el 80 y 90 % de los cuerpos extraños ingeridos atraviesan el tubo digestivo y se eliminan en forma espontánea; el 10 y 20 % requiere tratamiento no quirúrgico, y menos del 1 % amerita operación.
Se tragó 42 imanes del refrigerador
Mientras era desatendido por su madre un pequeño de 18 meses de edad hizo de las suyas e ingirió más de 40 piezas magnéticas. Al percatarse que faltaban imanes, su mamá decidió llevarlo con el médico y tras someterlo a rayos X confirmó lo que tanto temía.
Cirujanos del área de pediatría se encargaron del caso del bebé y llevaron a cabo una operación para extraer las piezas, la cual terminó con éxito. “Una vez retiré 20 objetos de un jovencito, pero este incidente de nuestro pequeño paciente supera los registros”, comentó uno de los doctores.
Cuida a los pequeños
Los niños de 1 a 3 años de edad son más propensos a tragarse o inhalar un objeto extraño. Estos elementos pueden incluir una moneda, una canica, el borrador de un lápiz, botones, cuentas u otros elementos o alimentos pequeños.
Se debe vigilar a cualquier niño que se crea que ha ingerido un objeto extraño para verificar si presenta dolor, fiebre, vómitos o sensibilidad localizada y se deben examinar las heces para ver si el objeto salió del cuerpo. Algunas veces, esto puede causar sangrado rectal o anal.
Víctor Benavides, de 28 años estaba reparando un techo en EU cuando una potente pistola de clavos se sacudió de su mano y se disparó por accidente impactando un clavo recto de 3,25 pulgadas (8 cm aproximadamente) en su rostro.
En esta increíble radiografía se muestra la profundidad con la que penetró el clavo sobre la cabeza de Benavides, el cual estuvo a un milímetro de llegar a su cerebro y de causar daños adicionales como ceguera e incluso la muerte. Pese al accidente, el hombre dijo no haber sentido dolor alguno.
Los médicos encargados de operarlo, utilizaron un extractor dental para poder sacar la pieza metálica del rostro del constructor. El clavo fue retirado tirando de éste a lo largo de la misma ruta con que penetró.
Sin daño alguno
Después de sufrir este incidente, Víctor se encuentra recuperado e incluso ha vuelto a trabajar y a usar la misma pistola con que se accidentó. “Tengo suerte de estar vivo”, comentó.
Traumatismo cerebral
De acuerdo con el Instituto Nacional de Salud éste es causado por una fuerza, un golpe fuerte o una lesión penetrante de la cabeza. Aproximadamente en Estados Unidos cada año aproximadamente 1.5 millones de personas sufren este daño.