Famosos y el deporte extremo

No sólo es protagonista de un sinfín de películas de acción. Lejos de la atención de las cámaras, la actriz gusta poner su vida al límite, razón por la que practica el flyboarding, que consiste en una tabla a propulsión de agua que conecta con todas las motos de agua y permite prácticamente volar hasta 12 metros de altura.

Hecho: de acuerdo con varios estudios, se ha encontrado que practicar un deporte extremo puede generar altas dosis de adrenalina, una hormona que segregan las glándulas suprarrenales del organismo al experimentar situaciones de alerta o emergencia.

El actor argentino tampoco se queda atrás cuando se trata de divertirse a niveles extremos, por lo que practica el wakeboard, un deporte que mezcla el snowboard, surf y esquí acuático, y consiste en hacer todo tipo de piruetas y acrobacias en el agua mientras se es arrastrado por una lancha sobre un tipo de tabla.

Las partes del cuerpo que más se ejercitan con esta práctica son los brazos y piernas, ya que son las áreas donde se ejerce más fuerza. Por otra parte el torso, especialmente, los abdominales también trabajan al aguantar la cuerda que va sujetada a la lancha y al mantener el equilibrio.

El actor es un asiduo practicante del motocross, un deporte que si bien resulta caro, sobre todo por el costo de la moto y equipo de protección, es beneficioso para la salud ya que es una disciplina muy exigente a nivel cardiovascular. El entrenamiento previo a las carreras incluye correr, dar saltos, así como trabajo arduo de brazos y piernas.

De acuerdo con Miranda Hernández la adrenalina producida por un deporte extremo suele generar en el cuerpo una reacción de tipo “estrés positivo”. Sobre esto, el corredor de la serie Nascar Wendell Scott considera que sentirla “es como ser una adicto a las drogas o al alcohol. Entre más lo haces más te gusta”.

Cuando alguien es adicto a la adrenalina no le importa si pone su vida en peligro, lo cual puede significar una conducta de riesgo si la persona necesita todo el tiempo de experimentar esa emoción por ser la única forma de sentirse viva, comenta el psicólogo de la Universidad del Valle de México José Antonio Miranda Hernández.

En tanto, el actor brasileño de cine y televisión gusta aprovechar las olas que produce el mar para practicar el surf, un deporte extremo que propicia el contacto con la naturaleza y que muchas personas suelen practicar en época de verano.

El surf es un deporte esencialmente aeróbico, aunque también tonifica la musculatura del cuerpo, pues mientras uno rema sobre la tabla a la espera de las olas se trabajan los músculos de los brazos y espalda. También se ejercitan los glúteos, piernas y abdominales. A Anne Hathaway el surf la vuelve loca.

Pero eso no es todo. El surf también ayuda a mejorar la forma física de manera rápida, incrementa la fuerza muscular (más en la espalda, brazos y piernas) y ayuda a mejorar la coordinación de movimientos y el equilibrio. Otro fiel practicante del surf es el actor Edward Norton.

Se trata de otra de las actividades más preferidas del verano. Su uso no es complicado, necesitas una tabla de surf y una especie de remo para desplazarse. Aunque parece tarea sencilla, expertos aseguran que se trabajan varios grupos de músculos. No por nada, es uno de los deportes favoritos de la cantante Rihanna.

Además de esta especie de euforia que produce, se ha encontrado que la adrenalina relaja la musculatura de las vías respiratorias para que ingrese más aire por los pulmones. De igual forma hace latir más rápido y fuerte al corazón, las pupilas se dilatan, el sistema digestivo se retarda y sube la presión arterial.

En algunos casos la practica de deportes extremos podría volverse en una adicción, en especial, por el efecto que produce la adrenalina. "Cuando la persona quiere vivir este efecto de manera cotidiana o busca momentos cada vez más peligrosos, entonces podría considerarse que se atenta contra la vida", explica Miranda.

No sólo es intenso dentro del terreno de juego, sino también lo es fuera de éste. Además, de ser estratega de la selección mexicana de fútbol, Miguel “Piojo” Herrera también disfruta de las emociones fuertes, razón que lo llevó a aventarse del paracaídas.

No suficiente con manejar un vehículo de Fórmula 1 a máxima velocidad, el piloto inglés Lewis Hamilton también gusta de experimentar de la adrenalina en las montañas, por lo que practica alpinismo, un deporte del que se calcula quema entre 700 y 900 calorías por hora gracias a que se trabajan casi todos los grupos musculares.

Para la realización de la serie “Arranque de pasión” la actriz mexicana Kate del Castillo tuvo que meter a fondo el acelerador, y es que para interpretar el personaje de Ela, una mujer que compite en la serie Nascar, tuvo que adentrarse en el mundo del automovilismo, donde la adrenalina se vive en todo momento.

Para aquellas personas que la adrenalina los domina existe un tratamiento, el cual incluye terapia farmacológica y psicológica, explica Miranda Hernández. Como consejo, señaló que es positivo vivir experiencias intensas, pero no como una adicción sino como parte del aprendizaje de la vida.