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Las 10 enfermedades que avergüenzan a los hombres
Por csixto@holadoctor.net
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1. Falta de erección
Un hombre que falla en la cama es un hombre inseguro. Por lo menos así es como se sienten los hombres que tienen dificultades para lograr una erección. Pero a pesar del pudor que puede producir preguntarle a un médico, asistir a una consulta es fundamental para descartar algunos problemas de salud relacionados con la disfunción eréctil o falta de erección.
La mayoría de las causas que provocan la disfunción eréctil están vinculadas a problemas de salud, que requieren tratamiento, explica el Centro Coordinador Nacional de Información sobre las Enfermedades Renales y Urológicas. Entre ellas, menciona: presión arterial alta, colesterol alto, diabetes, abuso de drogas o alcohol, tabaquismo, obesidad, sedentarismo, entre otros.
2. Eyaculación precoz
Aunque la mayoría de los hombres se avergüenza por hablar de este tema, explica la Clínica Mayo, la eyaculación precoz es una condición común y tratable. De hecho, se estima que uno de cada tres hombres sufrirá en algún momento de su vida de este problema. Puede desencadenarse debido a factores psicológicos o biológicos.
Lo peor que les puede pasar a estos hombres es ir a una piscina. Allí, no les queda otra opción más que quitarse la camisa y lucir su torso peludo. Más diagnosticado en mujeres que en hombres, el hirsutismo es “una condición en la que crece demasiado vello en la cara o en el cuerpo”, define la Academia Estadounidense de Médicos de Familia. Pero la cara no es un problema.
La mitad de las mujeres no quieren hombres peludos
Así lo demostró un estudio realizado por la Clínica Londres, reproducido por Informe 21, que dice que las españolas eliminarían el vello de los hombros y de la espalda de los hombres. Algunos medicamentos como los esteroides o corticosteroides anabólicos también pueden incrementar la producción del vello. Cada vez más hombres acuden al láser para remover el vello no deseado.
4. Sudoración excesiva y feo olor
Si bien es cierto que el calor y el ejercicio provocan que una persona transpire, hay otros factores que también pueden producir sudoración: el nerviosismo y la ansiedad. La transpiración “emocional” es más común que aparezca en la cara, en las axilas, en las palmas de las manos y en las plantas del pie.
Los cambios bajo la lupa
Según los médicos de la Clínica Mayo, es más preocupante el olor que el sudor. Cuando la transpiración incluye un olor desagradable podría haber una bacteria en la piel. Los hombres que pasan de transpirar mucho (hiperhidrosis) a sudar poco o nada (anhidrosis) deben consultar al médico, ya que podría ser la señal de alguna enfermedad o condición.
5. Gases
Hay hombres que no necesitan ocultarlos, pero para los más tímidos o inseguros, tener gases puede significar una verdadera tragedia. Ni pensar en la idea de consultar a un médico. Hay hombres que son más propensos a tener flatulencias. En especial aquellos que comen muchos frijoles y repollo, toman gaseosas o acostumbran masticar gomas de mascar.
Todas las personas tienen gas y lo eliminan a través de gases o eruptos, explica el Centro Coordinador Nacional de Información sobre las Enfermedades Digestivas. Pero la mayoría cree que tiene demasiado cuando en realidad tiene la cantidad normal. El promedio es tener 14 gases por día.
6. Ronquidos
Aunque es un problema bastante común, la mayoría de los “roncadores” se niega a aceptar que roncan y mucho menos a contárselo a un médico. Sin embargo, quienes roncan porque sufren de apnea del sueño podrían volverse irritables, olvidadizas, sentirse soñolientas mientras conducen e incluso quedarse dormidas al conducir. También podrían tener dolores de cabeza difíciles de tratar.
Consejos para dormir mejor
Luego de realizar un estudio del sueño o polisomnografía el médico podrá confirmar si sufres de apnea obstructiva del sueño y ofrecer algún tratamiento para mantener las vías respiratorias abiertas de modo que la respiración no se detenga mientras duermes. Además se recomienda: no beber alcohol ni tomar sedantes a la noche, no dormir boca arriba y bajar de peso.
7. Mal aliento
“Lo que comes afecta el aire que exhalas”, afirma la Asociación Dental Americana. Entre los alimentos que causan la halitosis o mal aliento figuran primeros en la lista el ajo y la cebolla. Pero también tienen olor desagradable quienes están a dieta y comen con poca frecuencia. Cepillarse los dientes y usar hilo dental pueden ayudar a tener un aliento más fresco, pero no a solucionar el problema.
Visita a tu dentista antes de abrir la boca
El mal aliento puede ser la consecuencia de varios problemas como: la enfermedad de las encías o periodontal, la boca seca (porque respirar por la boca o debido a problemas de glándulas salivares), el hábito de fumar o una infección en las vías respiratorias, diabetes, problemas gastrointestinales o enfermedad del hígado o riñones.
8. Barriga
Tener unas libras de más puede afectar la salud. Pero si esas libras están instaladas en el abdomen, el riesgo se multiplica. Según el Dr. Michael Jense, endocrinólogo de la Clínica Mayo, explica que “la barriga” incrementa el riesgo de sufrir una enfermedad cardíaca, alta presión arterial, ACV, algunos tipos de cáncer, diabetes tipo 2, resistencia a la insulina, triglicéridos altos, bajos niveles de HDL o colesterol bueno, síndrome metabólico y apnea del sueño.
¿Cuándo preocuparse por la pancita?
Para saber si un hombre está en riesgo, puede medirse la cintura y comparar con las medidas de la cadera. En la mayoría de los hombres, el riesgo de sufrir una enfermedad del corazón u otras enfermedades aumenta cuando la cintura es mayor a 40 pulgadas (102 centímetros).
9. Acné
Aunque es más común en adolescentes, hay muchos hombres de entre 30 y 40 que también padecen de acné, una afección cutánea que produce la formación de comedones cerrados, espinillas negras y protuberancias rojas e inflamadas (pápulas, pústulas y quistes), explica la Biblioteca Nacional de Medicina.
Si bien hay una predisposición hereditaria, hay ciertos productos o hábitos que pueden favorecer la aparición de “granitos”. Por ejemplo: los cambios hormonales, el estrés, algunos cosméticos o productos para el cabello grasoso y oleaginosos, determinados fármacos (esteroides, testosterona, estrógenos y fenitoína) y la sudoración o la humedad.
10. Caída del cabello
Debido a una fuerte asociación del pelo con la fuerza o la masculinidad, al hombre le cuesta aceptar cuando empieza a perder el cabello. Relacionada con la edad, el factor hereditario y la testosterona, a algunos hombres les da mucha vergüenza acudir al médico para consultar sobre la alopecía o acercarse a la farmacia a averiguar por algún producto para la caída del pelo.
Alrededor del 25% de los hombres empieza a perder el cabello, al llegar a los 30 años. Mientras que a los 60, la cifra de hombres pelados o con poco pelo asciende al 60%. Si bien las mujeres sufren por igual la caída del cabello, la alopecía heredada o androgénica es más común en el sexo masculino.